《20》

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Las paredes blancas me desconciertan, el constante pitido a lado mío me incomoda, el dolor de cabeza me aturde y el mareo que siento cuando trato de inclinarme hacen que regrese la cabeza sobre la almohada.

—Jimin por favor detente. —La dulce y preocupada voz de Jk llenan mis oídos. —debes guardar reposo.

Lo miro y se me estruja el corazón al encontrarlo con curaciones en su rostro. Llevo mi mano hasta la herida de su labio, suelta un mohín de dolor, pero no se aleja, toma mi mano y la besa en cuanto trato de quitarla.

—¿Qué hago aquí? —Pregunto en cuanto los recuerdo llegan a mi mente.

Jungkook parece decaído y me preocupa.

—¿Mi bebé está bien? —Él asiente y suspiro aliviado—. Jk lo siento. Siento todo lo que te dije, nada de eso es verdad.

—Lo sé lindo. —Sé que lo sabe, solo quiero repetirlo para que no quede dudas. Me besa y agradezco sentirlo de nuevo pero...

—¿Qué es lo que pasa entonces?

—Tuviste una falla en el corazón... pudiste... —Traga grueso—. Perder al bebé, si no fuera porque Min es doctor y llegó con Nam en el momento que estabas teniendo tu crisis. —Paso de largo el hecho de que Min sea doctor y no estuviera enterado y pregunto por qué me ha pasado esto—. Lee me explico que fue casi inevitable por todo lo que estaba pasado, la tensión que ocasionó el secuestro de Jin fue un golpe duro para tu corazón y no resistió, ahora tendrás que estar en casa descansado por el resto del embarazo si es que queremos que Blim nazca sano. —Asiento totalmente de acuerdo.

—¿Blim?

—Es así como le he puesto a mi querido bebé. —Me toca el vientre—. ¿No te gusta? —Sonrió y asiento, no quiero dañar sus sentimientos.

—Blim, me gusta... —Me pongo más serio—. ¿Qué ha pasado con Jackson?

—Se ha ido. —Suspira cansino—. Cuando sufriste el desmayo, él trató de tomar la pistola y disparar, Nam ha sido quien lo detuvo interponiéndose.

—Dios, ¿como esta Nam?

—Por suerte solo le dio en el hombro, después de eso él decidió huir sin importarle ni siquiera su hermano...

—¡Oh, por Dios ya despertó! —El grito de Jin nos distrae, se dirige a mí con paso rápido y me abraza efusivamente. Me sorprendo ante su afecto—. Gracias. —me dice. —en serio, gracias... nadie hubiera hecho lo que tú, y menos después de como te trate... perdón por todo lo que te he dicho, nada de eso te merecías.

—No te preocupes. —le tomo la mano y le sonrió. —todo está olvidado.

—Ahora yo me encargaré de cuidarte a ti y a mi sobrino. —Emana emoción.

—Sé que cuidaras bien de Jimin y de Blim. —dice Jk.

—¿Blim?.. Joder que es ese nombre tan horrendo? —suelta un mohín de desagrado.

—¿Qué dices Jin?, es muy bonito, yo lo escogí. —dice ofendido.

—Ni loco permito que le pongas ese nombre tan malo a mi sobrino. —empiezan a discutir y yo ruedo los ojos risueños.

—Por suerte yo soy el padre, así que yo decido, pedazo de idiota.

—Tan malo como tus gustos.... —me mira apenado. —no lo digo por ti cariño.

—Paren por favor. —los callo. —no peleen por el nombre, aún no sabemos que a hacer, ¿qué tal si es niña? —los dos me miran y sonríe al unísono.

—Le podremos Blina—Jin y yo nos miramos con horror.

—¡Nooo!—gritamos.

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✼𝓔𝓵 𝓟𝓻𝓮𝓹𝓪𝓰𝓸✼ KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora