Maratón 1/2
—¿Dónde habré puesto las llaves? —pregunta mi madre. Se va ya a trabajar y va a llegar tarde.
Dejo de acariciar a Miau Sin Sentido, me levanto del sofá y las busco con ella.
—Mamá...
—Laura, vamos ayúdame que llego tarde.
—Las llevas en la mano. —la miro con cara rara. Ella suspira y se golpea la frente.
—Oh, vaya.
—¿Estás bien?
—Sólo llevo mucho estrés acumulado, será por eso... —se despide de mí con un beso y se va.
Me giro para ir al sofá cuando me encuentro con Lysander sentando en él y con mi gato sobre él. Traidor.
—¿Qué haces aquí? —pregunto con el corazón acelerado— Creía que eras un ladrón. Casi te golpeo con un cojín.
—Te dejaste la ventana abierta y entré por las escaleras, Cereza irresponsable.
—Se llama ventilar la habitación, quizás te suena de algo. Oye, aún no es la hora de tutoría, faltan varias...
—Dos horas, ya lo sé —me mira con cansancio—. No vengo por las tutorías.
Me siento a su lado dejando un poco de espacio entre nosotros y lo miro interrogante para que continúe. Ahora la intriga me está matando.
—Hoy tengo práctica de fútbol, es un partido importante contra un pueblo de cerca.
—Oh, está bien. No te preocupes, hoy no damos tutoría si no puedes.
Ahora que lo pienso, Ángel también me mencionó algo de ese partido anoche. Estaba bastante emocionado.
—He pensado que... —lo miro— podrías venir a verme. Si puedes, claro.
Lo miro, emocionada, aclaro mi garganta y trato de ponerme un poco más sería. Eso es, Laura, hazte la dura.
—Claro, es decir, estoy libre.
—Bien, pues —se levanta y deja un casto beso en mi frente—, nos vemos allí, Cereza.
Esta vez, se va por la puerta y no por la ventana. Genial, está aprendiendo a comportarse como un ser humano decente.
Suelto un grito de emoción cuando ya no me ve, pero paro porque mi gato me está mirando raro. Maulla y se esconde en la cocina. Creo que piensa que no soy normal. Eso o va a robar algo de comida de la basura.
Marco el número de Ela para contárselo todo y ella me cuenta que está interesada en un chico.
—¿Es Finn?
—¿Finn Stacy? Por favor, Laura, se come los mocos.
Hago una mueca de disgusto.
—¿Taylor? ¿Chris? —ella niega con la cabeza— ¡Ah, ya sé, es Karl!
—Negativo.
Suspiro con frustración. Esto va a ser muy complicado si ella no me echa una mano.
—¡Ya, dímelo!
—Ahora mismo no, pero te lo diré. Yo también voy a ir al partido.
La miro confusa, que yo sepa ella nunca ha ido a ningún partido porque dice que es aburrido ver a veintidós tíos dándole patadas a un balón. Cabe aclarar que yo no concuerdo con ella.
Y menos si Lysander es ese tío que da las patadas al balón.
—A Mark le apetece que vaya así que iré. —se explica pero suena a excusa. A Mark le da igual si Ela va o no, la pelirroja se trama algo, yo lo sé. La conozco demasiado.
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¡Qué empiece la guerra! ©
Teen FictionUna guerra de bromas donde quien se enamora, pierde. • ₊°✧︡ ˗ ˏ ˋ ♡ ˎˊ ˗ Laura Torres siempre ha sido una chica prudente, educada y amable; sin embargo, todas sus buenas virtudes desaparecen cuando Lysander Ambrose, su amor platónic...