Capítulo dedicado a liliblake828 💘💘💘 gracias por participar en el sorteo!!! Y a los demás, no os preocupéis por que pronto haré más.
Os dejo con el capítulo:
—Chao, nos vemos.— digo a mi teléfono.
—Nos vemos pronto preciosa.— James responde desde la otra línea del teléfono y le cuelgo.
Decidí llamarle ya que teníamos cosas de las que hablar, decidimos que iría a Madrid lo antes que pudiera para poder solucionar todo y decidir bien que es lo que voy a hacer a partir de ahora ya que no les quiero hacer daño a ninguno de los dos.
Me levanto de la zona de chill out que hay en la casa de mis padres y entro hacia el salón por l gran cristalera. Paulo se encuentra sentado en el sofá.
—¿Qué te ha dicho?— me pregunta sin levantar la vista del móvil.
—¿Cómo sabes que estaba hablando con él?—frunzo el ceño y es cuando el me mira a los ojos.
—Simplemente lo supuse.¿Entonces?.— levanta sus cejas esperando una respuesta por mi parte.
—Nada. Tendría que ir a Madrid para hablarlo con él.— este asiente y vuelve a bajar su vista a el móvil.
—¿Qué tal con Ludovica?— no se inmuta lo más mínimo cuando le pregunto por su exnovia.
—Nada importante.— le quitó el móvil para que me mire.—¿Que haces? Dámelo.— Paulo se pone nervioso.
—¿Qué era?¿Modelo?.—yo me río.
—Modelo y cantante.—Deja de intentar quitarme el móvil al ver que no lo iba a usar, que era para llamar su atencion.— Además me invitó a su concierto en Milán, que es justo hoy.— yo levanto mis cejas sorprendida.
—Pues vamos.— este se paraliza.
—No no.— Se levanta conmigo y hace que me vuelva a sentar.
—¿Por qué no? Necesito despejarme un poco y lo sabes...— el chantaje siempre se me ha dado bien.
—Valentina se que quieres ir para provocarle.— yo bufo haciéndome la víctima.
—Para nada, además que voy a provocar si vosotros no sois nada, ¿no?.— Ahora es el quien bufa.
—Está bien... vamos.— Yo sonrió y dejó un beso en su mejilla.
(...)
Mientras me pongo mis pantalones negros pitillo, Paulo entra por la puerta de mi habitación, bueno, ex habitacion.
—¿No sabes llamar o qué?.— rápidamente me subo el pantalón y me lo abrocho.
—Ni que fuera la primera vez que te veo en estas circunstancias.— yo suelto unas risas y él también.— ¿Estás lista?— Me pregunta mientras se apoya en el marco de la puerta.
—Me seco el pelo y ya.— Me giro y le veo. Va vestido con unos pantalones negros también y con una camiseta azul de alguna marca cara.
—Ludovica no sabe que voy a ir contigo.— yo sonrío interiormente.
—Pues que sorpresa más buena se va a pegar.— le respondo mientras entro al baño y cojo el secador de pelo.Al mirarme al espejo veo la felicidad que Paulo provoca en mi. A decir verdad no estaría aquí de no ser por él, que me insistió para que viniera.
(...)
El coche nos baja por la parte de atrás del Teatro degli Arcimboldi donde hay fans esperando a que Ludovica baje para prepararse para el concierto. Paulo y yo simplemente saludamos con la mano mientras la gente nos saca fotos con sus móviles.
Una vez que hemos llegado a el parking subterráneo del teatro, bajamos del coche y mientras unos hombres de seguridad nos acompañan hasta que el ascensor llegue a la planta calle.
Una vez dentro del teatro, vamos hasta los bastidores de el escenario, donde están haciendo la prueba de sonido y nos encontramos a Ludovica bailando, o intentándolo al menos por que Dios mío... yo de pequeña bailaba mejor.
La verdad es que no entiendo como puede tener fans. Supongo que por qué no saben como es realmente. Lo mala persona, fría y calculadora con tal de que ella salga victoriosa en lo que sea.
—¿Que te pasa?— me pregunta Paulo cuando me ve empanada mirando al suelo.
—Nada me había empanado. ¿Te gusta el teatro?— le pregunto para cambie de tema, este asiente.
—Nunca había estado en uno tan grande, es muy bonito.— yo recuerdo mis tiempos de cuando era pequeña.
—Todos los años bailaba aquí.— Paulo levanta las cejas como forma de asombro. —Hacía ballet y todos los años realizábamos una gala benéfica en este teatro.—
—Seguro que eras la que mejor lo hacía.— sujeta mi mano y yo inconscientemente sonrío.
—¡Paulito!— Una voz chillona me interrumpe a mis espaldas. Paulo y yo nos giramos y podemos apreciar, obviamente, a Ludovica Piemonte, la "superstar" del momento.— No me habías avisado de que venías... y con compañía...— eso último lo hace con una mueca de asco a la que simplemente sonrió falsamente. Mi acompañante iba a responder pero yo me adelanté.
—Si... bueno. Es que estábamos con mi familia y dijimos , ¿por que no venir? Y Paulo me invitó. Espero que no te importe.— Ludovica intenta levantar la ceja para poner una mueca pero no sabe.
—Si, si... no me importa tu visita. Paulo ven, te quiero enseñar una cosa en mi camerino.— Ludovica agarra del brazo a Paulo y se lo intenta llevar pero este tira de su brazo.
—Simplemente hemos venido a ver el concierto, Ludovica.— toma corte.
—Ah bueno... entonces supo que ya sabéis dónde está todo... Tengo que seguir con la prueba.— una vez termina de chillarnos esto, se gira y vuelve donde su elenco de baile le estaba esperando para continuar ensayando.
Yo largo una carcajada en cuanto nos ponemos en marcha hacia la sala de descanso que hay.
—Eres la peor.— Paulo ríe conmigo y pasa un brazo por mis hombros.
—¿Qué querías que hiciera? Lo mío que no lo toque.— justo cuando digo la última palabra, Paulo levanta sus cejas.
Vaya, la he liado.
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No me puedo creer que NUESTRO JUEGO haya llegado a las 3k de leídas!!
Ha subido 1k en menos de dos semanas y estoy súper súper súper contenta. No se como agradecéroslo. En verdad si.
Espero que os guste este capítulo. Nos vemos.
Likeana
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Nuestro juego | Paulo Dybala
Teen Fiction«Jugaron tanto que se enamoraron». Aclaración: TODO LO SUCEDIDO DENTRO DE LA NOVELA ES FICCIÓN, NADA DE ESTO HA SUCEDIDO Y CUALQUIER RELACIÓN CON LA REALIDAD ES PURA COINCIDENCIA.