Warriors {daryl dixon}

diez

Alexa

El cielo estaba gris y las gotas de agua amenazaban con salir. El aire frío estaba presente como siempre.
Todos estábamos afuera en el funeral de T-Dog. Glenn estuvo cavando toda la mañana para poder enterrar su cuerpo y darle una última despedida.
Pudieron encontrar el cuerpo que estaba casi todo devorado y los restos estaban envueltos en una sábana blanca que estaba manchada de sangre.

— Que Dios te quiera tanto en el cielo como nosotros aquí en la tierra.— dice Hershel cerrando su discurso religioso.

Quedamos en silencio y nos miramos entre todos. Nadie sabía quien iba a hablar.

— Ojalá estés en un lugar mejor. Gracias por todo lo que has hecho por nosotros desde que comenzó todo.— dice Carol un poco llorosa.

Era una gran pérdida para el grupo. Se veía que lo querían mucho.

— No se si estarás en el cielo o dónde, pero espero que estés descansando bien querido amigo. Gracias por absolutamente todo.— dice Rick mirando la tumba de su compañero.

Luego de eso todos callamos y nadie dijo más nada.

Daryl comenzó a tapar la tumba con la tierra que estaba al lado. El grupo se fue yendo de a poco dentro. El funeral había acabado.

Me quede afuera mirando el cielo, pero sobretodo pensando. Nunca se me dieron bien los funerales ni mucho menos decirle las últimas palabras a alguien. Prefiero no decir nada.

Las gotas de agua empezaron a caer dando ya por comenzado la lluvia.

— Vas a enfermarte.— dijo Daryl sacándome de mis pensamientos.

— Tu también.— dije jugando con mis zapatos en el barro.

— Es lo último que puedo hacer por el.— decía mientras tapaba la tumba.

No dije nada más y me acerqué donde estaba la cruz improvisada que habían hecho. La tome y la miré. Decía "T-Dog". Definitivamente este era un golpe bajo para el grupo.

La lluvia cada vez era más y más fuerte. Me había olvidado de ese pequeño detalle.
Mire que Daryl estaba a mitad de terminar el favor a su amigo.
Agarre la pala que estaba al lado y me puse a ayudarlo.

—¿Que haces?.— preguntó un poco extrañado.

— Devolviéndole el favor a T-Dog y al que me salvo la vida dos veces.— dije mirándolo obvia.

El río y habló.

—Fueron tres.— aclaró.

— Llevarme hasta con Hershel no cuenta.— dije riendo.

— En realidad si.— agrega.

Luego de no mucho más terminamos. Clave la cruz en el barro y me paré. Daryl puso una flor blanca junto a la cruz.

—Buen viaje hermano.— habló parándose.

La lluvia seguía sin cesar, ambos estábamos completamente empapados y muertos de frío.

Mire a Daryl que seguía mirando la tumba. Lo abracé tratando de alivianar su dolor y porque tenía frío.
Sentí su sorpresa ante mi acto pero luego sentí su mano en mi espalda acariciando suavemente. Su otra mano estaba en mi cabeza.
Enserio no pensé que iba a corresponderme el abrazo, verán Daryl es un tipo frío, al igual que yo. No se porque lo abracé ni se tampoco como me correspondió el abrazo.

Nos separamos y nos miramos.

—Lo siento. No se me dan los funerales.— dije mirando sus ojos.

— A mi tampoco.— dice mirándome.

Las gotas de agua resbalaban por su cara y su aliento caliente largaba vapor. Estamos tan cerca que puedo sentirlo.

— Deberíamos entrar antes de que nos agarre un resfrío.— dijo apartándose.

Cerré los ojos ante ese acto y asentí.

Ambos caminamos hasta dentro. Estaba un poco confundida verán. No se que me estaba pasando últimamente con él, pero nos llevábamos bien y nos estábamos conociendo bastante. Le he tomado hasta cariño me atrevo a decir. Y sobre todo confianza.

Al entrar a la cárcel todos estaban en sus actividades normales o eso parecía. Carol cocinaba algo a diferencia de los otros.
Caminé hasta mi celda sin decir nada y al entrar estaba Alaska comiendo un hueso del venado que había cazado Daryl a la mañana.

Agarre ropa para irme a bañar ya que estaba titiritando del frío que tenía.

(...)

Luego de qué pasó eso con Daryl ninguno de los dos volvió a hablar con el otro, hasta siento que el me ha estado evitando. Si, fue un poco incómodo pero es muy infantil de su parte hacer eso.

Estaba en mi celda leyendo el diario de Ana Frank a la luz de la vela. Alaska estaba durmiendo a mis pies que por cierto no cabía en el colchón y estaba mitad cuerpo arriba, mitad abajo.

Siento un golpecito en mi celda y levanto mi vista al encontrarme a Beth. Me decepcione un poco, pensé qué tal vez era Daryl.

—¡Hey!.— dije casi en un susurro.

Ella sonrió y habló.

—¿Puedo pasar?.— pregunta tímida.

—Claro que si.— dije mientras me sentaba en la cama y le hacía un lugar.

Ella pasó y se puso al lado mío. Miro a Alaska y sonrió al verla así.

— Esta muy cómoda.— dijo acariciandola.

— Demasiado para mi gusto.— bromeé.

— Siento haber venido a esta hora. Pero necesito decirte esto.— dijo ella un poco nerviosa.

—Dime.— dije poniéndole atención.

— Rick planea echar a Michonne, no la quiere aquí. No la ve una persona confiable.— dijo ella.

Fruncí el ceño ya que no habíamos decidido eso. Rick puede ser el líder pero las decisiones las tomamos todos.

— No puede hacer eso.— dije un poco indignada.

— Lo hará y la verdad he estado con ella estos días curando su herida y me ha contado un par de cosas.— dice mirándome.— Ella ha estado sobreviviendo sola desde que comenzó todo y se encontró a una mujer llamada Andrea en el bosque, no muy lejos de una granja. Nosotros estuvimos en esa granja, era de mi padre. Estuvimos sobreviviendo desde que comenzó todo ahí tranquilos. Un día un hombre nuestro disparo a Carl sin querer y conocimos a Rick; a su grupo.— dice Beth poniéndome en contexto.

— Entiendo.— dije mientras entendía a lo que iba Beth.

— En el grupo de Rick estaba Andrea. Una mujer un poco difícil de tratar. Cuando todo se puso feo huimos y pensamos que Andrea no había sobrevivido. En realidad no sabemos si es ella en verdad. Bueno ahí Michonne le salvo la vida y un tiempo después fueron a un pueblo. Woodbury, ese lugar está liderado por un lunático que ha manipulado a Andrea y la puso en contra de ella. Entre una cosa y la otra el tipo tenía a su hija convertida encerrada, encadenada y Michonne le dio un descanso merecido. Ahora el quiere matarla y la está buscando, manda a gente a por ella y uno de sus hombres le ha disparado.— dice Beth explicándome la historia.

—No podemos dejarla a su suerte.— dije yo.

—Claro que no. Por eso tienes que hablar con Rick.— dijo Beth casi suplicando.

— Tranquila, mañana lo haré. No dejare que la corra de manera tan cruel.— dije poniéndome en lugar de ella.

—Gracias Alexa.— dijo mientras me abrazaba.

— De nada Beth.— dije mientras le correspondía el abrazo.

Hola chicas, perdón la demora es que el 7 de Mayo fue mi cumple y estuve a full con todo. Espero que les guste ❤️