Sustos que dan gusto ( 12 )

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Tranquila, no entres en pánico...no entres en pánico...piensa con frialdad.

Sentí una cálida respiración cerca de mi oreja_Oye, cálmate.

En cuanto escuché esa voz relajé mis hombros y bajé la guardia.

Lo voy a matar, definitivamente lo voy a matar.

Cuando al fin se decidió a soltarme giré sobre mis talones para fulminar con la vista al albino que estaba detrás de mí observándome con esos ojos ámbar.

_¡Garou! ¡Estúpido mocoso!_agarré mi almohada y le di algún que otro golpe con ella_¿¡Cómo se te ocurre jugar así con mis sentimientos?!  ¡Sabes que casi me matas de un infarto! Además ¿por dónde rayos entraste?

Señaló la ventana con una sonrisa en el rostro. Respiré profundo para calmarme.

_Solo, no vuelvas a hacer eso...por favor.

_¿Por qué tan alterada? Cuando niño te hacía lo mismo y no reaccionabas de esa manera.

_Sí, porque cuando niña no habían intentado violarme como hace cuestión de una semana_respondí sin pensar, arrepintiéndome al momento de mis imprudentes palabras.

_¿Cómo que intentaron violarte? ¿¡Quién fue el desgraciado?! ¡Me aseguraré de que no vuelva a tocar a una mujer en su vida!

_Tranquilo mocoso, al final no pasó nada.

_No me pides que me tranquilice Rea, porque sabes que no lo haré.

_Como sea_me dediqué a observarlo con detenimiento, tenía una herida en la mano, un corte en la mejilla, su enguatada rota y una herida en la pierna_Lo importante ahora es curarte esas heridas y además aprovecha que no hay nadie para darte un baño_sugerí sacando una toalla de reserva que tenía en el closet.

Este solo se me quedó mirando con seriedad.

Solté un suspiro_Vale tú ganas, te contaré lo que sucedió pero solo si me obedeces, además por si no te has fijado ando en toalla y no sé...me gustaría ponerme ropa...así que sal de la habitación y vete a dar una ducha_le ordené empujándolo juguetonamente por el pecho para que saliera.

_Hm...

_Hmmm...¿qué?_cuestioné cuando estaba atravesando el marco de la puerta.

No dijo nada simplemente me abrazó de forma protectora_Hoy estás cariñoso_bromeé correspondiendo a su abrazo.

_Hacía tiempo que no te abrazaba de esta forma enana_respondió separándose para besar mi frente con cariño.

_Pervertido, nunca me abrazaste estando solo cubierta por una toalla, te recuerdo que soy menor de edad y te puedo demandar por pedofilia.

_Tonta_recibí un leve golpecito en la frente antes de que ese se dirigiera al baño.

_Y recuerda dejar la ropa afuera para lavarla.

_Sí, sí, enana quisquillosa.

_Mocoso al fin.

Luego de vestirme con mi camisón de dormir, enseguida lavé su ropa y la coloqué en la secadora para que hiciera su trabajo. Minutos después se la llevé a mi amigo, quien ya había terminado de ducharse y se encontraba en mi cuarto casi desnudo de no ser por la toalla que tiene atada a su cadera.

_Aquí tienes_le entregué su ropa, que por cierto había tardado en remendar_Saldré del cuarto para que te vistas.

_¿Segura que no te quieres quedar?_preguntó con cierta picardía.

Mi problemático delincuente |Metal Bat| [ FINALIZADA ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora