Sasuke lo podía notar perfectamente, incluso Naruto lo notaba ya que cada vez se acercaba a la peliazul prácticamente huía de él o sencillamente le daba una sonrisa incómoda para luego alejarse.
—Teme...—lo llamó. —¿Sabes porque Hinata-chan está así conmigo? —preguntó el rubio un poco desesperado, no le gustaba su actitud con él.
—Algo le habrás hecho—dijo él tranquilo mientras observaba a la peliazul pelar una manzana como si fuera lo más entretenido del mundo.
—¡Es tu novia! No podrías decírmelo tú—se quejó logrando que Sasuke lo mirara con incredulidad.
No sabía como diablos había llegado a esa conclusión tan equivocada, entendía perfectamente que la Hyuga estuviera molesta con él, de verdad que era un idiota con mayúsculas. La peliazul estaba enamorada de él, pero este no se daba cuenta de sus pensamientos.
—Sabes dobe realmente eres un idiota, la perderás por imbécil—le respondió haciendo enfadar al blondo.
—¡¿Qué quieres decir?! —bramó indignado para comenzar otra pelea entre ambos.
Hinata simplemente observó callada, la verdad es que no se sentía con ánimos de intervenir, menos después de lo que Naruto había dicho. De verdad que no entendía como es que el rubio podía pensar aquello, ella solo lo había mirado a él, su corazón solo era suyo. Pero parecía que él...
Aguantó las lágrimas que se querían asomar por sus perlados ojos, aquello ya era demasiado. Juraba que dejaría de amar al ojiazul, había llegado el momento de seguir adelante, ahora sabía que Naruto jamás correspondería a sus sentimientos, todos sus esfuerzos eran inútiles.
Así, entre alguna que otra discusión más por parte del Uzumaki y Uchiha pasó la tarde, y la barriga del blondo comenzó a rugir.
—Buah, que hambre tengo. ¿Vamos a Ichiraku? —propuso el rubio logrando que Sasuke pusiera mala cara.
—Si quieren puedo preparar algo para los tres—dijo Hinata lo más tranquila que pudo ya que aún seguía muy resentida con el ojiazul.
—No es necesario Hyuga, solo cocina para nosotros Naruto irá a Ichiraku—dijo sorprendiendo a la peliazul y molestando al Uzumaki que rápidamente se puso a discutir con él, ya que quería comer la deliciosa comida de la peliazul.
Sasuke no había querido meterse, aquello no era su asunto. De verdad que no había querido interferir, pero de alguna manera le molestaba demasiado ver esa mueca afligida y desanimada en el rostro de la peliazul.
—¡Yo también quiero comer la comida de Hinata-chan! —se quejó logrando sonrojar un poco a la peliazul, pero rápidamente se reprendió, si se seguía emocionando por cada pequeña cosa que decía Naruto nunca podría superar su enamoramiento por él.
—¿Después de lo que has hecho crees que te lo mereces? —dijo extrañando al rubio que no sabía a qué se refería. —Ella no tiene por qué estarte cocinando—dijo el pelinegro enfadado haciendo que el corazón de Hinata se estremeciera, parecía que el Uchiha comprendía como se sentía.
—Solo porque ahora sea tu novia no la puedes acaparar así—dijo molesto. —Dile Hinata-chan—pidió el rubio.
Pero aquella simple frase hizo que toda la paciencia de la ojiperla se rebasara, había estado aguantando y aguantando los comentarios sobre su "relación" con el Uchiha, pero es que ya no podía más, se había confesado a él y parecía como si nunca lo hubiese hecho.
—Creo que Uchiha-san tiene razón—dijo de repente Hinata sorprendiendo a ambos y dejando frío al Uzumaki. —Naruto-kun debería ir a comer en Ichiraku, no hay suficientes víveres para los tres—dijo concisa haciendo que el rubio se sintiera muy incómodo. —Además se está haciendo tarde y creo que Uchiha-san también debe estar cansado—puntualizó dejando a Naruto sin palabras.
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El principio de algo [✔]
Hayran KurguPor una simple conversación Sasuke infunde valor en Hinata, tanto que se atreve a confesarle sus verdaderos sentimientos a Naruto y aunque las cosas no salen como la chica quiere, una nueva misión le ayudará a olvidar sus problemas. Además gracias...