Capítulo 50. H | Planes

7.1K 424 77
                                    

Hero

—Tienes que mejorar tus puntos de reunión, sigues estancado en lo mismo desde hace años. No dudo que Travis sospeche que alguien está siguiéndole los pasos.

La mirada de Frank viaja de su escritorio hacia mí, aunque parece perdida. No tardo mucho en confirmar que en realidad no está prestando del todo atención a mis palabras. A lo lejos, escucho murmullos leves en la habitación que de pronto se convierten en quejas a gritos.

—No puedes venir a cambiar nuestros planes, no vamos a exponernos por un niño inexperto.— Rich habla, pero ni siquiera considero la opción de encararlo.

Hace días que Frank comenzó a planear esta mierda que ahora no me deja dormir, pero los imbéciles de sus hombres no están dispuestos a cooperar a ninguna de mis ideas. Eso, ha hecho que no haya ningún avance. Y, por un momento pienso que ha sido una mala idea.

Al momento que una voz desconocida calla a todos los presentes en la habitación, un sonido que parece provenir de mi bolsillo trasero, hace su repentino espectáculo. Silencio la llamada cuando observo el nombre de Sam en la pantalla, mientras a su vez dejo el móvil encima del escritorio de Frank.

—Travis sabe que cualquiera puede estarle oliendo el trasero, ¿por qué demonios debo preocuparme por eso?

—Por esa misma razón. ¿Prefieres arriesgar a tus hombres simplemente por no querer intentar otras estrategias? Es por eso que no has tenido avances en mucho tiempo.— ataco.

—No vamos a arriesgarnos a cualquier estupidez que ese mocoso proponga.— Oliver habla y todos los presentes, como unos jodidos perros falderos, comienzan a darle la razón.

El sonido de mi móvil me desconcentra, y entonces vuelvo a poner la llamada en silencio sin ver la pantalla cuando sé que se trata de Sam. No quiero ser un idiota, simplemente quiero acabar con esto cuanto antes para así poder dedicarle todo mi tiempo.

Sin embargo, cada vez más parece imposible.

—Él no sabe lo que hace— Rich me señala, paseando por la habitación. —. Y ninguno de nosotros piensa hacerle caso.

—Sabe más que tú— Aaron contraataca. —. Así que, ¿por qué mejor no pegas tu asqueroso trasero en la silla y cierras la boca?

El rostro de Rich se torna rojo cuando Aaron lo contradice y yo solamente me burlo en silencio esperando a que se tome una decisión.

Miro a Frank, quien no despega sus ojos del piso como si estuviera pensando en la mejor idea a tomar. Quiero entender sus dudas, pero simplemente me es difícil.

Cierro mis ojos y aprieto la mandíbula cuando el sonido de mi móvil comienza a sonar de nuevo.

—¡Apaga ese jodido aparato si no piensas tomar la puta llamada!— Frank exclama.

Todos en la sala guardan silencio cuando golpea de forma infantil su escritorio. Algunos se asustan y deciden tomar asiento, mientras yo dejo que la llamada entre en buzón sin hacer caso a sus palabras.

—Haremos lo que Hero dice— Frank habla y todos le prestan atención. —. Nada perdemos con intentarlo...

—No, conmigo no cuenten— Rich lo interrumpe. —. No pienso arriesgar mi jodido trasero por un niñato.

—Me importa un carajo si quieres o no hacerlo, lo harás porque trabajas para mí y porque quieres tu paga, ¿no es así?

Mi móvil comienza a sonar de nuevo, y antes de tener oportunidad de tomarlo para apagarlo de una vez por todas, Frank lo toma para después responder la llamada sin siquiera preguntarme.

Toque de queda | Hero FiennesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora