KyungSoo siendo un niño con sólo 16 años de edad será padre omega soltero. Su alfa al enterarse le dejó.
JongIn el alfa que le embarazo y padre de su hijo, no se quiere hacer cargo pero ¿estara en lo correcto?
¿Que pasará?
¿Le pesara a JongIn con...
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Al pasar aquel primer día en el cuál, KyungSoo dejo a su hermoso cachorrito en la guardería se sentía muy; extraño, y nostálgico.
Si, mucho.
Más que nada porque la mayor parte del tiempo la pasaba con su bebé, ya sea en el trabajo o en casa.
Gracias a que su hijo era un cachorro muy tranquilo podía llevarlo libremente a su trabajo sin ninguna objeción, pues el pequeño no molestaba a nadie y en cambio parecía que los empleados de la empresa lo adoraban por ser tan bien portado y educado.
Cuando menos sentía KyungSoo dándose cuenta el pequeño TaoSoo ya tenía algún dulce o algo.
Eso sucedía ya que los mismos trabajadores; colegas de KyungSoo, siempre le daban las golosinas al niño ser tan tierno pero muy obediente.
Ah su pequeño bebé...Era muy platicador.
Incluso al trabajador mas serio de la empresa le gustaba estar con él chiquillo.
Si TaoSoo llegaba a enfermar; todos le preguntaban a KyungSoo por él, le daban pequeños postrecitos para que se los llevará, claro que agradecía eso y también le hacía sentir bien al Omega.
Saber que su hijo era querido, bien portado le hacía ver que lo estaba educando bien, pero aun mas importante de todo; era amado por él mismo.
Era verdad que KyungSoo tenía un gran trabajo con su cachorro, a pesar de todos los contratiempos y lo que tuviera que hacer en la empresa, siempre se daba el espacio para llevarlo a que se divirtiera como el cachorrito de tres añitos que es. Se daba el tiempo de estar con su hijo.
Aún así todo tiene su lado bueno y su lado malo, sin que nadie supiera; KyungSoo a veces pensaba en lo que JongIn podía o estaba haciendo, en otras ocasiones se preguntaba si pensaba en su persona.
Si aún le amaba.
Si en algún momento le buscó.
El tener esos pensamientos dolía y, dolía mucho.
Rápido se quitaba todo eso de la mente, ya que de inmediato también le venía a su mente como destellos; la última vez que lo vio, aquella en donde le abofeteó e incluso le llamo un cualquiera, ya que el omega al decirle a JongIn sobre su embarazo y esté a su vez decir que nadie le aseguraba que fuera su hijo, prácticamente lo llamo de esa forma.
No debía de ser muy inteligente para adivinar eso.
KyungSoo al recordar.., un dolor atravesaba a su pecho, era algo que no podía quitar pues simplemente; amaba a JongIn.
A pesar del tiempo y todo se seguía sintiendo dolido en ese aspecto. Pero era un dolor que de inmediato desaparecía por completo al ver como su pequeño hijo corría hacía donde estaba, con sus dientecitos de leche asomándose por su boquita a la hora de sonreír.
