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Si bien había faltado no era por gustó, bueno por una parte sí, pero la realidad es que quería resolver sus dudas respecto a su personalidad.

Cuando Emma dijo que esperaba a que cambiará y no cambio como ella creía, eso le dejó pensando un poco, pues cuando vio a Don, recuerdos de su terrible nacimiento odio hacía los omegas le llegaron, pero existía una Omega a la cual no odiaba y esa era a la esposa del moreno.

Y su primer amor

Gilda de Sid, actual esposa de Don Sid. Norman poseia un pasado con aquella joven, en resumen, estos se había conocido a la edad de ocho años, conviviendo y convirtiendose en amigo es poco tiempo. La principal razón de que se conocieran eran los típicos acuerdos entre Alphas y Omegas (Norman estaba destinado a ser Alpha y Gilda ya había presentado signos de ser Omega siendo muy joven sin necesidad de tener su primer celo), estaban destinados política y económicamente a casarse, pero los sentimientos de alguna forma afloraron en el corazón de ambas personitas, y de forma inocente iniciaron una relación formal a los once años, relación que parecía ser tan fuerte que duró cuatro años. En ese lapso de tiempo Norman era un dulce andante, pues era demasiado cariñoso con ella, los regalos de cumpleaños y aniversarios eran carísimos pero con muchísimo amor, salían de viaje en vacaciones, iban a fiestas juntos e incluso hacían cualquier tontería típicas de un preadolescente, se contaban lo de su día, como se encontraban emocionalmente, sus pensamientos más tristes y sus mayores sueños. Uno era el soporte del otro.

De un momento a otro él comenzó a notar extraña a su prometida, pues está había veces en las que faltaba a sus citas o ponía pretextos con la escuela y entre otras cosas. Y él para no crearse una película trataba de una forma entender que nada malo estaba pasando.

Las cosas siguieron así por un dos meses enteros, y ya se estaba cansando, así que decidió seguirla un día, encontrandose con la desafortunada escena de que su prometida, con quién literalmente se veía una vida completa, estaba siendo infiel con el heredero de la familia Sid.

Y dirán que es tonto, pues aún eran inmaduros, y es cierto, pero nadie puede sentir el amor de la misma forma, algunos aman con tanta intensidad que se vuelven dependientes de otra. Sin importar la edad.

Desde ese día no le volvió a dirigir la palabra y mando a qué se cancelara el compromiso, no quiso recibir explicación alguna y simplemente su cabeza comenzó a llenarle de ideas de que ella era un cualquiera, que solo estaba con el por conveniencia (ya que ella era de clases medias y eso a Norman nunca le había importado) y que solo buscaba su dinero, y claro que eso trae un mal recuerdo, al grado de que incluso la tacho de ofrecida.

Pero también en su pasado habitaba una espina, y esa era el abandono de su legítima madre y de Oliver, pues estos cuando nacieron a los dos años fueron adoptados por la pareja Ratri, siendo alejados de aquella mujer Omega que solo vivía por placer sexual e ignoraba cada que podía la existencia de ambos niños. Sumado a la forma en la que se sentía jugado y abandonado tal cual trapo viejo, eso originó una especie de idea de que todos los omegas eran iguales, ofrecidos y que solo te arrebatan todo, Incluído el amor.

Las cosas empeoraron cuando se enteró de que Gilda y Don ahora estaban comprometidos y pronto a casarse, preguntándose si de verdad lo poco que vivieron había significado algo, o si mínimo le llegó a querer.

Evidentemente cambio, se encapricho en tener descendencia pura y tomar como objetos que se hacen y deshacen a los omegas, algo que a Emma le decepcionó, pues ella es de igual forma es mejor amiga del albino y estuvo con él durante el proceso, más no comento nada ya que sus esfuerzos habían sido en vano.

Insolente pero no tuyoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora