Vas a quedarte

Vas a quedarte 50

Lali estaba en el piso jugando con las niñas, era de las personas que mas se preocupaba en que Rufina no se sintiera apartada por la llegada de Magnolia, siempre ha sido su debilidad absoluta, me daba mucha nostalgia verla tan grande, realizada superando problemas.

—¡HORA DEL BAÑO! —gritó Bella desde el pasillo— Rufina, trae a tu hermana tenemos una batalla que dar.— Vamos, tenemos poco tiempo... va a comenzar nuestro programa de cocina favorito, si te demoras mucho nos vamos a perder la preparación del pastel que quieres preparar.

—Wujuuuuu, permiso tia... tenemos que irnos pero vamos a regresar pronto. —celebró Rufina, literalmente la mejor hermana mayor del mundo. Soportaba con mucha paciencia todas las locuras de su hermanita pequeña, la tomó de la mano y se fueron juntas con su madre al baño.

—¿Hay mejor hermana mayor que Rufina? —dijo Lali riendo— Tu?

—Creo que tu eras un poco menos intensa que mi magnolia —dije con una sonrisa y cerré el computador— ¿Lista para la gira?

—Lista siempre mi amor —me cerró un ojo— Estoy muy emocionada por comenzar, vi a mi terapeuta —se sentó a mi lado y puso su cabeza en mi regazo— ¿Me vas a extrañar?

—Claro que si, quién te va a cambiar los pañales ahora? —pregunté con una sonrisa mientras ella me miraba— Estas muy grande, me encanta verte tan bien mi amor, te veo tan feliz que no sabes la satisfacción que me da como tu hermana mayor, cómo te sientes para el tour? Física y mentalmente...

—Físicamente muy preparada, incluso mucho más que la vez pasada porque viste que estoy mucho más deportista y psicológicamente espero que bien, me siento muy bien pero quiero ir con calma, no puedo forzarla ni subestimar, mi psicóloga dice que es importante que reconozca cuando me siento mal y cuando necesito ayuda.

—Buscame siempre por favor, dale? —asentí y nos abrazamos fuerte.

—Euge... —me miró con los ojos llenos de lágrimas, cuando se le cayó una me dió algo en la panza— Muchas gracias por nunca soltarme la mano, ya sé que te lo dije mil veces pero a veces siento que nunca será suficiente porque te hice un montón de cosas en esta vida, pasaste todo lo que pudiste pasar conmigo y nunca te rendiste. —obvio que me hizo llorar a mi— Ahora que me dejaste a tus hijas para irte con tu amorcito, pensé "wooow, por fin logré que confíe en mí" Podrías haberme borrado de tu vida cuando Rufi me vió en el piso y no lo hiciste.

—¿Por qué me haces llorar? —dije con una sonrisa— Jamás en mi vida te dejaría sola, aunque hagas lo que hagas tu siempre serás lo más importante en mi vida, no tienes que darme las gracias, tienes que ser feliz disfrutar tu vida y eso será el mejor pago del mundo —me abrazó fuerte nuevamente— Me acuerdo cuando estaba en Los angeles viviendo, de verdad me gustaba mucho estar allá —lo dijo en voz baja— estaba haciendo algo que me gustaba un montón, me enamoré de otra persona lo que me sirvió para darme cuenta que podía estar con otra persona que no fuese Bella, todo perfecto hasta que a ella comenzó a joderle mi preocupación por ti y eso me mató todo Lali, te juro que yo estaba enamorada

—¿Te rompí la relación? —dijo sorprendida.

—No, ella rompió nuestra relación no entendiendo mi vida. Pero te conté esto para darte las gracias a ti —soltó una sonrisa— Porque estoy viviendo el mejor momento de mi vida con la familia que tengo, probablemente si eso no hubiese pasado yo no estaría acá con Bella —rió nuevamente.— Es el amor de mi vida y durante mucho tiempo la pasé muy mal por estar lejos de ella, lo sabes —asintió.— Estar ahora con la familia que siempre soñamos, es una locura.

—Entonces me alegro mucho de ser una hija puta, Bella es una madraza y además mi mejor amiga —rió.— Porque ustedes han formado una familia maravillosa y ahora tienes mucho trabajo con Magnolia, pero dudo que te haga sufrir tanto como yo —la abracé y llené de besos