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Cira se puso ropa y salió de entre los arbustos, había ido a dejar a Isabella a la casa de su padre por lo que ahora se encontraba cerca de la casa de Sam

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Cira se puso ropa y salió de entre los arbustos, había ido a dejar a Isabella a la casa de su padre por lo que ahora se encontraba cerca de la casa de Sam.

Cuando salió pudo apreciar como los chicos salieron corriendo y es que habían sentido su presencia apenas unos instantes. Ella al ver a ambos Clearwater se sorprendió, ella no deseaba eso para el pequeño Seth ya que aún era joven pero supuso que la muerte de su padre había causado aquello.

- Me alegra que llegarás -Embry se acercó y la abrazo con fuerza, feliz de verla y que la trajera nuevamente-. Estaré en deuda contigo siempre.

- Espero que recuerdes estás palabras -le dijo con una pequeña sonrisa mientras se alejaba.

Al alejarse completamente volteó a ver a los demás, parando en su alfa.

- ¿Por qué me colgaste así? -le pregunto cruzándose de brazos.

- Debemos hablar, vamos -le dijo mientras comenzaba a caminar, al ver qué varios iban a reclamas volteo a verlos-. Se enteraran después, ahora solo déjenme hablar con él.

Nadie estaba convencido pero respetaron la decisión de la chica, mordió su labio antes de dar media vuelta e ingresar por completo al bosque.

Nadie estaba convencido pero respetaron la decisión de la chica, mordió su labio antes de dar media vuelta e ingresar por completo al bosque

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- Te has imprimado de un vampiro -preguntó sorprendido, ambos estaban frente a frente con los brazos cruzados.

La chica le había contado todo, o bueno, casi todo, lo único que no le había contado y no le iba a contar es que debía ser convertida en uno de ellos.

- Si, me imprimí a un vampiro -la morena lo miraba a los ojos-. Tu mejor que nadie sabe que uno no lo decide, solo pasa y no siempre en el mejor momento.

Habló a sabiendas de lo que el chico frente a ella había hecho.

- Es un maldito vampiro Cira, no un humano o un lobo -dijo molesto, paso una de sus manos por su cabello, mirándola a los ojos, quería hacerla entender.

- Se que te preocupas, de alguna manera -dijo mientras ponía una mano al frente, parando lo que le iba a decir-. Pero es mi impronta y no pienso negarme a él, sabes que los lobos tienen suerte si encuentran a su mitad.

DON'T SAY NEVERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora