¿Me aceptas?

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—¡Wooh! Tranquilo pequeño, no te voy hacer nada— Alegaba el hombre de falsa sonrisa, manteniendo una distancia prudente sabiendo que al tener a cuatro alphas en alerta era mera señal de peligro, mucho más cuando dos tienen pareja.

—Tu aroma es asqueroso Peter, detenlo.—Ordeno Oliver asqueado. 

—Pero que terrible ofensa, yo solo anuncie mi llegada—Tras terminar la frase, poco a poco la cantidad de feromonas liberada fue disminuyendo hasta que el olor desapareció, sin embargo, esto no borro el hecho de que Ray y Sherry se mantuvieran aferrados a Norman.

—Sabes que no eres bienvenido en esta casa.—Dijo el adulto, dejando a su esposa en brazos de Oliver para que esté y Paula la ayudarán a recuperar el aliento.

—No vine por ustedes, solo quería comprobar si era cierto de que el pequeño Norman había conseguido pareja, pero mi sorpresa más grande fue el ver qué está atado con mi gatita, o mejor dicho, casi atado.

Ray al escuchar tal apodo solo hizo que su llanto intensificar junto con su agarré, soltaba unos pequeños quejidos que en realidad era a su Omega pidiendo ser sacado de ahí, alejado de ese hombre y está refugiado en algún lugar con su Alpha cuidándolo, Sherry no estaba muy diferente al Omega, pues la pequeña contenía sus sollozos y negaba repetidas veces por no ser soltada. Norman al notar la reacción de ambos solo hizo que su molestias aumentara, preguntándose ¿Qué cosas les habrá hecho Peter como para que tuvieran esa clase de reacción? Y sea cual fuese el motivo, no iba a permitir que volvieran a pasar por el infierno mental que tenían en ese momento.

Peter examinó a todos los invitados más detenidamente, notando que al fondo se encontraba la albina de piel morena, quien parecía estar a nada de caer al suelo, regalándole una sonrisa con malicia cargada y sobrante de veneno, toxicidad que hizo a la albina comenzar a llorar. Peter se sentía imparable con eso, una gran satisfacción al ver a esa Alpha perder los sentidos con una sola mirada.

Largate— El Omega entre los brazos del Alpha se exaltó un poco, los demás lo miraron atónitos, a excepción del Alpha que se mantenía en la puerta mirando la escena pero sin su anterior sonrisa. Usar su voz de Alpha no era algo que hiciera muy comúnmente ya que no se veía a la necesidad de usarla, pero ahora está demasiado molesto.—¿No escuchaste? Vete de aquí.

Peter por su parte, miraba al Omega como abrazaba a Norman y se acurrucaba en él, lo que le hizo tener un gran asco.

En la madrugada de un otoño, un pequeño gato aullaba por ayuda. Que lástima que hayas tenido que recoger a una sucia y asquerosa gata, Norman.—Sin decir más dio media vuelta y salió de la casa, dejando a todos soltar un gran suspiro de alivio.

Sherry se separó aún hecha un mar de lágrimas y fue con Ayshe, ahora buscando consuelo con ella, mientras que Norman aprovecho su brazo libre para abrazar al azabache, enredando sus dedos ente las hebras oscuras y dejar a su aroma rodearlo para calmarlo y que esté dejera de llorar.

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Después de ello Norman llevo a Ray a su habitación, Ayshe pidió que Sherry durmiera en el cuarto de Norman y así fue. Ahora el Omega se mantenía con las manos cubriendo su rostro, recostado a un lado de la pequeña beta que dormía plácidamente.

Después de que se había calmado, Norman le platico a Ray respecto a Sherry y Ayshe y los motivos por los cuales Sherry se mantenía tan apegada a él.

Por lo que había comprendidos, Peter era el tío de Norman, cosq que le dislocó los cables cuando se enteró de eso. Resulta que esté hombre es un Delta, una clase de Alpha que se les consideraba rotos al tener un aroma sumamente asqueroso para los omegas, y al ser de está clase de Alphas muy raramente vistos, no podrían jamás tener pareja, sin embargo eso no se le vio afectado a Peter, pues al contrario tomaba esa imagen rota como un beneficio, ya que así mantenía a todo mundo a su pies. Con su penetrante y asqueroso aroma.

Insolente pero no tuyoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora