Capítulo 6 : Un resentimiento electrizante

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Izuku y Yaoyorozu logran llegar al aula justo al momento en el que el profesor Aizawa está por entrar, así que, por suerte, solo se llevan una advertencia y la clase prosigue con normalidad. Los demás se ven curiosos por la llegada de ambos juntos, debido a que la subdelegada nunca se retrasa y el peliverde, si está llegando tarde, ni aparece, aunque eso pasaba porque se excedía entrenando y ni siquiera podía levantarse al día siguiente.

Llega la hora del almuerzo e Izuku es el primero en salir, bastante apurado porque debe llevar a curar a sus pokémon y luego ir a comer. Mientras tanto, Yaoyorozu es raptada por sus compañeras de clase que preguntaban sobre su retraso y por qué llegó junto a Midoriya. Esto la pone nerviosa y empieza a negar cualquier idea ridícula de Mina y Toru.

Izuku ya está en el comedor junto a sus pokémon, recuperados gracias a la enfermera de la escuela, mientras que Yaoyorozu relata el combate entre Midoriya y Fatashi a sus compañeras, y a todos los que se acercan por curiosidad, remarcando que fue una batalla emocionante y muy loca por parte del peliverde, debido a sus estrategias arriesgadas con Cargax.

Izuku se mantiene ajeno del relato porque está a varias mesas de distancia, aunque tampoco le daría importancia. De repente, Dan Fatashi se sienta frente a él, golpeando la mesa con su charola de comida con gran ánimo para saludarlo amistosamente, algo que asusta y confunde al peliverde.

Al terminar el relato, Yaoyorozu es testigo de las diversas reacciones de sus compañeros, algunos se asombran, incapaces de imaginar que Izuku haya podido mantener una batalla igualado con el entrenador de pelo naranja, aunque otros no le dan tanta importancia, desacreditando sus esfuerzos conque perdió de todas formas, entre ellos Bakugou, quien solo escuchó porque la mesa de la pelinegra estaba cerca. Mientras tanto que los jóvenes discutían sobre la batalla, un rubio con un rayo teñido en el pelo se pierde en un viejo recuerdo del año pasado: aún lo frustra haber visto a su elekid caer inconsciente sin conseguir conectar ni un solo golpe al, en esos entonces, charmander de Dan. Es entonces que vuelve a nacer un sentimiento que por mucho tiempo ignoró y que ahora hace que sienta envidia del peliverde, solo por dar una mejor batalla.

De repente, todo el comedor queda en silencio por el retumbante grito del peliverde:

—¡¿Qué hiciste qué?!

Izuku se da cuenta de su alarmante actitud y ve que todos lo ven con intriga, confusión y crítica; así que, con total nerviosismo, regresa a sentarse muy avergonzado por su actitud. Dan lo ve confundido porque no esperaba esa reacción.

—¿Me inscribiste en el torneo de inicio de año que organiza el curso de entrenadores? —pregunta Midoriya para confirmar que no escuchó mal, y se vuelve a preocupar al ver la rápida afirmación de Fatashi sin ningún tipo de preocupación—. ¿Por qué hiciste eso? Digo, es verdad que me gustan los combates pokémon, pero me gusta verlos nada más. No tengo ningún tipo de experiencia en eso. Literalmente, mi primer combate fue el de esta mañana y perdí.

—Es cierto, pero demostraste un interesante potencial que debe ser explotado y pulido para que te vuelvas un excelente entrenador —explica Dan con orgullo por ser el quien lo encontrara, aunque Izuku solo está molesto porque no lo consultó con él primero, además de ser un novato—. Y tenía la impresión de que te negarías, así que te inscribí como una sorpresa. Además, volverte bueno en los combates pokémon ayudará a tus pokémon para que tengan una mejor reacción en las acciones heroicas, ¿no?

—Ese es un buen punto...

—Sin mencionar que el ganador del torneo podrá enfrentarse al grandioso Endeavor, el favorito para ganar la próxima liga pokémon y el actual héroe número uno de la región —agrega con fanatismo hacia el mencionado ídolo.

La búsqueda del poder (Bnha y Pokémon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora