31 de Enero del año 2020
Sonreí mientras observaba como Michael y Juliette corrían por la casa. Me gustaba mucho que Michael tuviera un nuevo amigo, en este caso amiga. Y es que era genial, ya que gracias a ello, el muchacho no solo se lanzaba conmigo.
-Oye Zack.-Oí a Vale hablarle a Zack, quien se estaba levantando con todo su cabello desordenado.-¿Como dormiste?-Dijo esta vez con ternura, cosa que en verdad me agradaba de Vale. Ella era bastante tierna, y mucho mas cuando venía recién despertando.
-Dormi bien.-Le respondió Zack sonriendo.
-¿Seguro?-Le preguntó Vale para poder asegurarse, a lo que el asintió.
-Si Vale, tranquila.-Vale sonrió y se dirigió a la cocina con una gran sonrisa, por lo que ese tema quedó ahí.
-¡Despertó la reina de la casa!-Avisó Sam saliendo de su cuarto completamente arreglada, por lo que dirigi mi mirada inmediatamente hacía ella.
-¡Abajo!-Gritó Michael empujandola y cayendo junto con ella, y seguidamente Juliette cayó sobre ellos.
Aquella escena me causó gracia, y sin poder evitarlo comencé a reír, aunque al parecer no fue al único que le dio risa, pues Vale y Leila también reían conmigo.
**********
Estábamos todos sentados en el patio, mientras Vale nos informaba que su padre no estaría en la ciudad por varios días, cosa que me alegró, y al parecer no solo a mí.
-Entonces ¿Te vas a quedar?-Preguntó Michael con voz chillona, a lo que Vale sonrió.
-Pues sí, siempre y cuando no les moleste.-Dijo con una sonrisa, a lo que Zack la observó, negando con un leve movimiento de cabeza.
-Vale, tu no molestas. Entiende eso ¿Si?-Le dijo Zack molesto, a lo que Vale asintió, aunque se notaba demasiado que se había tensado por unos cortos segundos por el tono de voz con el que habló Zack.
-Pero no te enojes ¿No ves que te salen canas y arrugas?-Dijo con gracia, a lo que Zack soltó una leve carcajada y yo solo sonreí.
-No estoy enojado, estoy tranquilo.-Le dijo con una sonrisa, a lo que Vale lo observó con seriedad.
-Aja, si claro.-Susurró molesta.-Y seguramente yo deje de ser Otaku.-Dijo Vale con tono de ironía, causando que me riera levemente con su comentario, pues sabía que ella nunca dejaría de ser otaku.
-Ok. Si me molestó un poquito, pero tengo mis razones.-Le dijo él con seriedad.-No me gusta que digas eso. A nosotros no nos molestas, y nunca nos molestaras.-Le dijo con calma.-No por nada nos alegramos tanto al ver que entras y pasas tiempo con nosotros.
-¿De verdad?-Preguntó observándonos, por lo que todos asentimos, y por mi parte yo le dediqué una sonrisa. Sabía que eso había servido, porque note en sus ojos y su sonrisa que se había alegrado bastante.-Me hace feliz saber eso.-Dijo alegre.-Bien, ahora no se que haremos.-Dijo cambiando el tema drásticamente, cosa que me sorprendió y terminó por hacerme reír.
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El hombre suicida
RandomSiguiendo con la historia de el hombre de hielo, llega el hombre suicida. Aquí se explicará la historia atraves del punto de vista de Ian Cameron, el muchacho depresivo de la casa. El nos traerá mas datos que no aparecieron en la historia anterior...