× d i e c i s e i s ×

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Al llegar a la estación, Frank llamó al teniente Anderson, una sonrisa en su rostro y no quería contar más de su plan. Cuando el teniente Anderson entró, Frank se puso frente a la pizarra, manos detrás de su espalda y tono de orgullo en su voz.

-Gracias por venir, Teniente Anderson.

-Estoy interesado en lo que tiene que decir, Iero.

-Bueno, teníamos un sospechoso, Kurt Hernández, como usted sabe, pero lo hemos descartado por falta de evidencia –el hombre se acercó a la mesa—. Pero al hablar con una persona que trabajó con Hernández descubrimos que había otra persona trabajando al mismo tiempo que él, su nombre es Mathew Wilbur.

El perfilador regresó a la pizarra, tomando un marcador y escribió el nombre del antiguo interno debajo del de Kurt, dibujando una línea debajo de Wilbur.

-Su apodo era "Will", no hay una foto de él en el sistema de Housing Rights, pero sí su puesto: Interno de ventas. Un día dejó de ir al trabajo y nunca regresó.

- ¿Y cómo él entra a la investigación?

-Su ida concuerda con la fecha en la que los asesinatos empezaron contra clientes de Housing Rights.

- ¿Cómo sabría qué víctimas buscar en ese caso?

-Bueno, esto es una suposición, pero, Housing Rights no tiene el mejor sistema de seguridad para sus listas de clientes y empleados, están guardados en un sistema que lleva todo a una nube, he visto este sistema en casos del FBI, es uno de los más inseguros y fáciles de hackear.

- ¿Crees que Wilbur hackeó el sistema y así encuentra a sus víctimas? –Brendon preguntó.

-Exacto –Frank apuntó al detective con el marcador—. Quiero probar esta teoría, hacer una misión encubierto.

Al escuchar esa oración el teniente mejoró su postura en la silla, nunca se había hecho una misión encubierto en la estación.

- ¿Cómo haríamos esta misión?

-Tengo un contacto que trabaja para la policía de Texas, tiene experiencia con misiones encubierto, así podemos crear una historia creíble para que entre a Housing Rights y entre al sistema como un lciente, de ahí, solo esperar.

El teniente Anderson asintió, parecía estar imaginando la misión en su cabeza, una pequeña sonrisa se formó en sus labios.

-Me encanta la idea, ¿Cuándo puedes contactar a esta persona?

-Esta noche puedo discutir los planes, ¿Le parece una buena idea?

-Perfecta, esperemos esto ayude siquiera a mover el caso un poco –el teniente se levantó, juntando sus manos y mirando a los tres hombres—. Están haciendo un muy buen trabajo, caballeros, los felicito.

-Gracias, teniente.

El teniente Anderson salió de la sala, dejando a los otros tres hombres solos.

- ¿Vamos a conocer algo más sobre tu contacto? –Brendon preguntó, viendo a Frank regresar a su silla.

-Eso voy a dejar que lo haga él, por ahora, ¿Vemos qué onda con el cuerpo que encontraron?

Fueron a la morgue, entre más y más se acercaban a la puerta al final de ese frío pasillo, se podía escuchar con más claridad una canción de los Backstreet Boys, el coro de voces haciendo que los hombres se preguntes qué estaba sucediendo ahí dentro. Brendon abrió la puerta y se encontraron a Jenna bailando entre las mesas de operación, la pantalla de su laptop con un círculo de carga.

-Backstreet back alright –Josh dijo lo suficientemente fuerte como para que la rubia parara y observara a quien estuviera en la puerta, su boca cubierta con un barbijo, pero sus ojos estaban abiertos en terror, como un ciervo atrapado en la carretera, frente a un auto que afortunadamente no lo atropelló.

hung like the pelt of some prey ∆ joshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora