12

135 6 1
                                    

A las 05.00 de la mañana salimos del local. Dani y Cloe se despiden de nosotros y se van para la dirección contraria. Esa punzada otra vez pero esta vez más suave, no sé si es porqué estoy más ebria que sobria o porque ya no me importa tanto. Voy caminando al lado de Lucas, es majo, es moreno con ojos verdes y muy guapo.

-¿Estás bien Ares?- Me mira y me sujeta porque me tambaleo. Joder.

-Sí- asiento con la cabeza- estoy muy muy bien.- Suelto una risilla. 

-¿Dónde está Jesús?- Busco a Jesús y lo veo hablando con Andrea.

-Allí- lo señalo- Creo que le gusta Andrea.- Me río.

-Creía que le gustabas tú.- Me encojo de hombros.

-Yo también lo creía.- Me vuelvo a tambalear y Lucas me sujeta.

-Venga guapa- me sonríe.- Que te acompaño a casa.- Asiento.

Nos despedimos del grupo y Jesús me dice que cuando llegue a casa que le mande un mensaje. Me voy con Lucas a casa. Es muy amable que se preste a acompañarme, creo que los chicos van a acompañar a mis amigas y me tranquiliza de que no se vayan solas. Poco a poco los efectos del alcohol se van pasando con el aire fresco. 

-¿Cómo estás tan segura de qué a Jesús le gusta tu amiga?- Me río ante su pregunta.

-Solo tienes que fijarte en cómo la miraba cuando hemos salido del local, Jesús ha hablado mucho conmigo pero no ha dejado de hablar con ella, le gusta o por lo menos le atrae.- Lucas se ríe leve.

-Para estar borracha no se te escapa ninguna.- Me río.

-Bueno ya se me está pasando.- Le sonrío.

Seguimos caminando hacia mi casa, la verdad es que Lucas me cae bien por lo poco que he hablado con él, es muy agradable. Me cuenta que Marco, Hugo y él conocen a los gemelos de hace poco y que con Dani no tiene mucha relación por lo menos él. Los conoció en una discoteca y que hicieron este viaje un poco de locura. También me dice que querían venir a Cádiz desde hace tiempo pero que no habían tenido oportunidad y hace dos meses planearon este viaje y aquí están todos. Cuando termina de contarme esto, llegamos a mi casa.

-Bueno... El camino hasta aquí ha sido agradable- le sonrío- ¿nos vemos mañana?

Lucas me rodea la cintura con sus brazos y me atrae hacia él.

-Lucas ¿qué estás haciendo?- Lo miro.

-Ares, venga, ¿no me digas que no quieres que te bese?- Me dice acercándose a mí.

-Creo que te estás equivocando Lucas- intento soltarme de su agarre pero no puedo- suéltame por favor.

De repente alguien empuja a Lucas apartándolo de mi.

-Tío te ha dicho que la dejes ¿es que no te has enterado?- Dani le da de nuevo un empujón.

Me acerco a él y lo agarro del brazo.

-¡Dani para! Ya está déjalo en paz- Lo aparto de Lucas- Lucas vete ¡ya!- Dicho esto Lucas se marcha rápido. Me doy la vuelta y miro a Dani.

-Pero ¿a ti qué te pasa?- Le digo alterada.

-¡Ese tío ha intentado besarte sin que tú quisieras! ¿Qué pretendías que hiciera?- Me dice en un tono de voz alto y suspiro.

-Vale Dani- me relajo- lo siento, solo me has defendido.- Le digo más calmada.- Gracias.- Le sonrío.

-Será mejor que bajemos la voz si no quieres despertar a tus vecinos.- Asiento. Tiene razón.

-Sí, será lo mejor, no tengo ganas de darle explicaciones a mis padres si se despiertan.- Dani me mira atento.

-¿Estás bien? ¿No te ha hecho nada no?- ¿Porqué estará tan preocupado? Esto hace que me de otra punzada en el estómago.

-Sí, estoy bien y no no me ha hecho.- Dani se tranquiliza ante mi respuesta y se da por satisfecho.

-¿De verdad tienes ganas de recogerte ya?- Me pregunta.

¿Qué debería de responderle? ¿Me quedo con él? ¿Por qué no?

Daniel Oviedo, esto es efímero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora