"Él es imparable" - Lams (Hamilton)

20. No importa

La persecución fue tal que terminaron a las afueras de la mansión encontrándose a Lafayette sentado en el suelo contra la pared hecho bolita.

- ¡Lafayette! ¿¿Qué pasó?? - Cuestionó Laurens colocando su mano en su hombro.

- ¿¿Qué pasó, amigo?? ¡¡Ibas de maravilla en el baile y todo se derrumbó!! - Exclamó Mulligan.

- ¡¿¡Tu me estabas mirando!?! - Gritó el francés alzando la mirada y revelando que estaba rojo vivo de vergüenza y sus ojos amenazaban con llorar.

Hercules se quedó callado.

- Laff, dinos que pasó - Pidió Alex.

El nombrado suspiró calmandose un poco. - Una muchacha me pidió un baile... -

- Ay, no - Soltó John.

- ¿No qué? - Cuestionó el mas alto de todos.

- Si ¿Qué tiene de malo? - Prosiguió el mas bajito.

- Lafayette no sabe bailar y las pistas de baile le dan panico... - Explicó el de rizos.

Ahí fue cuando Mulligan se dio cuenta de su terrible error.

- Me caí delante de todos... - Se llevó las manos a la cara.

- B-bueno, tranquilo.. ya pasó - Lo consoló el pelinegro sobando su brazo.

- Si quieres podemos irnos ahora, se estaba volviendo muy aburrido de todos modos - Soltó Laurens.

- ¿¿Qué?? ¡N-no, no! ¡Tienes que volver! - Mulligan levantó a su amigo del brazo. - ¡Tienes que volver con esa chica, no puedes desperdiciar tu oportunidad! -

- ¡Herc, ya hice el ridículo! ¡No me querrá nunca! ¡Quiero volver a casa! - Exclamó el francés.

- No lo obligues a hacer algo que no quiere - Lo miró John.

- ¡P-pero es Margarita Schuyler! ¡Si tan solo hubieran visto como miraba a Laff, estaba perdidamente enamorada! -

- ¡¡Herc, si tanto te interesa ve y conquistala tu!! - Exclamó Alex.

- Pero.. -

- ¡¡Basta, se acabo esto!! - Sentenció el pecoso. - Voy a acompañar a Alex a que salude a Washington y luego nos vamos los cuatro, ustedes quédense aquí y no hagan tonterías - Ordenó y tomó a su novio de la mano. - Vamos, cielo -

La pareja se retiró dejando a los dos amigos en silencio.

Hercules miró a su amigo quien estaba de brazos cruzados mirando al suelo aun con la cara roja.

- Lo siento -

- No es tu culpa, soy un torpe... -

- No, no digas eso, nadie es perfecto - Colocó una mano en su hombro. - Puedes aprender a bailar -

- Herc ¿Crees que no lo eh intentado antes? ¡Mi madre me daba clases de baile desde los 12 años! Soy un desastre sin remedio... -

- ...Pues yo no voy a perder la fe contigo, bailar es la mejor manera de conseguir una mujer y tu te lo mereces! - Soltó con confianza.

- ¿Por qué estas tan empeñado en que conquiste a una chica? - Lo miró arqueando una ceja.

- ¡Porque eres mi mejor amigo y quiero lo mejor para ti! -

Sonrió de lado tímidamente. - B-bueno... gracias, amigo -

- Para eso estoy, así que deja de etiquetarte como un fracaso. ¡Porque serás el mejor bailarín que New York haya visto! - Lo abrazó rodeando su cuello con el brazo.

Laff rió un poco ante la idea, olvidando por un momento porque estaba tan avergonzado hace unos segundos.

Continuara...