Pars XIX

22.2K 2.3K 3.1K
                                    


—¿Cómo pretendías que interrumpiera? — enojado, el plateado le respondió en lágrimas —. ¿Cómo? Si con solo mirarte te morías de amor por ella.

—Pero no lo hago.

—No mientas.

—No estoy mintiendo — musitó sincero —. Jaen vino a buscarme de nuevo y a hablar conmigo como prometió la última vez — comenzó a explicarle —. No tengo idea de a donde sacó la dirección de mi residencia, pero vino y la atendí. Aclaré todo con ella. Terminamos besándonos porque me consumió la nostalgia y los recuerdos — Jungkook lagrimeó —. Sin embargo, me sentí culpable después y me morí de la vergüenza cuando la abracé. Mi lobo estaba herido llorándote y yo estaba traicionándote a ti — Jimin rascó su nuca y tocó los muslos heridos del plateado con sus manos, acariciándolos con ternura —. Le dije que no debía haberla besado porque yo ya estaba saliendo con alguien y que estaba muy enamorado de esa persona. También le dije que ya era papá — Jungkook tembló —. Jaen estaba dolida, pero lo entendió y se marchó. Prometió no regresar más.

—Pero tu... aquella vez que Jaen fue al departamento le dijsite que-

Jimin lo interrumpió.

—Sé lo que dije y sé lo que escuchaste — murmuró —. También sé que fui un idiota cuando me hiciste aquella pregunta esa vez que sentimos las primeras patadas de Manwol. De todas maneras, estaba protegiéndome a mi mismo de caer perdidamente enamorado de ti y de retenerte en mi corazón para siempre. No quería que eso sucediera porque sabía que te marcharías y yo quedaría más destrozado que nunca — sonrió irónico de lado —. Así que traté de convencerme a mí mismo de que no estaba enamorado de ti y que seguía amando a Jaen, cuando no es cierto — soltó una risa nerviosa y llevó sus manos nuevamente a las mejillas del argentum —. Pero nada de eso funcionó. Sólo te lastimé a ti y a mí. Nos lastimé a ambos.

—Yo sentía a través de lazo que tu la seguías amando — respondió Jungkook en una mueca.

—Lo que sentías durante todo ese periodo eran mis sentimientos hacía a ti. Es ahí donde tú te confundiste — Jimin besó su cachete y sintió fallecerse cuando el aliente fresco de Jungkook golpeó cerca de su boca —. Miedo, amor, culpa y nostalgia — llevó la muñeca del argentum hasta su pecho y la descansó cerca de su corazón —. ¿Lo sientes? ¿Sientes a mi corazón latiendo desesperadamente por ti? ¿Sientes mis emociones a través del lazo?

El otro alfa levantó su cabeza y lo miró a los ojos por un momento. Luego, aquellos que tan tristes habían estado, se encendieron en felicidad y brillaron como las estrellas en el cielo. Aquello bastó para que el de oro viera como la tiara de su compañero regresaba a su color natural junto a sus pecas y su piel caliente. Su cabello blanquecino se coloreó del negro azabache.

Jungkook regresó.

—Te amo — Jimin lo besó en la boca con ternura sintiendo las sensaciones de amor de su compañero a través de la unión y a su lobo aullando de alegría —. Te amo y perdóname por haber sido un cobarde — le dio muchos picos divertidos por todo su rostro haciendo que Jungkook riera y después lo abrazó con fuerza, fundiéndose con él y juntando sus corazones a través de sus pechos.

—Te amo — el pelinegro le respondió en un sollozo y correspondió su abrazo aferrándose a su espalda y acercándolo más a él —. Eres un idiota, pero te amo — lloró en su hombro —. Me haces sentir cosas tan bonitas, Jimin.

El dorado sonrió y acarició su cabello.

Ah, por fin.

Jimin no tuvo idea de cuanto tiempo estuvieron abrazándose y diciéndose todas las cosas que ambos sentían por el otro. Nada era mentira. Ambos lo sabían a través del lazo que los unía. Estaban enamorados.

Aurum • JikookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora