I. Mi Viaje por Teselia (Pkm Negro: N xTouko)

Desafío final

Touko's pov

Seguía en Ciudad Caolín, después de cinco días de haber combatido en el Gimnasio. ¡Había derrotado a Lirio! Panpour lo había hecho maravillosamente contra Haxorus, de modo que lo hice evolucionar con una Piedra Agua.
Tras salir del Gimnasio, la Profesora Encina estaba esperándome. Charlamos un rato, me indicó dónde estaba la Calle Victoria y luego se había ido. Ahora estaba en el Centro Pokémon, abasteciéndome de pociones y demás. Dentro de unos minutos, partiría a retar al Alto Mando. Aún no sabíamos como invocar a Reshiram, de modo que no tenía más remedio que ir así, sin más. Suspiré agotada.

  - «Por Arceus, N...

Natural... Hacía días que no lo veía. Lo extrañaba demasiado. Una parte de mí deseaba dejar todo de lado y entregarse a él, pero no podía. Descansaba sobre mis hombros el destino de Teselia y del mundo.
Salí apresuradamente de Ciudad Caolín y llegué a la Calle Victoria antes de que me diera cuenta. Qué rollo... Tenía que subir un cerro. Estaba nerviosa. El Alto Mando sería muy difícil de derrotar. ¿Sería capaz? No estaba segura...

  - «No digas eso, Touko. ¡Tú puedes!

Tenía que hacerlo. Por mis amigos, por Cheren, por Bel y todos. Pero por sobre todo eso, por Natural.

  - «Tengo que vencerle

Si ya había derrotado a Mirto, tendría que batirme con él en un duelo. Eso me asustaba muchísimo porque no tenía a Reshiram, y ninguno de mis compañeros era lo suficientemente fuera para abatir a Zekrom. Lo sabía luego de haber recibido un ataque suyo que ni siquiera fue brusco. Tragué saliva. No era que no confiara en mi equipo pero, siendo realistas, era muy probable que me venciera sin el dragón blanco... ¡Y eso no podía suceder! ¡O me alzaba con la victoria o adiós al mundo que conocemos!

  -«No sabes qué hallarás ahí. Puede que sea Mirto o Natural. Sólo tranquilízate

Bueno, estuve toda la maldita tarde dando vueltas, hasta que por fin llegué a la Liga. Zoroark, que había hecho el recorrido junto a mí, estaba agotada. Descansamos en el Centro Pokémon que allí había y entramos a retar al Alto Mando. Habían cuatro caminos y un cartel en la estatua que había al centro. Lo leí y asentí. Ya sabía en qué tipo Pokémon se especializaban cada miembro del Alto Mando. Decidí ir por Catleya, la que usaba de tipo psíquico. Miré a Zoroark.

  - ¡Vamos allá!

N's pov

Qué combate tan fácil. Mirto, el Campeón, estaba al borde de la derrota. Sonreí cuando cruzamos miradas. Aparentaba estar tranquilo y alegre, pero sus ojos delataban su pánico y desesperación.

  - ¡¿Es todo lo que tienes?!- Espetó, como si él llevara la ventaja.

  - Oh, ¿quieres más?- Pregunté.

  - No puedo permitir que pases de aquí. ¡No creas que vas a ganar!

Sonreí.

  - Hm. Como tú quieras

Zekrom atacó. Mientras combatíamos, recuerdos asaltaron mi mente.

  - «Touko...

Era consciente de que estaba retando al Alto Mando en estos mismos momentos. Mi corazón ansiaba profundamente verla de nuevo. En estos días sin verla, había sentido una especie de vacío en mi interior. Ahora que sabía que volveríamos a vernos, mi interior ardía. Tenía una pequeña "sorpresa". Tal vez no era lo más sensato, pero ideal para nuestra batalla final. Necesitábamos un lugar digno de nuestra legendaria batalla, después de todo.
Dejé de pensar en ello al ver que el último Pokémon de Mirto caía debilitado ante Zekrom. Éste rugió con tal intensidad que las paredes temblaron. Sonreí y miré a Mirto, satisfecho.