Sσℓσ ∂єѕєσ ¢αяиαℓ. яυвєgєттα.

💣Capítulo 19💣

Me dolía el labio, el cabron de Mangel tenía una muy buena derecha.

Me levanté del sofá al oír que llamaban al timbre, con mucha pereza me encamine a la puerta y abrí, encontrándome con Vegetta, su rostro era neutro.

—¿Qué pasa? —pregunte.

—¿Alex, eh? —dijo entrando en mi casa km permiso —. Te mereces es puñetazo.

—¿Y qué más te da que haya tenido algo con Alex? —dije rodando lo ojo cerrando la puerta y caminando asta él.

—¡A mí me la pela! —exclamo.

Entonces sonreí, estaba celoso y no lo admitía.

—Vale, ¿Has venido a por algo o solo a molestar, es que tengo planes? —dije.

—¿Con quien?

—No te importa, ¿Solo era eso? Un placer tenerte.

¿Por qué lo hechas? ¡No hagas eso, imbécil! ¡Nos está hablando! ¡Llevamos tiempo sin tenerlo tan cerca!

—¡Callate ya, joder! -exclamé lleno de ira, Vegetta me miró confundido —. No es nada, olvida que eso ocurrió.

Me miró confundió —. Te he traído esto, solo e venido a traerlo, Willy no podía —dijo dándome la invitación.

Con una sonrisa irónica la tomé —. Increíble, te casas con alguien que no quieres, haya tu Vegetta, es tu vida.

—¡Si le quiero! —exclamo indignado, le ignore guardando la carta en el mueble de la entrada.

—¿Seguro? ¿Entonces por qué tan frío con él? ¿Por qué no le tocás? ¿Por qué a la hora del sexo me prefieres a mi siempre? —pregunte, pero este se mantuvo en silencio, sonreí —. Se que sientes algo por mi, aunque sea muy poco.

Este sonrió.

—No siento nada por ti, no te hagas ilusiones Doblas, hicimos un pacto, solo...

—¡Solo deseo carnal, lo sé, lo e pillado! ¡Pues que quieres que te diga nunca cumplo los pactos!

—¿Qué quieres decir eso? —pregunto confundió.

—Vegetta creo que es hora de que te marches, Alex vendrá y... —no me dio tiempo a responder cuando se lanzó encima de mi tirándome al suelo con este encima —. ¿Qué haces puto loco?

—¿¡Con Alex!? ¡No aprendes! ¡Es de tu amigo! —grito como animal enjaulado.

—¿Y? —grite —. ¿¡Qué más te da eso a ti!?

—¡Meda! —exclamo.

Sonreí.

—¡Estas enloqueciendo Vegetta! Me has echado de tu vida tanto sexual como amistosamente, déjame que me busque mi nueva diversión —dije mosqueado intentando levantarme, cogió ambas muñecas y me aferró bien, no podía moverme —. ¿Creías que me afectaría a ti aunque me echaras? ¿Enserio? ¡Nunca te espere! ¡Oíste! ¡Solo éramos juguetes el uno del otro! ¿No?

Lo extrañamos tanto, deja de mentir, con Alex te echaste atrás después de haber oído a Vegetitta.

—Pues yo si espere por ti, y no me iré sin un polvo —dijo lamiendome el cuello realmente no me reuse.