¿Que harías si te dijera que un día puedes encontrar un libro que hará realidad lo que más deseas?
Seguramente pensaran que estamos locas, pero esto nos paso a mis amigas y a mi, durante unos maravillosos meses de calor, donde nuestras vidas cambi...
Me desperté con una enorme resaca, las sábanas me pesaban -por no hablar de la cabeza- así que con mucho esfuerzo las quite, saque un pie, luego el otro y me arrastre hasta la cocina.
Fui la primera en despertar, al llegar a la cocina, vi las paredes desgastadas y a Jerry, que al verme corrió a las cañerías, la verdad, es que le tome algo de cariño, al principio Meli gritaba cada vez que la veía y Aldi quería matarla, pero a mi no me daban tanto asco las ratas, pero era la única de la casa que aceptaba la presencia de una rata.
Fui a servirme un poco de agua, pero recordé que en esa condenada casa, todas las tuberías funcionaban mal,por lo que acordamos solo usarla para lavar, así que me diriji a la heladera y prepare un jugo de limon, con sal, que es lo único que saca la resaca, Lo bebí, de un solo trago.
Me puse a ver en el teléfono anuncios sobre alquileres, luego de mucho buscar, uno llamo atencion, decía "Alquilo casa, en el centro, con 3 habitaciones disponibles, sin necesidad de garantía a un precio accesible" en número estaba en la parte inferior de la pagina, asi que llame.
Hola.-Sonó la voz suave de una señora.
Hola, hablo por el anuncio de alquiler- dije con voz dulce (esa que se transforma cada vez que hablo por telefono)
Ah, si, todo es como dice el anuncio, solo que ya hay tres chicos viviendo-Dijo como si tuviera miedo a que no aceptaramos y aclaró rápidamente- pero son muy bueno y ordenados.
Si, no hay problema, queremos mudarnos lo más pronto posible,¿ podríamos ir hoy a ver la casa?- mi voz sonaba algo ansiosa.
Si, pueden venir al mediodía-dijo con su voz tranquila.
Terminamos de arreglar unos detalles sobre cómo llegar, cortó la llamada y corro a despertar a las chicas. compartimos pieza así que empiezo a gritar en el centro de la habitación.
-CONSEGUIMOS CASA, CONSEGUIMOS, CASA- voy a la cama de Aldi y le sacó las sábanas- CONSEGUIMOS CASA, DESPIERTEN- hago lo mismo con Meli.
Las dos me dirigen una mirada asesina, pero cuando comprenden lo que digo, sus caras se transforman, una casa nueva era más fuerte que cualquier resaca.
-¿Como?- Dijo Meli que recién se despertaba.
-¿Donde?- Pregunto Aldi aún algo dormida.
A las dos se les dolía mucho la cabeza, pero se levantaron y mientras les hacía un jugo de limón y sal milagroso, les conte todo.
Pasaron unas horas hasta que por fin salimos de la casa, teníamos que bañarnos, vestirnos y comer. Salimos algo apuras, Aldi se había puesto una camisa a cuadros, un jeans azul, unas zapatillas y se recogió el pelo en un rodete, algo suelto. Meli uso un jardinero de jean con una remera mangas cortas blanca y unas zapatillas topper del mismo color que amaba. se dejo el pelo suelto, por que la resaca fue más fuerte. Yo use un vestido blanco corto, sin mangas, de corte corazón, con unas sandalias del mismo color y un niño blanco en una media cola.
Estuvimos un rato para llegar, ya que Meli no sabia usar el Google maps, pero al final dimos con la casa, era de ladrillos vistos y se veía realmente grande, aunque solo de ancho, tenía una entrada llena de plantas a los costados, se notaba que a la dueña le gustaban mucho y a todas nos hizo acordar a la casa de un libro de época que habíamos leído, unas rejas negras rodeaban la casa, al abrirla seguimos el camino de piedra, había dos ventanas a los lado. Tocamos la puerta y luego de esperar unos segundo una voz familiar contestó.
Enseguida abro.
Nos miramos, por que todas sabiamos que escuchamos esa voz antes. Para nuestra sorpresa era uno los tres B, Joaquín, que al vernos se sorprendió y al instante puso esa sonrisa de pirata que ya nos acostumbramos a ver pero nos afecta igual, el dirigió su mirada a Melina, que siempre era su objeto de atención.
Voy a pensar que me estas siguiendo- Dijo divertido y añadió- aun que no me molestaria.
En realidad soy yo la que se siente acosada- y con un toque de misterio añadió- aunque es más interesante de lo que pensaba.
Vinimos a ver la casa, pensamos en mudarnos.- dije sin ánimos de romper la tención sexual.
la cara de Joaquín se transformó, había duda en sus ojos, como si supiera algo que nosotras no.
Si, la dueña nos avisó, pasen- dijo haciéndose a un lado para dejarnos entrar.
Tenía un recibidor muy amplio con un gran sillón y miles de libros adornaban las paredes, eso era igual a un visto bueno para nosotras, pasar de un lugar con ratas a uno con libros era un cambio mágico. Joaquín nos guió a una antesala que tenía un gran espejo, nos indico que por la derecha había un pasillo que daba a las piezas, pero que Marco estaba durmiendo, asi que no podiamos pasar. Había algo en la forma en que lo dijo, que me hizo sospechar que nos ocultaba algo, quizá la casa no era tan grande.
Seguimos por el pasillo que teníamos en frente a la derecha había una gran sala, que tenía una mesa de barman y más adelante dos puertas a los costados, la que daba a la derecha era el comedor, Joaquín nos contó que si nos mudamos, comeremos ahí y la de la izquierda daba a un patio interno, que por alguna razón tampoco nos dejó ver, seguimos por la cocina y al lado otro comedor mas chico que daba al fondo, tenía un asador y una mesa, en el centro estaba lleno de plantas y con una escalera. sin preguntar comenzamos a subir y él nos siguió.
Ahí no hay nada, para la navidad solemos subir a ver los fuegos artificiales- y divertido. añadió-también subimos para robarle limones al vecino.
Mientras Joaquín contaba yo le prestaba atención y miraba lo alto, pero Aldi , estaba mirando unas enredaderas que formaban un techo, me di cuenta que era el patio interno y también quería ver, al acercarse la escucho susurrar, "que buena vista" y al acercarme me doy cuenta que Thiago estaba prácticamente desnudo, con solo una pequeña toalla atada a la cintura.
-Oye quieres que te traiga un balde o una pileta, se caen tus babas.- digo alegre y para mi desgracia o la de Aldi, fuerte.
Thiago escucho mi comentario y alzó los ojos sorprendido, pero al reconocer a Aldi sonrió de puro placer y le dio un guiño de ojo, solo para dejar en claro que si me escucho.
Toda roja y entrada en pánico ella se dio vuelta y me mato con la mirada.
Solo para saber,¿También lo vas a publicar en los diarios?- dijo entre dientes y con la cara roja.
No- y con un tono malvado añadí - Nadie lee los diarios.
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Hola gente hermosa, les queremos pedir perdón por la tardanza, la verdad es que sin Aldi no podríamos haber terminado nunca el capitulo, fue un trabajo muy duro pensar en el diseño de la casa y esperamos que lo pudieran imaginar. Gracias por la paciencia.
Pd: Nos encantaría saber que piensan! y si les gusta!.
