"Él es imparable" - Lams (Hamilton)

43. Lo que dejamos a medias

Como había ordenado el presidente, ambas parejas fueron a caminar por lados diferentes, Jefferson iba a paso agresivo y largo mientras Madison iba lento intentando calmar su respiración luego del ataque de tos.

- ¿¡Puedes creerlo?! ¡Plena reunión de gabinete y el idiota se pone a hablar de tu salud! ¡¡Como lo agarre sin su guardaespaldas te juro que..!! -

- Cálmate.. - Soltó sereno.

- ¿¡Como quieres que esté calmado cuando se metió contigo por algo que tú no puedes controlar?! -

- Tú sabes que se han burlado de mi salud desde que era niño, no me afecta -

- ¡Y tú sabes bien que idiota que veo atacándote por eso, idiota al que le reviento la cara! -

- Thomas, no podría importarme menos lo que diga Hamilton de mi salud, y t.. - Volvió a toser descontroladamente.

El mayor colocó ambas manos en los hombros del contrario. - Tranquilo... -

- Aah.. - Musitó quejándose con los ojos entrecerrados débilmente.

- Descuida, nadie se mete con tu salud y se va sin que yo le de una lección -

- ¿Podrías darle una lección sin recurrir a los golpes? Ya no somos jóvenes, Thomas -

Rodó los ojos. - Está bieeen - Soltó resignado. - Debe haber otra manera de darle donde le duela.. y matamos dos pájaros de un tiro y usamos ese algo para que haga lo que queremos en cuanto al debate -

- Siempre tan astuto.. - Soltó con un poco de sarcasmo.

- Gracias -

Continuaron caminando mas calmados, aunque el de fucsia seguía pensando en eso y en como podría contraatacar.

En medio del paseo silencioso, repentinamente escucharon unas voces y risitas en un callejón por el que pasaron por delante.

Regresaron sutilmente y se escondieron con cuidado de no ser vistos.

- Eres mi mayor orgullo - Declaró el pecoso plantando múltiples besos en la mejilla del Secretario del Tesoro.

Este solo reía enternecido por los mimos que le otorgaba su pareja. - ¿Qué tal estuve? ¿Te gustó? -

- Oh, estuviste increible - Acarició su mejilla.

- ¿No crees que exageré? -

- Nah, se lo merece por esclavista de mierda - Sentenció abrazándolo. - Aaaunque admito que fuiste algo rudo con Madison, sé que estan peleados pero él no tiene la culpa de su mala salud -

- Que se joda... - Hundió la cara en su pecho.

Jefferson estaba a punto de ir a golpearlos, pero el menor lo detuvo para seguir observando.

- ¿Crees que hoy tengas energía para continuar lo que dejamos a medias ayer, Peque? - Cuestionó con una sonrisa de lado coqueta.

- Eso depende de lo que hablemos respecto a mi plan, aun no hemos llegado a nada -

- Comprendo... ¿Quieres volver ya? -

- Si, seguro que Jefferson y Madison ya volvieron -

Corrieron cuando estos empezaron a salir del callejón.

- ¿"Lo que dejamos a medias"? - Cuestionó James cuando ya estaban en un lugar seguro.

- Creo que ya tenemos algo con lo que contraatacar.. - Soltó el mayor con una sonrisa maliciosa. - Pero primero hay que asegurarnos de que no sea un simple malentendido... -

Continuara...