KyungSoo siendo un niño con sólo 16 años de edad será padre omega soltero. Su alfa al enterarse le dejó.
JongIn el alfa que le embarazo y padre de su hijo, no se quiere hacer cargo pero ¿estara en lo correcto?
¿Que pasará?
¿Le pesara a JongIn con...
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El paso de los años deja mucho que aprender. De todo aprendes, de las decisiones que tomas y los errores, aquellos tropiezos que pueden hacer que pierdas todo. Pero a la vez también te enseñan a cambiar para bien, y que esos cambios te ayuden a recuperar lo que perdiste.
Ahora JongIn y KyungSoo estaban más avanzados en años. Sus hijos crecieron hermosos.
TaoSoo siendo un alfa y siguiendo su sueño pudo convertirse en Idol.
JiSoo una hermosa alfa que persiguió su sueño de ser maestra logrando lo, en su proceso encontró al amor de su vida casándose y teniendo 3 hijos.
Y por último su cachorrito, su bebé a pesar de que llegue a tener 80 años y tenga bisnietos siempre será su bebé; Kim Beom-gyu.
Su bebé y el consentido más al ser Omega. Apenas con 19 años casi 20. Persiguiendo su sueño de ser Idol al igual que su hermano mayor.
KyungSoo siempre pensó que serían celosos con JiSoo pero grande fue su sorpresa al no pasar de ese modo. Cuándo se presentó como alfa y encontró a su pareja su esposo e hijos parecieron estar de lo más normal.
Pero cuando Beom-gyu se presentó cómo Omega le cuidaban para todo hasta JongIn. No lograba entenderlo pero sus hijos alfas y esposo les celaban demasiado.
Su cachorrito menor estaba tratando de alcanzar ese sueño y claro que le apoyaba, siempre sería de ese modo.
Con el paso del tiempo lo consiguió, ahí estuvo toda su familia junto a sus tíos y sobrinos; BaekHyun, ChanYeol, Kris, Tao... Incluso los pequeños todos presentes ese día.
KyungSoo estaba feliz y orgulloso de su familia.
Sehun y Luhan se emparejaron aunque eso a nadie le tomó por sorpresa pues ambos siempre fueron obvios en su atracción que tenían mutuamente.
Presentes en las bodas y siendo testigos de cómo la familia crecía.
Esas cosas que no compran con todo el dinero del mundo. Que no cambiarías por nada.
Claro que las peleas siempre hubo, ningún matrimonio era perfecto pero las solucionaban por qué se amaban, su amor era más fuerte que simples peleas.
Con el paso de los años siguieron envejeciendo. Sus hijos creciendo, cumpliendo metas, sueños, casándose y teniendo más pequeños que eran latocitos, corriendo por toda la casa. Aquellos que les daban alegría a sus vidas.
Sería un error decir vivieron felices para siempre... No la verdad es que no, por qué las peleas siempre estuvieron ahí, los malos entendidos entre demás... Pero gracias a su amor tan fuerte que tenían, un amor más allá lo que alguien pudiera comprender. Ese amor que les hacía salir adelante.
Un amor capaz de superar cualquier obstáculo. Ya lo había hecho en el pasado. También sería en el futuro.
