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Me dejaron afuera de mi casa, les agradecí mucho y después se fueron. Miré la hora en mi teléfono de nuevo y eran las 4:34, mi mamá me va a castigar seguramente, pero al menos he llegado a casa, ya que mi chófer se emborrachó y terminó atrapada por la policía.

Saque las llaves de mi mochila y abrí silenciosamente la puerta, para asi ver a mi hermana acostada en el sofá durmiendo. Seguramente estaba esperándome.

Sonreí y subí las escaleras lo más sigilosa posible para después abrir la puerta de mi habitación y tirarme en la cama. La noche más extraña de mi vida, pero también la más divertida.

Ahora que me recuerdo, ni siquiera le pedí el número a Ruel, solo se su nombre. Si no fuera por el, estaría en la comisaría llorando y esperando a que mi mamá viniera a recogerme.

...

--Loren--Sentí unas manos empujando mis hombros.--¿Que pasó ayer?--Dice mi hermana.

Aún con los ojos cerrados, respondí--Llegó la policía y tuve que escapar, déjame dormir.

--¿Como así que escapaste de la policía? ¿Qué pasó con Lexie? Su mamá llamó preocupada diciendo que tuvo que ir a la comisaría a recogerla.--Dijo Abby, preocupada.

--Ella se emborracho mucho ayer.--Me acomodé en la cama para mirarla.--Cuando mire hacia fuera de la casa Lexie ya estaba con un policía arriba suyo, no podía hacer nada, Abby.

--¿Tan loco fue todo ayer?

--Lo fue.--Escuchamos cómo la puerta se abría y pude ver la figura de mi mamá.

--¿Quien te trajo si no fue Lexie?--Fue lo primero que me dijo al verme.

--Hola mamá, si estoy bien gracias por preguntar.--Dije dando una sonrisa falsa.--Me trajo un chico que conocí, era el único que quedaba en la fiesta.

--Interesante.--Dijo mi hermana.--¿Como se llama? ¿Tienes su número? ¿Es guapo?--Se notaba lo emocionada que estaba por saber todo lo que pasó ayer, mamá solo salió lentamente de la habitación, por lo que reímos.

--Se llama Ruel, no tengo su numero y en verdad no lo pude ver bien ya que era de noche. Ahora, dejame dormir.--Volvi a poner mi cabeza en la almohada.

--Eres muy aburrida. Como sea, me voy.-- Dijo para después levantarse de mi cama y salir por la puerta. Agarre mi teléfono y le mande un mensaje a Lexie.

--¿Estas bien?.

En verdad se me habían quitado las ganas de dormir. Así que me vestí y baje las escaleras para ir a por algo de comer, hasta que mi teléfono vibró.

--Sí, ya estoy en mi casa. ¿Y si vienes para poder hablar mejor? Te espero.

Suspiré después de leer su mensaje, agarre un paquete de galletas y le pedí a Abby que me llevara a casa de Lexie.

Al llegar habían dos autos afuera de su casa, por lo que me entró curiosidad. Bajamos del auto de mi hermana y tocamos la puerta para después ver a una Lexie con cara de no haber dormido durante una semana y con su pelo desordenado.

Me invitó a pasar y al entrar pude ver a una chica sentada en su sofá, su cara se me hacía conocida.

--Ella es Coco, estuvo en la fiesta ayer y me acompañó en la comisaría, los policías también la atraparon. Por lo que me cayó bien y la invité a conocerte.--Dice con una sonrisa.

--Hola, mi hermano me contó que ayer se escapó de la casa con una chica porque los policías los seguían, seguramente eras tú.--Me sonríe y yo imito su acción.

--Sí, fui yo. Si no fuera por tu hermano mis padres me hubieran castigado por al menos un año.--Reí y escuchamos como la puerta se abría, pude ver que era Ruel, pero esta vez lo pude ver con más luz y sin disfraz. Dios, era bastante lindo.

--Hey-- Me saluda y le sonrio.-- Coco, ya deberíamos irnos, Papá quiere hablar contigo así que prepárate para una charla de una hora.

Todos reímos al unísono, Coco se despide de todos y sale acompañada de su hermano al estacionamiento.

--Tonta, ve a pedirle su número.--Dice Abby y al instante salí de la casa, se me estaba olvidando eso.

Al ver que Ruel venía caminando hacia mí, me puso un poco nerviosa así que me paré en mi lugar y espere a que llegara frente a mi.

--Se me olvidó darte mi número ayer. Fue estúpido decir que nos volveríamos a ver si no teníamos como comunicarnos.--Me dio una sonrisa, y echó su cabello hacia atrás. Ahí pude observarlo claramente. Era alto, cabello rubio, sonrisa hermosa y sus ojos eran verde oscuro. Debía dejar de mirarlo como estúpida y decir algo.

--Sí, exacto.--Reí y después me dictó su número para que yo pudiera anotarlo.--Hablamos luego.--Desde que comenze a hablar con él no deje de sonreír en ningún momento, por lo que me estaba sintiendo tonta, así que cambié mi expresión a una más normal.

--Sí, hablame cuando quieras, nos vemos.--Dice para después dar la vuelta y subirse al auto de su hermana.

I'm So Down For You - RuelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora