I'm So Down For You - Ruel

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La fiesta estaba llena, las personas ya estaban dentro y nos aseguramos de que todos estuvieran en silencio ya que en cualquier momento podia llegar Lexie. Estaba un poco nerviosa y ansiosa a la misma vez al ver que las personas no guardaban silencio.

––¿Podrías decirles que se callen?––Le dije a Coco, ya que yo era demasiado tímida para gritar. Ella asintió.

––¡Guarden silencio!––Gritó Coco, pero la gente seguía sin hacer caso.

––¡Callense la maldita boca porque Lexie está por llegar!––Gritó Abby con todas sus fuerzas, por lo que al fin las personas hicieron caso.

––Dice que viene doblando, está por llegar.––Nos avisa Coco mirando su teléfono, por lo que abro mis ojos y Ruel se apresura en apagar las luces y todos intentamos guardar el mayor silencio posible.

Coco estaba agachada en la oscuridad a mi lado para cuando llegara Lexie nos aventaramos sobre ella. Pero su pantalla se encendió y empieza a sonar su teléfono con una llamada de Lexie entrante. Rápidamente lo apaga y al segundo Lexie entra a la fiesta y...

––¡Sorpresa!––Gritamos todos al unísono, por lo que veo como Lexie sonríe ampliamente y se rie mientras nos mira. Rápidamente la abrazamos dejándola sin escapatoria por lo que sus risas aumentan al igual que nosotros.

––Seguramente ustedes organizaron todo eso, estoy segura––Nos dijo al separarnos del abrazo y nos apuntó con el dedo mientras reía.––Muchas gracias a todos––Miró a su alrededor y me dio mucha alegría ver que le gustó su fiesta.

Las luces se volvieron a apagar y la música comenzó a retumbar la casa. Si, tenía que soportar esto ya que era el cumpleaños de mi mejor amiga. Pero no me molestaba ya que hoy estaba dispuesta a pasarla bien.

––Ya encontraba un poco raro que no me dijieras feliz cumpleaños esta mañana––Me sonrió y pasó su brazo por mis hombros, por lo que reí.

––Sorpesa––Volví a decir––Ahora, cumpleañera ve y disfruta de tu fiesta que tanto tiempo nos tomó––Le sonreí y la empuje suavemente hacia la pista de baile. Por lo que ella me tomó del brazo y las dos quedamos en la pista mientras empezábamos a bailar.

A lo lejos podía ver a Ruel y Coco bailando con unos pasos que en mi vida había visto. Me reí mirándolos y seguí bailando con Lexie.

...

Pasaron algunas horas desde que habíamos estado bailando sin parar, por lo que mis pies no podían mas y necesitaban descansar un momento. Así que me salí de la pista de baile y busque algún lugar para sentarme. Me senté, mejor dicho, me tiré en la silla y al levantar mi vista lo vi otra vez. Estaba a una corta distancia de mi y su mirada no se apartaba de mi persona. Tom.

Traté de hacer como que no lo había visto y me volví a levantar del asiento para seguir caminando por la casa. Mis pies seguian doliendo pero prefiero caminar a que el este mirándome todo el maldito tiempo.

Pude visualizar el pequeño balcón en donde Ruel y yo nos conocimos el día de la fiesta de disfraces, me apresuré a caminar entre la gente para llegar a este y que alguien no me robara el lugar.
Al llegar puse mis hombros sobre el balcón y aspire el aire fresco. Aún recuerdo lo bien que se veía Ruel en ese traje de astronauta y lo mucho que me llamó la atención. Sonreí para mí misma y salté en mi lugar al sentir como una mano se posaba en mi hombro.

––El día de la fiesta desde acá veía el desastre que estaba quedando, me sentía el dios del mundo.––Río Ruel de lado mientras me miraba, mi corazón sé derritió ahí mismo y el ni lo notaba.

––Hasta que un policía entró a la casa y nos arruinó la diversión del momento.––Le sonreí y volví mi mirada hacia lo que daba el patio.––Fue divertido.

––Lo fue. Además acá nos conocimos––Mi corazón latió fuerte, y lo mire para verlo de perfil mirando al patio.

––Si jaja––¿jaja? no tenía idea de qué me estaba riendo pero los nervios se apoderaban de mi.

Unos fuertes golpes en la puerta llamaron la atención de todos en la fiesta, y alguien apagó la música para poder ver bien que ocurría.

––¿¡Quiénes están acá dentro?!––Se escuchaba un hombre enojado, por lo que mire a Ruel con confusión y el hizo lo mismo. Segundos después el hombre empezó a patear la puerta por lo que se escucharon algunos gritos de temor de algunas personas.