Fue lo mejor del amor | Paulo Dybala.

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Dos semanas después.

Ashley POV's.

Paulo no me deja ni ir al baño sola, cuando tengo consulta con el psicólogo me espera en la puerta y si no puede porque tiene que entrenar va alguno de mis hermanos.

Por otro lado sí pasaron cosas hermosas y es que Mateo dijo su primer palabra y fue "papá" Ashley 1 - 1 Paulo con Paulo lloramos tres eternidades y obvio Paulo me baboseó y lo sigue haciendo. Ámbar estaba re contenta diciendole "coti" para que Mateo dijera Coti. La amo.

-Mi amor, ya me voy-me aviso Paulo-¿vos que vas a hacer?-me pregunto.

-Voy a llevar a los bebés a la plaza-dije.

-¿Abril va con vos?-me preguntó.

-No, quiero ir sola-dije.

-Ash...

-Ash nada Paulo-dije-yo se que me querés cuidar amor, pero quiero un dia estar sola con mis hijos.

-Me da cosa-dijo.

-A mi también me da cosa ¿te pensas que no me muero del miedo cada vez que salgo de casa? pero no quiero que ellos condicionen mi vida y las actividades con mis hijos.

Pauli se acercó y me dio un beso en la frente.

-Bueno, tenes razón-me miró-avisame cualquier cosa ¿escuchaste? Cuando estés en la plaza y volviendo para acá, así me quedo tranquilo.

-Si papá-le dije y me reí.

-Papito-corrigió.

-Sese, papito-dije tentada.

Paulo se fue a entrenar y ahí desperté a los bebés para que después de bañarnos y desayunar, salgamos.

Cuando llegamos a la plaza, Ámbar vio unos nenes jugando en el arenero y quiso ir, así que yo me quedé con Mateo en las hamacas que estaban ahí, frente al arenero.

-Mamá-no dejaba de repetir Mateo y se empezó a restregar los ojitos.

-Hijo recién re despertaste-suspire y me acomode para darle la teta-¿no te vas a quedar para jugar con mamá y coti?-Mateo se prendió de una así que lo tomé como un no.

-MAMI MIRA-me gritó Ámbar y vi a Wanda con los nenes que se fueron de una a los juegos.

-¿QUE HACES VOS ACÁ?-le pregunte acomodando a Mateo para ir a saludar a los niños.

-Te quería venir a ver mamita-¿como estas?

-Bien-suspiré-HOLAAAAA-le di un beso a los cinco enanos que ya jugaban con Ámbar.

-Hola madrina-me saludó Franchu.

-Hola mi amor-la saludé de nuevo.

-Voy a estar con Ashley sentada ahí-señaló el banco-no se vayan muy lejos ¿escucharon?-le pregunto lo último a sus hijos mayores-y ustedes dos se quedan acá con la prima-le dijo a Isi y Fran.

Con Wan nos volvimos a sentar y ella me sacó a Mateo.

-Queria venir antes pero estaba en vueltas con la mudanza-explicó.

-¿Mudanza?-le pregunté-¿se mudaron de nuevo?

-Los niños y yo sí-confirmó-Mauro se quedó en París.

-No entiendo-dije.

-Nos separamos Ash-aclaró-pero terminamos bien de bien.

-Pero Wan-me acomodé-¿qué pasó?

-Es que ya no nos encontrábamos como pareja viste-me explicó-entonces hablamos y decidimos entre los dos que lo mejor para nosotros y para los niños era terminar.

-Ay boluda ¿por qué no me contaste? ¿Vos como estas?

-Yo estoy bien-asnintió-la que no entiende mucho y extraña horrores es Isi.

-Si obvio, es entendible-dije y la abracé con cuidado de que Mateo no llorara-sabes que podes contar con nosotros siempre igual.

-Si obvio, yo sé si-sonrió-¿has sabido algo de los hijos de la mierda?-me preguntó.

-Me hicieron ir a declarar como cuatro veces-dije-van a estar un buen tiempo.

-Nunca jamás me imaginé que Lucia estuviera tan mal de la cabeza-dijo.

-No, yo tampoco-suspiré-y este pibito que se sumó a la locura y estaba tres veces más loco que ella.

-Lo querían matar me imagino.

-Todos-afirmé.

-Ay boluda me alegro que estés bien, posta.

-Y yo me alegro de que te hayas dignado a venir-las dos nos reímos.

En eso me llamó Rodri.

-Me acaban de llamar del hospital Ash, Ada está por tener-dijo todo agitado apenas le atendí.

-E-me paré enseguida-voy ya para el hospital-dije.

-Paulo y yo ya estamos en camino-me dijo.

-Nos vemos-dije cuando con Wan ya caminábamos hasta los niños-Ro-dije después de una pausa.

-Que?

-Tranquilo, va a estar todo bien.

-Gracias Ash, nos vemos-cortó.

-¿Que pasó?-preguntó Wanda preocupada.

-Internaron a Ada para tener-le conté cuando ya habíamos llegado a las niñas.

-AY-dijo feliz-voy a buscar a los chicos, quédense con la tía-le dijo a las niñas.

Cuando llegamos al hospital, nos encontramos con mamá, Paulo y mis hermanos. Rodrigo había ido hasta la cafetería porque se estaba muriendo de nervios. Le iban a hacer una cesárea porque habían varias complicaciones.

Estuvimos unas cuantas horas y ya habíamos hecho una especie de cama rara para acostar a Ámbar, Mateo y Antonella; en eso, vimos que una banda de doctores corrían por todos lados, entrando y saliendo de la habitación que estaba Ada y ahí Rodrigo empezó a ponerse más nervioso todavía. No entendíamos nada.