Tu haces que Me Enamore

capitulo 12

Nota: arriba ay una imagen que les va a servir de algo jeje

Son las 9 de la mañana y estoy preparando todo para bañar al pequeño Maxi

Como no hay bañara, toca meterlo a la tina de la habitación de Manuel; cuando el agua está apenas, desvisto al bebé y lo meto a allí, recibiendo risitas por su parte

—por lo menos el va a ser simpático—Manuel me mira confundido—trato de decir que el no será amargado como tú—me fulmina con la mirada—¿Cierto que no?—la hablo al bebé en tono mimado y este vuelve a reír. Me da gracia ver sus rizos mojados y sus ojitos verdes más notables, mucho más verdes que los de Manuel. Este niño es precioso

Igual que el

Mi mente me juega sucio

—no me pongas esa cara por favor—me giro

—cual ca...—me giro otra vez apenada, ya se de qué cara habla. De mi trasero—entonces hazte para otro lado—digo fastidiada—Nadie te está diciendo que me mires

—¡Ya cállate! Tu voz si que es fastidiosa—lo miro mal

—mejor ven a ayudar a bañar a tu hijo para que aprendas cómo hacerlo—se levanta aperezado y se quita la camisa, quedando en una pantaloneta gris. Tiene un abdomen muy marcado y unos brazos perfectos...

—luego que yo soy el mirón—finjo una sonrisa

—convencido—se burla. Empieza a echarle el jabón al bebé y yo me encargo del shampoo

Cada vez está más feliz el chiquito, es lo más hermoso que pueden ver mis ojos y he de suponer que es por qué al parecer, me encantan los niños

Creo que cuando llegue a ser mamá, seré muy feliz

Aunque falta mucho para eso

Manuel coge al bebé en brazos con la toalla y se lo lleva a su habitación; Manuel y yo estamos discutiendo por quién le pondrá el pañal. Por último, le toca a el, puesto que tiene que aprender

—aprendes rápido Manuel—blanquea los ojos

—no se cómo haré para acostumbrarme a esto—hace una mueca de desesperación

—no será una tarea fácil, pero vas a ser capaz—le guiño un ojo

—no vayas a estudiar hoy—me Mira fijamente

—esta bien—se tira de sopetón al sillón—¿Quieres desayunar?—asiente—entonces enséñame tu cocina—se para y lo sigo

Me enseña dónde está cada cosa y realmente no se que preparar—prepara sandwich y comemos galletas con chocolate—se encoge de hombros y hago caso omiso

—esa cara tuya...—siento calor en mis mejillas

—ya sabía que eres odioso, pero no fastidioso—le vuelvo a dar la espalda—mejor no me fastidies y déjame preparar el desayuno—escucho como se ríe. Después de todo, no es tan amargado como pensé

Creo que el se comporta de esa manera cuando está rodeado de personas. O no se. El es tan misterioso, tan raro, que tengo curiosidad de preguntárselo

Hemos terminado de desayunar y el bebé empieza a llorar, seguramente por hambriento o no se. De igual manera le preparo su biberón y así era, tenía hambre

—¿Te puedo hacer una pregunta?—me mira mientras sostengo al pequeño

—adelante

—¿Que edad tiene el pequeño?—se acomoda quedando de frente a mi