Capítulo 25:

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Jungkook:

Estaba tan concentrado en dejar entender su punto, que no había sido consciente del momento en el que su pequeño compañero desapareció.
Solo supo que Hoseok se puso a hacerle un drama cuando notaron que el menor se había ido, justo detrás de su problemático amigo.

- Solo deja de gritarme y vayamos detrás suyo- lo interrumpió-

- Seguiremos hablando de esto después- le recordó, antes de salir juntos del cuarto-

Al principio buscaron con calma, esperando encontrárselos en alguna esquina, discutiendo o reconciliándose. Después de todo eran un par de omegas jóvenes sin ningún entrenamiento, no deberían ser capaces de llegar muy lejos.
Por eso fue que se pusieron tan nerviosos cuando no tuvieron señal de ninguno de los dos, aún habiendo bajado ya cuatro pisos. Comenzaron a correr, ambos desesperados. Jungkook sentía que algo iba a suceder, que perdería al más pequeño y eso no hacía más que confirmar una y otra vez sus dudas. No sentía que fuera posible estar tan preocupado por quien no fuese un compañero. Volteo hacia Hoseok, encontrándose una expresión que debía lucir como una imitación más descontrolada que la suya propia.
Realmente estaba preocupado.

Sabía que era absurdo estar tan angustiado por él, ya que lo había visto hace unos minutos y sabía que estaba aún en la mansión, pero simplemente no podía mantenerse tranquilo.
Se detuvieron al oír un grupo de voces resonando con fuerza desde los pisos de abajo, por lo que bajaron rápidamente, encontrándose a un par de soldados. Estos eran de la promoción de Hoseok, normalmente muy amistosos. Aunque en ese momento, parecían haber visto un fantasma.

- Que hacen aquí?- les preguntó el más bajo- El infiltrado escapó, debe estar en alguna parte de la mansión.

- Si, deberían quedarse con el zorro- les aconsejó el otro-

Se miraron mutuamente por unos segundos, antes de volver a correr por el lugar, buscando al omega.
Jungkook no podía creer que tenía tan mala suerte, realmente era algo imposible. Tendrían suerte si los dejaban cuidar del menor después de eso.

Continuaron corriendo hasta encontrarse a un hombre un poco más alto que el menor, sujetándolo del brazo e intentando llevarlo con él. Era una escena absurda, pues no hacía verdadera fuerza, pero fue suficiente para provocar a sus lobos. En menos de un parpadeo tenían a Tae detrás, mientras que el intruso era rodeado por los soldados que iban llegando.
Estaba tan centrado en revisar al omega, que le costó ser consciente de la tensión que acababa de generarse en el ambiente. Dirigió su vista a los soldados, todos sostenían al desconocido con miradas cargadas de extrañeza. Mientras que Hoseok fruncía el ceño considerablemente.

- Suéltenlo!- exclamó el desconocido, con voz rasposa-

Lo llevaron arrastrando escaleras abajo, dirigiéndose a donde supuso estaba el cuarto de interrogatorios. No entendía lo que acababa de suponer pero ahora que veía que Tae estaba bien, podía sentirse tranquilo.
Subieron al piso de Tae y lo acompañaron a su cuarto, Jungkook quería disculparse por arruinar su reconciliación con Jimin, pero este habló primero.

- Ese sujeto..- comenzó, viéndose confuso-  actuaba como si me conociera..

Su rostro mostraba una expresión de tanta confusión y extrañeza, que Jungkook se sintió miserable por no poder cambiarla rápidamente.

- Debió ser muy incómodo- comento Jungkook, fastidiado- Lamento que tuvieras que estar con un tipo así, si no hubiese sido un omega..

- No es eso- lo interrumpió- su olor, el..-Se quedó en silencio por un momento, intentando pensar en lo que diría.-

Insostenible (hopetaekook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora