Newt's secret girl (The Maze Runner//Newt)

♠CapítuloDiez

.Lyra bajó los ojos y jugueteó un poco con sus manos, notablemente preocupada, o más bien asustada. Por primera vez, se había propagado un silencio incómodo entre nosotros.

-¿Saliste temprano de la huerta?

Ella me miró con incredulidad.

-Newt, es tardísimo. Has pasado mucho tiempo aquí, yo… salí a buscarte, estaba asustada porque te había perdido de vista y…

-¿Estabas asustada por mí? –La interrumpí.

Lyra bajó la mirada de golpe, nerviosa ante mi pregunta.

-Preocupada –Se corrigió sin levantar la vista- por… si algo te pasaba.

-Acabas de decir lo mismo con otras palabras –Y lo había logrado, había logrado sacarme una sonrisa.

•••

Thomas fingió soltar un ronquido con los ojos cerrados, por lo que Newt terminó golpeándole la nuca con fuerza.

El morocho se quejó y se acomodó mejor para seguir escuchando la historia, que secretamente, no quería dejar de escuchar.

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Pude notar como sus mejillas se teñían de rojo, y cuando ya volvían a la normalidad, levantaba el rostro, hasta quedar a sólo centímetros del mío.

Escuché pasos acercándose a dónde estábamos, y corrí la cara rápidamente, luego de unos segundos mirándome fijamente repitió mi acción.

Gally llegó hasta nosotros y nos miró unos segundos, luego preguntó suavemente, más suavemente de lo que creí que alguna vez hablaría.

-¿Todo está saliendo bien ahí adentro? –Preguntó señalando la puerta de Nate con la cabeza.

Asentí.

-Ha estado ahí unas horas –Revisé mi reloj, Lyra tenía razón cuando dijo que era tarde, a esta hora todos estaban cenando.

Nos miró unos segundos y se dirigió a Lyra.

-Mañana volverás a trabajar en la huerta, luego  probarás la construcción.

Ella asintió, mirándolo con cierto recelo.

Cuando Gally se marchó la pillé mirando por dónde él había desaparecido, y sentí la necesitad de confirmar lo que había pasado.

-¿Es cierto que discutiste con Gally luego de la fogata?

-Puedes llamarme “Capitán Gally” –Dijo ella, imitándolo con una mueca graciosa, como toda respuesta.

-Gally a veces puede ser muy… Gally –Expliqué, sin explicar demasiado, pero ella pareció entender mi punto y lanzó una carcajada como respuesta.

-¿Cómo llegó a ser encargado?

-Fue uno de los primeros mierteros en llegar, después de Sartén. Pero no te confundas, es un buen constructor.

Nos quedamos callados unos segundos.

-Tengo hambre.

La miré con gracia.

-¿Siempre piensas en e..? –No pude terminar la frase cuando mi estómago rugió. Ella me miró arqueando una ceja por lo que tuve que ceder.

 

Nos tiramos junto a un árbol con la comida, ya había oscurecido y yo no acostumbraba a cenar afuera, puesto que estaba muy oscuro sin una fogata, pero ella había insistido.

 

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-Y tú harías lo que sea por complacerla –Dijo Thomas en tono juguetón, exagerando dramáticamente las palabras.

-No sé como es que Minho podrá aguantarte mañana cuando entres al shuck laberinto.

-Minho no me cuenta historias cursis de su pasado.

Newt rodó los ojos y siguió contando, puesto que ya había descubierto el particular interés que su amigo había adquirido en la historia, por más que no lo admitiera.

 

•••

 

Casi nadie cenaba afuera, por lo que estábamos casi solos, a oscuras.

 

•••

 

-Mmm… ¿Solos y a oscuras? Debías estar muy cómodo ¿Eh? ¿Verdad, Osito Newt?

Newt le dio un fuete golpe al hombro de su amigo.

-¡Te dije que no me llames así!

-¿Entonces no niegas lo anterior?

Ese comentario hizo que Thomas recibiera otro golpe por parte de su amigo.

 

•••

 

-¿Minho te molestó mucho hoy en la huerta? –Pregunté fingiendo desinterés, mientras miraba hacia otro lugar.

-Luego de que te fuiste se fue a la sala de mapas –Respondió, mientras le daba una probada al cuenco de sopa que llevaba en la mano.

Era increíble lo feliz que me había puesto esa respuesta, pero luego me quedé unos segundos callado, pensando. ¿Estaba celoso de uno de mis mejores amigos? Y no fue hasta minutos después que caí en la pregunta: ¿Por qué?

Lyra se movió un poco al dirigir otra cucharada a la boca, por lo que su hombro rozó con el mío, y ella pareció no notarlo, o que no le importara, porque lo dejó ahí mientras seguía comiendo.

Esa descarga eléctrica que me recorrió el cuerpo me hizo caer en la cuenta.

Me gustaba Lyra.

La miré de soslayo, mientras ella acababa. Luego se volteó a mirarme y dirigió su mirada a mis manos.

-Pensé que estabas hambriento.

En ese momento me di cuenta de que ni había tocado mi comida, por lo que me acerqué una cucharada a la boca. Estaba fría.

-¿Te ocurre algo? –Insistió- Newt, hoy estás muy perdido.

No podía ver su rostro claramente a través de la oscuridad, pero alcancé a ver unos rasgos de preocupación.

-Creo que… lo de Nate me tiene un poco decaído –En parte era verdad, pero no podía evitar sentir el sentimiento de culpa.

Lyra se quedó unos segundos sin abrir la boca, hasta que sentí como se abalanzó hacia mí para darme un abrazo. En ese momento sentí que casi se me cortaba la respiración.

A veces un abrazo vale más que mil palabras.

Pero un abrazo suyo vale más que otros mil abrazos.