Hay veces en las que no se nos hace tan difícil sonreír. ¿Por qué? Porque esa persona con sólo decirnos 'hola' ya nos puede alegrar el resto de nuestro día. ¿Sabéis por qué? porque aunque esa persona no lo sepa, aunque esté a kilómetros de distancia es la única capaz de hacernos sonreír de verdad, sabe qué hacer exactamente para sacarnos una sonrisa aunque sólo sea durante unos minutos. Lo mejor o lo peor es que esa persona no sabe lo importante que es para ti aunque se lo recuerdes mil veces, tampoco sabe que al igual que puede hacerte sonreír y ser la chica más feliz del mundo también te puede hacer llorar y ser la chica más desgraciada del mundo. Muchos de nosotros no nos damos cuenta pero no nos fijamos en las grandes e importantes cosas de la vida sino en las pequeñas, con esto quiero decir que la mayoría de las veces nos rayamos por estupideces sin sentido que lo único que hacen es jodernos poco a poco y luego de las cosas que nos tenemos que fijar nos nos damos cuenta y ni siquiera se nos pasan por la cabeza y quizás esas sean las cosas que realmente valgan la pena y nos hagan seguir adelante más tarde o temprano cuando abramos los ojos y nos demos cuenta de la realidad y de todo el tiempo que hemos estado perdiendo en estupideces. Mientras tanto yo y la mayoría de las personas seguramente sigamos perdiendo el tiempo con cosas que no merecen la pena en vez de intentar ser felices y hacer feliz a alguien por ahí. Un consejo: Sonríe, seguro que hay alguien por ahí al cual le enamora tu sonrisa y le encanta verte sonreír a pesar de todo. Piensa que a alguien le puedes alegrar el día con una simple sonrisa. Piénsalo, de verdad, y recuerda: Sonríe, siempre.
