Palabras vacias

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. Las cosas fueron de mal en peor. Nick no tenía dudas ya, Hugo había cambiado. Los besos que antes eran sinceros eran ahora fríos y sin entusiasmo. Sus brazos le acogían con desgana y cada vez dormían más alejados el uno del otro.

Dos semanas más tarde, se había hartado de la situación. Se acostó en su propia cama, solo. Tras las noches de frío que Hugo y él habían pasado, no se le hizo raro. Tenía esperanzas de que fuera a buscarle, de que le pidiese perdón y le explicase porque estaba tan raro, pero cuando Hugo entró, se metió en su cama sin inmutarse ni molestarse en ir a ver que pasaba.

A la mañana siguiente, Nick le ignoró. Estaban los dos de mal humor, pero ni se miraban. A mitad de la tarde, la bomba estalló. Nick estaba yendo a buscar su sudadera al sofá cuando Hugo le paró.
—¿Me vas a explicar de una vez que cojones te pasa?—preguntó cogiéndole el brazo con demasiada fuerza. Nick sintió el enfado crecer en sus entrañas. Era increíble que se comportase como si el que tenía la culpa fuese Nick.
—¿A mi? Explícame que cojones te pasa a ti.
—A mi no me pasa nada. ¿Desde cuando duermes solo, me ignoras y me hablas como si fuese un imbecil?
—Desde que tú me apartas de ti.
—¿Que yo qué?
—No te hagas el tonto, sabes muy bien de que hablo—el tono de voz de la conversación había subido sin que se dieran cuenta y casi se gritaban el uno al otro.
—Yo no te he hecho nada.
—No me jodas, Hugo, vale ya. Llevamos casi tres semanas mal.
—¿Mal? No estamos mal. Que no te bese, te mime y que hayas dejado de ser el centro de todo no significa que estemos mal.
—¡Yo no te he pedido que me hagas ser el centro de todo! Tú nunca has sido así, no sé qué te pasa ahora pero me he cansado.
—¿Y que quieres que haga, eh? ¿Llevarte en brazos por toda la academia? ¿Ahogarte a besos? ¡Tengo mas vida aparte de ti!
—¡PUES MUY BIEN, VÍVELA!
—ESO INTENTO HACER, PERO NO ME DEJAS.
Nick tomó aire y le miró a los ojos. Sus siguientes palabras no fueron a gritos, pero fueron las más potentes de toda la discusión.
—Ahora si te dejo. En todos los sentidos. Se acabó, Hugo. Buena suerte.

Hugo reaccionó ante eso. Su rostro, antes rojo de la ira, se volvió pálido y triste.
—Nick...bebé, espera. Lo siento, escúchame, por favor.

Pero Nick ya se había alejado y sus palabras quedaron en el aire, huecas y sin valor para el catalán que había decidido no escucharlas.

NA:
Capítulo corto, contenido potente uwu

No me matéis porfa, ya se que me odiaréis 🙏🏻

Para compensar el disgusto, os dejo que me digáis que queréis que pase con pelos y señales. Yo tengo un par de ideas pero cualquier aportación es bienvenida.

Si aún tenéis compasión por esta pobre autora, os invito a leer mis otras obras. He empezado con una sobre El corredor del laberinto.

Mucho amor

Anónima.

Más que amigos (Hugick)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora