ＤＯＮ'Ｔ ＳＡＹ ＮＥＶＥＲ

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Junto con Sam se había transformado para ir a casa de Sue Clearwater para avisar se lo que había pasado, ninguno iba pensando en nada más que en cómo se lo iban a decir a la mujer, sintiendo un vacío en el estómago ya que era una noticia que prefieres no decir. Al llegar al límite del bosque ambos salieron de fase y se pusieron sus ropas.

- Ve tu por tu hermano y dile que lleve a la chica a su casa, yo le diré a Sue y los llevaré al hospital -le dijo con voz sería-. Cuando terminen quédate con Isabella, no la dejes sola hasta que Embry pueda ir con ella.

Estuvo a punto de reclamarle pero ya la había dejado, bufo y comenzó a correr a la playa; al verlos ahí, teniendo una conversación casual solo se acercó algo molesta por lo que tenía que hacer.

- Hay que irnos a su casa, tiene que descansar y nosotros ir con la familia de Henry -dijo y ayudo a la chica a levantarse.

- ¿Qué pasó? -pregunto volteando a ver a ambos hermanos.

- Harry ha tenido un infarto y ahora se encuentra en el hospital -le respondió la chica-. Charlie y mi papá están con Sue.

- Harry falleció -terminó por decir su hermano.

Se subieron los tres al auto en completo silencio, dejando en medio a la chica de ambos ambos lobos para transmitirle un poco de calor.

- Recargarte en mi, estoy a cuarenta y siete grados -hablo el Black volteando a ver de reojo a la chica.

Se la pensó un poca y se acercó a él, acurrucandose lo más que podía a él.

- Debe ser agradable -murmuro la chica acurrucandose lo más que podía-. Estar siempre a tan alta temperatura.

- Es cosa de lobos -dijo Cira-. Es algo que pronto vas a entender, con eso de que ya eres parte de la manada.

Se quedaron en silencio, la loba en lo que había pasado unos días antes, el como después de eso el ambiente entre ella y Embry se había vuelto pesado, y sabía que lo suyo no era comparado con lo de Sam y la Clearwater, pero que el lobo no dejará de pensar en la chica Swan la ponía de malas. Jacob solo pensaba en lo que le pudo haber pasado a la impronta de su mejor amigo y que debía de cuidarla mientras que él estaba ayudando con lo de Harry.

- Bien, llegamos -dijo el moreno rompiendo la burbuja en la que se encontraba su hermana.

Al abrir la puerta y bajar pudo reconocer el aroma a muerto por lo que volvió a subirse empujando a la chica y cerrando la puerta.

- ¿Qué te pasa Cira? -le pregunto al sentir tremendo empujón.

Vió de reojo a su hermano y asintió.

- Vámonos, será mejor que te saquemos de aquí -murmuro el chico volviendo a encender el auto.

- ¿Qué? ¿Por qué? -comenzo a ver al rededor buscando alguna respuesta.