-Te das cuenta que lo que Mariane te dice es verdad - le dijo Dorian a Valeska entrando nuevamente a su oficina- Eres una loca enferma de celos
-Sabes que no es así, yo solo te quiero a ti y no voy a permitir que una cualquiera como ella venga a interponerse entre nosotros-respondió la rubia muy calmada sentada en el sofá-
-Cuántas veces tengo que decirte que lo nuestro terminó, y no fue algo que se acabó ayer, esto terminó hace tres años y si sigues en esta compañía es por la bondad de mi padre y la gran amistad que tiene con el tuyo, pero por lo visto, vamos a tener que tomar medidas
-A qué te refieres -dijo la rubia poniéndose alerta-
-Si esta situación se repite nuevamente, voya tener que mandarte fuera de esta compañía y ni mi padre, ni el tuyo van a lograr convencerme para tener compasión contigo
-Estás saliendo a favor de esa mugrosa cualquiera- gritó la mujer enfurecida
-Mucho cuidado con la forma en que te refieres a Mariane
-¿Te gusta? -cuestionó la rubia con una sonrisa casi diabólica-
-Si me gusta o no es mi problema Valeska, no el tuyo, deja de entrometerte en mi vida
-Solo dejame decirte algo querido -dijo la Rusa caminando hacia Dorian- si no vas a ser para mi, ten por seguro que tampoco serás de ella- y sin más salió de la oficina
La mañana continuó un tanto tensa después del altercado, Dorian no había salido más de su oficina y Kali se había dedicado a continuar con su trabajo, pero aunque pretendiera que nada había ocurrido, por su cabeza no dejaban de pasar las escenas repetidas de la incómoda discusión. Poco antes del almuerzo el teléfono de la joven sonó haciéndola sobresaltar y detener el trabajo que tan concentrada estaba haciendo
-Buenos días -dijo contestando-
-Hola ¿quién habla?-dijo una voz bastante conocida para ella-
Kali sintió como su cuerpo se helaba al escuchar aquella voz nuevamente
-Habla mariane ¿quién es usted, que necesita? -dijo la joven cambiando el tono de su voz-
-habla Nimai, el gerente Financiero de la Sede Royal House en la India, comuníqueme por favor con el presidente de la compañía-
-El señor presidente no se encuentra ahora, tan pronto como regrese le diré que le llame-
-Dígale que es un asunto de suma importancia-
-Claro, le diré, hasta luego- dijo Kali con sus manos temblorosas para luego colgar rápidamente el teléfono- Era mi padre -susurró con temor en su voz-
La joven no aguantó la impresión del momento y comenzó a llorar incesante mientras veía como sus manos temblaban descontroladamente, su rostros estaba pálido y sentía como todo su cuerpo estaba a punto de perder la fuerza. Como pudo sacó el celular de su bolsa y rápido llamó a Maddie, era la única que podía ayudarla en ese momento
-Hola Kali !que gusto escucharte amiga! -contestó Maddie emocionada-
-Maddie -dijo Kali con su voz llorosa caminando hacia un rincón del piso 15 cerca a los ascensores- Acabo de hablar con mi padre
-!Ay por Dios santo! ¿qué ocurrió, cómo, que te dijo?
Kali no paraba de llorar, y aun continuaba temblando
-Kali respondeme ¿que ocurrió?
-Bueno, no lo sé, solo... solo llamó a preguntar por el presidente pero no fui capaz de comunicarlo, así que le dije que había salido y que le diría que le llamara nuevamente, luego colgué rápidamente el teléfono y te llamé a ti, mis manos aún están temblando, no puedo siquiera parar de llorar-
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KALI Una Hindú en el Occidente
Teen Fictionkali Sapru Hangal, una chica de la India, obstinada, inteligente, segura y llena de una alegría abismal, que a sus 22 años creía ciegamente que el amor verdadero sí existía. Tenía un serio problema con su familia, pues a pesar de estar en pleno s...