Trough The Time °°Yoonjin°°

12

Yoongi despertó sobre las diez y media de la mañana, aunque no por propia elección.

      —Buenos días... —Jungkook tenía una sonrisa socarrona en su cara y una ceja arqueada mientras observaba a un dormido Yoongi estirarse en el sillón pequeño que tenia en el salón, que realmente era algo así como una silla acolchada. —¿Interrumpimos? —Dijo aún con su mirada pícara, mirando hacia el sofá donde Seokjin seguía durmiendo, encogido bajo las sábanas y con el brazo izquierdo impidiendo ver en totalidad su rostro para tener la mano bajo la mejilla que permanecía sobre la almohada.

      Jungkook llevaba una bolsa de papel, Yoongi suponía que con comida, y se giró hacia su espalda para ver entrar a Hoseok.

      —Te lo dije. —Jungkook espetó, a lo que Hoseok se paró junto a él para observar la escena mientras Yoongi intentaba volver a la vida sin dejar de fruncir el ceño hacia ellos.

      Jungkook extendió su mano libre hacia Hoseok intentando esconder una sonrisa, pero sus incisivos seguían asomándose por detrás de sus labios como consecuencia de su curvatura.

      —No es suficiente prueba para mí. —Se excusó Hoseok levantando las manos y alejándose hacia la cocina. —Buenos días, Hyung. —Añadió cuando pasó más cerca de Yoongi.

      —¿Qué mierda hacen aquí a esta hora?— Preguntó Yoongi molesto, levantándose de la incómoda posición mientras estregaba su ojo con molestia. Su voz estaba algo más grave de lo normal y ligeramente ronca, y había sentido todos sus huesos implorar a Dios cuando por fin se irguió.

      —No es tan temprano.— Dijo Jungkook, acercándose a la encimera y dejando la bolsa, donde Hoseok había comenzado a sacar un par de cuencos. —¿Dormiste tarde, Hyung? —Jungkook se volvió hacia él, con esa mirada de nuevo en sus ojos.

      —Volvimos tarde.

      —¿"Volvimos"?— Insistió Jungkook.

       —¿De dónde?— Preguntó Hoseok, ignorando al menor.

      —Es una larga historia, ¿para qué es todo eso? —Yoongi señaló la comida que empezaron a servir en la cerámica.

      —Dijiste que no lo olvidarías. —Hoseok gruñó, para luego soltar una gran sonrisa.— Pero admito que esperaba que lo harías, te conozco bien.

      Yoongi movió los ojos confundido, sin saber lo que se suponía que tenía que recordar.

      —Tienes una entrevista hoy a la una, así que tienes que comer antes.

      Yoongi se paralizó un momento, hasta que sintió su cerebro reaccionar, y se llevó las manos a la cara.

      —La entrevista de trabajo. —Recordó presionando sobre el puente de su nariz.

      —Ya se acuerda.—Rio Jungkook, tendiendo el cuenco hacia Yoongi.

      —No puede quedarse aquí solo. — Murmuró Yoongi girándose hacia Seokjin, pero aún suficientemente alto para que sus amigos lo escucharan. —Por una vez que duerme... —Añadió mirando el pecho de Seokjin subir y bajar, aunque aún estaba de lado en el sofá con la mejilla abultada en su mano.

      —¿Una vez? —Preguntó Jungkook.

      —Ha estado durmiendo como la mierda.

      —Bueno, ¿le culpas? ¿Dormirías tú si aparecieras seiscientos años en el futuro, sabiendo que toda la gente que conoces está muerta?— Hoseok rió, casi divertido por lo ridícula que sonaba la situación.