Insostenible (hopetaekook)

Capítulo 10:

Taehyung entró rápidamente a la vivienda, con el corazón acelerado y su rostro calentándose poco a poco.
No entendía nada. Jungkook lo había besado, Jungkook.

¿No se suponía que era el compañero de Hoseok? Ambos eran pareja, Jungkook se lo dijo. Se suponía que estaban juntos, que se amaban. No entendía porque lo besó entonces.
Se preguntó si sería algo normal entre cambiaformas, no sabía mucho de su sociedad. Probablamente era algo normal.
¿Cierto?

Aunque el alfa actuó de forma muy extraña, yéndose con tanta prisa. Probablemente fue porque ya era tarde, no sabía que qué pensar.
Se acostó de espaldas en su cama, mirando al techo en su habitación oscura.
Sus labios estaban más suaves, y sentía como hormigueaban mientras su vientre se sentía extraño, dándole ganas de reír.
No sabía porqué, pero se sentía muy bien y al mismo tiempo culpable. Al día siguiente le preguntaría a Jimin si eso era normal.

Le preguntaría a alguno de los que vivían con él, pero no quería que piensen mal en el caso de que no estuviera bien.

Se acostó colocando las dos mantas del baúl en su cama, no tenía frío pero sentía la necesidad de tener peso en encima.

...

Le costó un poco quedarse dormido pero finalmente lo logró. Estaba tan nervioso por lo ocurrido la noche anterior, que sentía el impulso de ponerse a trabajar en algo.
Pero no le habían dicho cuál sería su obligación en ese lugar, no entendía porque pero aún no le habían dado ninguna y temía que quisieran deshacerse de él por eso.

Aún era bastante temprano, por lo que se las arreglo para encontrar los productos de limpieza y se puso a limpiar.

Terminó de limpiar toda la casa casi sin notarlo, y ni siquiera se sentía cansado. Estaba tan lleno de energía que no sabía qué hacer.

Se sentó en el suelo de la cocina mientras pensaba, no entendía porque se sentía tan alarmado pero quería quitarse esa sensación y no sabía cómo hacerlo.
Hasta que todos los miembros de la casa salieron, aún con sus pijamas puestos.

- Tae?, qué haces?- le preguntó Tiffany acercándose a él, extrañada-

- No sé, no sé qué más hacer- respondió aún alarmado- ¿qué quieren que haga?

Se miraron entre ellos con expresiones que no pudo identificar, pero no paraba de sentir esa alarma en su interior. Incluso se le dificultaba la respiración de a ratos.

Lo hicieron sentarse en la mesa y Tiffany se quedó a su lado, hablándole de varios temas triviales que no podía seguir del todo. Pudo notar que los otros tres hablaban entre susurros desde la otra habitación. Pero estaba medio atontado.

Después de desayunar no le dejaron ayudar a limpiar, y le pidieron que esperara un momento en su cuarto. Pero una alarma se encendió en él al hallarse solo, sin nada que hacer.
Estaba cansándolos, no hacía nada. Era un inútil.

Pasó un rato más mirando distraído hacia la nada, cuando recordó los suaves labios del alfa. Se tapó la cara al sentir como su rostro volvía a encenderse, no entendía porque se ponía así. Solo quería recostarse y dar vueltas mientras recordaba sus bonita sonrisa, sus ojos brillantes achinándose cuando lo Miraba de esa forma tan dulce.
Se levantó sintiéndose más sofocado y decidió que tenía que hacer algo más, no podía quedarse recostado por más tiempo. Estaba intranquilo, por lo que decidió salir.

Entonces recordó lo bien que lo pasó el día anterior, con Jimin. Pero todo cambio cuando fue a cenar, aunque el recuerdo del par de lobos se sentía más alegre y positivo para él. Aún si había acabado de esa forma, no podía evitar recordarlo como lo mejor de la noche.