Avatar. Corona de Fuego

7- Constitución

| AÑO 144 DG |

   —Natsu... —dice Izumi, sonriéndole a la tierna niña entre sus brazos.

   A la izquierda de la silla donde se halla ubicada, Malik extiende sus dedos hacia las manitos de su hijita y le hace sonreír.

   A su derecha, el joven príncipe Iroh de 10 años les ve con una gran sonrisa.

   —Muy bien, si están listos... miren fijamente al frente. —va diciendo un servidor, con un gran aparato frente a él y una manta negra con la cual cubre su cabeza.

   La familia real posa felizmente. En cuanto la fotografía es tomada, relajan posturas, pero su alegría no se desvanece. Continúan jugando y haciendo reír a la nueva princesa.

   La noticia de su nacimiento, por supuesto, genera otra oleada de paz en la Nación.

   Ese mismo año el Señor del Fuego Zuko firma una ley que da una validez parcial al libro de reglas y normas que el Congreso ha respetado en los últimos años en el interior de sus cuatro paredes, y que ahora quieren probar compartir con todo el país.

   Le llaman "constitución", y al parecer es para una mejor convivencia en la sociedad.

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| AÑO 153 DG |

   Una triste noticia no solo sacudió a la Nación del Fuego, sino a todo el mundo.

   Minutos después de que llegara a sus oídos, el Señor del Fuego salió de su oficina y caminó en silencio por los largos y vacíos pasillos del Palacio.

   Se detuvo en seco frente a una pintura en negro y blanco.

   A su alrededor había retratos de toda la familia y amigos cercanos, pero el de su buen amigo que esa mañana se había partido resaltaba de una forma que hizo a Zuko sonreír, al mismo tiempo que acariciaba el papel y las lágrimas amenazaban con caer.

   El Avatar Aang había fallecido.

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| AÑO 158 DG |

   Casi de emergencia, el Señor del Fuego salió volando con Druk de Ciudad Volcán.

   Por un momento Izumi creyó que se había convertido en Reina interina, pero no, pues su madre se mantuvo firme en las puertas principales del palacio para cuando su esposo se alejaba en el horizonte, rumbo a una misión especial en la Tribu Agua del Sur.

   Más tarde la Reina Mai y toda su familia supieron que unos maleantes habían tratado de secuestrar al nuevo Avatar, pero que el rapto fue detenido con éxito por Zuko, el Jefe Sokka, el maestro Tenzin y Tonraq, el propio padre de la joven elegida.

   Fue un gran susto, pero era algo pasado, y en cuestión de una semana Zuko ya había regresado a la Nación del Fuego siendo reconocido nuevamente como un héroe. Claro que para su entorno, pues nadie más a parte de ellos sabía sobre estos criminales.

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| AÑO 160 DG |

   Viendo a la princesa Izumi, de ya 46 años, sentada en el palco principal del gran salón, un hombre de tez blanca y bigote gris muestra sin temor una cara de molestia ante su presencia. Revisando su reloj de bolsillo ve que la sesión está a punto de terminar.