"Él es imparable" - Lams (Hamilton)

31. Mas unidos que nunca

En su carpa se encontraba aquel pecoso soldado, preparado para descansar y salir directo a Carolina del Sur el proximo dia.

Antes de que pudiera siquiera acostarse, su novio asomó su cabeza por la entrada. - John.. -

- ¿Alex? ¿Qué haces aquí? Mañana es un dia importante -

Se acercó al mayor abrazándolo del cuello y uniendo sus labios, este correspondió.

- ¿Pasa algo? - Consultó una vez se separaron.

- Hazme el amor, John Laurens - Musitó.

- Eh..? -

- Estuve reflexionando mucho y me di cuenta de lo alta que es la probabilidad de que mueras, y odiaría no haber estado unidos aunque sea una ultima vez.. -

- Lexi.. -

Lo abrazó fuertemente. - Quiero sentirte cerca de mi, quiero que liberemos todo el amor que sentimos por el otro aquí y ahora, mañana no habrá mas tiempo... podría ser nuestra primera ultima vez.. -

- Ay Alexander... - Correspondió el abrazo. - Es muy lindo de tu parte, pero no voy a morir, te lo prometo -

- No puedes prometer algo así -

- Bueno, podemos hacerlo si quieres, pero no tengas eso en la mente, te distraerá -

- ¡Claro que quiero! ¡Te amo! - Volvieron a besarse.

(...)

Con sus manos entrelazadas en un agarre fuerte y honesto los dos amantes disfrutaban del otro intentando no hacer demasiado ruido, pues los demás podrían oírlos.

- Ooy John~ - Murmuraba débilmente el pelinegro, haciendo un verdadero esfuerzo por gozar sin soltar quejidos muy altos.

- Te amo, Alexander Hamilton.. - Le susurró al oído para luego plantar un tierno beso en su mejilla.

Sus cuerpos completamente pegados, con el de risos ensima del menor, embistiendolo rápidamente.

Sus respiraciones chocaban, cada cierto tiempo volvían a besarse apasionadamente, no querían desperdiciar ni un segundo.

- L-laurens.. - Rodeaba su cuello con su mano libre, acercándolo mas a él. - M-más... -

El mayor obedecía a todas las peticiones de su amado, el placer que se daban mutuamente era indescriptible.

(...)

- Te voy a extrañar mucho, por favor cuidate... - Suplicó Alex en un murmuro, con la cabeza descansando en el pecho de su querido novio.

- Y yo te extrañaré a ti.. pero no te preocupes, nada malo ocurrirá... - Atendió John en un tono suave, abrazando a su novio con un brazo y recostando su cabeza en el otro.

- No se que haría si algo te llega a pasar... -

- Hey - Elevó su barbilla haciendo que lo mire. - Eres el mejor de los hombres, el mejor de los novios... - Le dio un beso corto y tierno.

(...)

- Laurens - El francés se asomó por la entrada de su carpa, el sol apenas estaba saliendo.

- Lafayette, no hables muy fuerte, despertarás a mi querido niño.. - Susurró apuntando a aquel muchacho de cabello despeinado que dormía tranquilamente en su cama improvisada, tenía la mirada clavada en un papel en el que estaba garabateando, frente a él tenía un espejo que miraba de vez en cuando.

- Tu grupo está a punto de irse a Carolina del Sur ¿Qué esperas? -

- Estaré ahí en un minuto, primero tengo que terminar este dibujo -

- ¿Por qué dibujas como si el tiempo se te fuera a acabar? -

- Shhh... -

(...)

Cuando Alexander despertó por su propia cuenta notó que se encontraba totalmente solo en la carpa, su amado ya había partido.

Comenzó a vestirse sin ganas, al dirigir su mirada al montón de ropa que habían dejado notó que arriba de todo había una nota.

"Mi querido niño:

Decidí partir antes de que abrieras los ojos, pues te conosco, y no soportaría ver tus ojos dilatados rogándome que no vaya antes de ir.

Entiende que lo hice por el bien de todos, te amo y lo sabes, pero estamos en un momento delicado y no podemos permitir que nuestro capitulo secreto nos distraiga de la misión principal.

Tu debes guiar a tus hombres, yo debo luchar en mi equipo y cumplir mi misión personal.

Cuando todo acabe volveré con el primer regimiento militar con mas de 3000 hombres de color.

Tu sabes lo importante que es lograr eso para mi, será el trabajo de mi vida, seremos verdaderamente libres cuando eso suceda.

Ademas, hay algo que quiero que sepas sobre Martha y que no pude decirte anoche.

Antes de venir a la guerra, decidí leer todas las cartas que me mandó y que estaba tan asustado por revisar.

Me llevé una alegría inmensa al leer sus bellas palabras.

Me dijo que a pesar de la violación y el casamiento no me guarda rencores y me sigue viendo como el amigo que soy para ella, dijo que estaba preocupada por su mejor amigo, no por su esposo.

Nada mas termine con la esclavitud, lo primero que haré luego de llenarte la cara de besos será regresar con ella y hablar las cosas, se que estará de acuerdo con lo nuestro, nunca me ha demostrado lo contrario.

Te amo con cada parte de mi ser, cuidate y no te preocupes por mi, estaré de vuelta antes de que te des cuenta.

Eternamente tuyo, John Laurens."

"PD: Mira del otro lado de la hoja"

Girando el papel podías encontrar un autorretrato de Laurens, un regalito para que no lo extrañe tanto.

Con lagrimas de emoción en los ojos, se llevó el papel al pecho, rezando por que todo salga bien.

Continuara...