perfectly wrong (skam españa; alejandro)

veintiocho : reconciliación

El lunes en la mañana, Isabella llevó a su hermana menor a clases. Aunque todo el camino se lo llevaron en silencio, no iban incómodas.

Bajaron del auto, se dirigieron a las puertas del instituto, y cuando ya estaban allí, comenzaron a charlar.

- Nora, lo siento. Fue una actitud tonta la que tomé contigo y no debí de haber sido tan inmadura.

- No - dijo la chica, pasándose un mechón detrás de la oreja -, tú no tienes culpa de nada. Creo que fue más mi actitud que la tuya.

Isa puso una sonrisa de lado, melancólica, antes de abrazar a su hermana.

- Te quiero. Y que sepas que si necesitas de alguien que te escuche, estoy aquí.

- De hecho... De hecho si.

Se separaron del abrazo, una más confundida que otra.

- Dime.

- Está bien - Nora tomó una bocanada de aire antes de hablar -, es que... El día de mi cumple me he puesto mal... Y he despertado con alguien en mi cama.

Isabella se mordió el labio, insegura.

Ella había hecho lo mismo.

- Disculpame tía, fue Alejandro. No tengo ni idea de que pasó esa noche, pero Alejandro me dijo que no pasó nada. Y confío en él. ¿Tú confías en él, no? Es tu novio.

Isabella asintió, y cuando Nora abrió la boca para seguir relatando, ella la detuvo.

- No, espera, yo también tengo que decirte algo - Nora asintió -. Es que... El día de tu fiesta yo tuve un tipo de... No lo sé, no recuerdo mucho de ese día, fue como un ataque de pánico... Pero mi mente borro todos los detalles.

- ¿Qué? - preguntó Nora, tomando a su hermana del brazo - Debes de ir al doc. Eso ya no es normal. No creo que sea solo tu ansiedad, Isa.

Isabella se separó del agarre de su hermana, cerrando sus ojos y negando con la cabeza. Trago saliva nerviosa.

- Solo se - la respiración le tembló al hablar -, que termine en casa de Miquel. Y entonces... Entonces desperté en su cama.

Un leve silencio las invadió. Nora se quedó perpleja, pero no dijo nada.

- Nora, lo siento. No sé ni que pasó ese día ni cómo, ni cuándo; me puse borracha, no tenías mi medicinas, fue... Fue un desastre.

Nora asintió. Dio unos pasos adelante y abrazo a su hermana.

- No te preocupes. Lo descubriremos.

Y así, ambas se reconciliaron por fin, aunque no se dijeron toda la verdad...

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