Todo sucedió de repente...

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Pov Poché

Amalia iba muy concentrada cantando la música que la radio del carro reproducía, aún no entendía muy bien por dónde iba esto. O a donde querían llegar. No habíamos intercambiado muchas palabras antes, la ultima vez que recuerdo haberla visto o hablado con ella de manera fluida fue en la fiesta fallida de cumpleaños de Daniela. Tenía una energía muy buena, por lo poco que la conocía.

- Cuéntame algo de tí - dijo girando a verme.

- ¿Cómo que? - pregunté tímida. No sabia que exactamente contarle sobre mi, no había muchas cosas interesantes en mi vida.

- Poché, podré ser novia de Nela y casi amiga de Kim. Pero no soy como ellas. No muerdo. - Me dijo amistosa. - Siento que si se pasaron un poco contigo.

- No pienso que me vayas a morder. - reí. - Pero no sé que quieres que te cuente. - encogí los hombros.

- Bueno, no sé - giro los ojos divertida - ¿Pensaste que hacer ahora que el show terminó?

- Bueno, dado el hecho de que ya pasó un mes desde el show. - me reí- Sí, estoy volviendo de a poco a la universidad - asintió viendome. - Nunca supe de que trabajabas - dije con mi mano en la barbilla, pensativa.

- Soy escritora - señalo la guantera, donde había dos libros iguales de tapa blanca con el contraborde rojo. - Escribo bastante sobre la ansiedad. Basicamente, escribo sobre lo que me identifica.

- Wow que interesante. También tengo ansiedad - dije mientras ojeaba las paginas del libro.

-¿Enserio? ¿Que mas tenemos en comun, Pochosaurus? - Dijo sorprendida y graciosa, la mire riendome por el apodo que acababa de darme.

-¿Me dijiste Pochosaurus? - asintió riendo. - Es gracioso, me imagino mi cara en un dinosaurio.- me reí demasiado fuerte contagiandola.

Nos quedamos en silencio por varios segundos que se volvieron un tanto incomodos. Amalia tenia una energia super buena, y me agradaba demasiado. Me la imaginaba igual que Nela y Kim pero resultó no ser tan idiota.

- ¿Pudiste hablar con Laura? - preguntó, no era un tema que me fascinara, pero ya que.

- No, y no creo que ella quiera hacerlo. - dije mirando a mi ventana. - Trate de explicarle, pero nada parece gustarle.

- Es que, no tienes explicaciones. Solo acepta que te equivocaste y se le pasará. - dijo estacionando en una esquina, ví a Calle y Nela bajar del auto frente al nuestro.

- No se si me vaya a escuchar. - abrí mi puerta. - No le interesa hacerlo. - baje acomodando mi blusa.

- Es tu oportunidad de que lo haga. - levanté la mirada al verla señalar a la pelinegra llegar junto con su gemela idéntica a saludar a mi...lo que sea que sea Calle y a Nela. En ese momento quería que la tierra me tragara literalmente.
Del otro lado aparecía Kim también alegre a saludarlas.

- ¡¿Que?! - dije en un susurro que a la vez fue un grito. - Amalia no puedo, ya le dije todo.

- Bueno, entonces que ella acepte tus disculpas. - me tomó del brazo para acercarnos. Batallaba pero ya estábamos muy cerca y todas notaron nuestra presencia saludandonos.

- Poché - pronunció Kim para saludarme. - Hace mucho no te veía - correspondí a su corto abrazo.

Laura me ignoro por completo pasando de mí, mientras hablaba con su hermana.

El ambiente se volvió incómodo.

- Que les parece si entramos - dijo Nela avanzando para alivianar el ambiente y cortar la tensión con todas, menos Calle.

Bonita Casualidad - CachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora