Nuestro juego | Paulo Dybala

Capítulo 27.

Antes de empezar quería deciros que ayer publiqué en mi otra novela "A veces, siempre" y la verdad no me gusta el poco apoyo que está recibiendo. Yo escribo mis dos novelas con las mismas ganas y me gustaría que tuviera la misma repercusión. Así que si podéis ir a leerla que os va a encantar. Ahora, espero que disfrutéis de el capítulo de hoy.

Paulo me mira y levanta sus cejas.

-Ah, osea ¿qué es mi culpa?- dice haciéndose el desentendido de la situación.

-Hombre, no va a ser la mía.- estoy totalmente descolocada. No me esperaba para nada esta reacción de paulo.

-A ver chicos, Paulo lo hizo mal por obligarte a ir.- gira su cabeza para mirarle para que le quede aún más claro que está hablando de él.- Pero no es culpa de ninguno de los dos, es culpa de James, él es el único que tiene la culpa aquí. Termina Francesca intentando tranquilizarme.

-No. Fué mi culpa.- levanto mi mirada y busco los ojos de Paulo.- Yo le fuí infiel.

-Lo fuiste porque no le amabas de verdad, Valentina.- dice Paulo con un ono más calmado ahora.

-¿Quién dice que no le amaba?- le replico a Paulo.- ¿Acaso tú si que sabes lo que es amar?- este baja su mirada Francesca y Tucu se empiezan a miran entre ellos.

-Claro que lo sé. Contigo lo he aprendido.- yo me río y niego con la cabeza.

-¿Cuándo? ¿Cuándo lesionaste a James por un ataque de celos cuando aún no eramos nada? ¿O cuando viniste a mis vacaciones sin avisarme porque sabías que no te quería ver allí?- Paulo niega repetidas veces.

-No me puedo creer que estés siendo tan egoísta.- intenta acercarse a mi para tranquilizarme pero yo doy un paso hacia atrás.

-El único egoísta de los dos has sido tu todo el tiempo. Solo has pensado en ti, no en lo que yo sentía.- me alejo más.

-Valentina, no me dejes ahora.- subo las mirada de mis ojos llorosos y le miro. Me duele mucho más que a él. No puedo soportar esta situación yo sola, ni con él. Necesito tiempo para mi y para pensar.

-Lo siento Paulo.- me alejo aún más de los tres intentando salir de el salón de Paulo.

-Por favor, podemos arreglarlo. Quédate.- yo niego. No aguanto más.

-No Paulo, me voy a Milán.- dicho esto les dejo a los tres en la casa de Paulo. Ni siquiera puedo imaginarme que se les está pasando por la cabeza ahora mismo. Pero si que se lo que está pasando por la mía.

Un revoltijo de pensamientos. De todos los momentos con Paulo. Siento que mi cabeza va a explotar. Mientras salgo de la urbanización para intentar buscar un taxi, siento como si una parte de mi se hubiera quedado en su casa. En ese momento saco mi móvil y llamo a la persona que más necesito en estos momentos.

Espero muy nerviosa hasta que por fin se paran los pitidos de espera y me atiende el teléfono.

—Hola Valen, ¿qué tal todo?— me pregunta con la misma alegria que siempre.

—Mal.— le respondo intentando aguantarme las lagrimas que no paran de correr por mis mejillas.

—Ey, ¿que ha pasado? ¿Ha sido James?— cuando oigo su voz no puedo dejar que mis pensamientos se liberen de lo sucedido.

—¿Tienes tiempo? Es una historia muy larga.— Entonces no espero la respuesta de Marco para empezar a contarle toda la historia. Desde aquel partido en Argentina, desde las vacaciones, desde la infidelidad. Todo. Y la verdad. Me siento bien contándoselo. Siempre será mi mejor amigo y me demuestra que tiene plena confianza en mi. Y que nunca me va a defraudar. No importa el tiempo que lleváramos sin hablar, siempre podré llamarle.

(...)

—Bueno, ya tienes lista tu habitación en el hotel.— me dice mi madre mientras se sienta a mi lado en el sofá de lo que solía ser mi casa.

—¿Os mudáis los dos?— le pregunto cuando veo toda la casa llena de cajas y pocos muebles.

Asiente.— Así es, decidimos que era mejor venderla y que cada uno nos fuéramos por nuestro lado. Si quieres con el dinero de la venta, te puedes comprar una más pequeña tú.— yo le miro incrédula.

—¿De verdad, mamá?— ella me pasa un mechón que tenía en la cara y lo pone detrás de mi oreja.

—Claro cariño. Al fin y al cabo, siempre serás nuestra chiquitina.— yo sonrío y le abrazo. Sin duda había echado de menos a mi madre.

MIL PERDONES.

Se que no tiene perdón. He estado muuuchoooo tiempo sin publicar, pero es porque tengo que preparar bien los capítulos que vienen, ya que la historia se va a poner MUYUYY INTENSA. ¿Cómo creéis que acabará Valentina esta historia?

DEJADME EN LOS COMENTARIOS VUESTRAS TEORÍAS.

Nos vemos pronto

Likeana💘💘💘💘💘💘