Capítulo 24

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-¿Por quer tardaste tanto? -preguntó Maddie a Kali mientras abría la puerta de su departamento

-Hola -respondió la joven dándole un beso en la mejilla a su amiga y un fuerte abrazo- Lo lamento pero me llamaste muy tarde Maddie

-Sí lo sé, pero ven, vamos. He decidido cambiar de lugar -dijo la joven saliendo de su casa junto con su amiga- hay un café por aquí cerca, hay música en vivo y es un poco más calmado. Olvidé por completo que no te agradaban los lugares llenos de ruido a demás ese lugar te va a recordar cosas

Kali sonrió al escuchar esto -  es verdad, esto me va a recordar muchas cosas, así que mejor ven, vamos al café que mencionaste, muero por un capuchino espumoso

Las chicas salieron rumbo a disfrutar de una velada tranquila y una muy muy larga charla de amigas.Caminaron un poco más de una cuadra y pasaron por aquel lugar lleno de recuerdos, el café quedaba dos lugares más allá del ruidoso Secret Garden, y fue inevitable para Kali ver pasar por su mente los recuerdos de aquella noche.  Solo un poco después, llegaron al café, un lugar bastante acogedor y muy moderno, justo para pasar el rato con su amiga

-Y bien ,cuéntame ¿como van las cosas con tu querido jefe? -preguntó Maddie después de haberle pedido al mesero dos deliciosos Capuccinos 

-Pues Maddie, es muy confuso todo. Sabes lo mucho que significó para mí esa noche y cuanto quise volver a vivir ese momento. Pero ahora las cosas son diferentes

-¿ya no sientes lo mismo?

-No, siento muchas más cosas, pero... -Kali soltó un fuerte suspiro mientras recordaba a Dorian- El viernes  cuando estábamos hablando, cuando yo te decía que me quería regresar a la India, él me escuchó,  yo te colgué el teléfono y no me quedó de otra más que enfrentarlo, pero no tienes idea de lo que ocurrió

-¿Te corrió de tu empleo por querer abandonarlo? -preguntó la joven mientras recibían dos tazas de capuccino 

-No, me abrazó y me pidió que no me fuera, que no lo abandonara nuevamente. Siempre que tiene oportunidad me recuerda que fui yo quien lo abandonó esa noche sin darle siquiera las gracias por tan maravilloso momento, y creeme que de verdad lo lamento Maddie, siempre pienso qué hubiera pasado si solo me hubiese quedado en ese coche con él hasta que despertara

-Oye no es tu culpa todo esto amiga -le dijo Maddie a Kali tomando su mano- creeme, si las cosas ocurrieron de esa manera, era porque así debía ser

-Lo sé, sé que todo ocurre por algo

-Así es, pero al fin qué le dijiste cuando te abrazó

-Le pedí que nos mantuviéramos al margen y luego me fui, salí de la oficina buscando un escape ¿y sabes que ocurrió? casi una hora después me llamaron de la oficina a informarme que había tenido un accidente

-¡¿QUÉ?! -gritó la joven tan alto que llamó la atención de los comensales en el lugar- ¿él se accidentó por tu culpa Kali?

-Si eso te sorprende, te voy a matar con lo que sigue

-Ay por Dios, estas llenita de sorpresas, pero ¿entonces tu amadisimo jefe está bien?

-por fortuna solo se quebró un brazo, estuve con él el viernes y ayer todo el día, por eso hoy cuando me llamaste todavía dormía

-¿Y no tiene una novia que lo cuide en tu lugar?

-No son novios Maddie, la rubia y él no son novios, eso me lo dijo ayer mientras yo lo ayudaba a prepararse para regresar a su casa

-Y no piensas hacer nada?  ahora es el momento Kali, no lo vuelvas a dejar ir

-No Maddie, aunque no lo creas es difícil todo esto y mucho más ahora que su padre sabe quien soy

KALI  Una Hindú en el OccidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora