Rumores /-Hanako X Male Reader-

5. El (intento de) exorcista

- Por cierto, ¿No te metiste en problemas con el chico que te pidió una cita?

Levanté la vista, Hanako agachó un poco la mirada para poder verme.

Habíamos subido a la azotea, aprovechando que yo tenía una clase libre. A pesar de que habíamos empezado tan sólo hablando de algunas cosas mientras nos sentábamos en el suelo, de alguna forma terminé acostado, con mi cabeza apoyada sobre las piernas de Hanako.

He de admitir que realmente no me importa mucho, se siente bastante bien, sobretodo porque a Hanako parece gustarle acariciar mi cabello.

- ¿Eh? Ah, ya me había olvidado de eso

- Entonces, asumo que el chico no te reclamó ni nada por no ir, ¿O sí?

Lo pensé un poco ante de responder, realmente a mí me daba igual pero era algo un tanto triste de decir en voz alta.

- Resultó que el idiota sólo quería jugarme una broma pesada. Así que de alguna forma fue mejor quedarme a limpiar los estúpidos baños

- ¡Oye!, mis baños no son estúpidos

Sonreí, divertido ante la indignación de Hanako. Me incorporé hasta quedar sentado a su lado, apoyé mi cabeza en su hombro mientras pensaba un poco en el hecho de que aún tenía que evitar a Riku y sus amigos idiotas cuando iba y regresaba de la escuela.

- Supongo que no tengo suerte en esto. No lo tuve con Akane, y nunca lo he tenido con las "citas" a las que me invitan

- No necesitas suerte para eso, tan sólo no eres bueno escogiendo a tus intereses amorosos

Cómo si se pudiera escoger eso... ¿Eh?

Hanako me tomó suavemente de la barbilla y me hizo mirarlo mientras se acercaba a mí. No pude evitar que la idea de que me fuera a besar de nuevo pasara por mi cabeza, así que comencé a ponerme bastante nervioso.

- Además, no necesitas sufrir más desilusiones. Me tienes a mí

Me sonrió de esa manera ligeramente traviesa que solía hacer cuando jugaba o bromeaba conmigo de esta forma.
Lo malo es que me gustaba demasiado esa sonrisa en él, así que me alejé un poco antes de que me fuera a sonrojar o alguna otra cosa delatara los repentinos nervios que sentía.

- Si, bu-bueno, tenía pensado que...

- ¡Mantente lejos!

Una voz desconocida me interrumpió a mitad de mi oración.
Tanto Hanako como yo nos pusimos de pie bruscamente mientras mirábamos en dirección al chico que había aparecido repentinamente encima de la especie de caseta que era el acceso a la azotea en donde nos encontrábamos.

- ¡Finalmente te encontré, asqueroso demonio!

El chico saltó y aterrizó frente a nosotros. Miré a Hanako, ya que lo de "asqueroso demonio" debía ir dirigido hacia él, pero parecía entender tan poco como yo de lo que estaba sucediendo.

- ¡Soy de la academia Kamome del tercer año de la escuela media!

Tercer año de escuela media... Entonces, ¿Es menor que yo? Aunque aún así me parece que es más alto que yo.
Ah, a veces desearía mucho que Yuri no hubiera tomado todos los genes de belleza y altura que había en la familia...

- ¡Minamoto Kou a tu servicio! ¡Toma tus recuerdos de mí como un souvenir para la otra vida!

El chico finalizó su enérgico discurso acercándose un par de pasos más hacia nosotros.
Lo miré por algunos segundos, tenía la frecuente combinación de ojos azules con un cabello rubio corto, sin embargo, ambos tenían un lindo tono de color así que se le veía bien. Además de eso, lo que más llamaba la atención era lo inusualmente afilados de sus caninos, y una especie de pendiente en su oreja derecha adaptado de lo que parecía ser un amuleto de seguridad vial.