Ella es

Nuevo Hobby y llamada

Empecé a caminar por Forks, explorando. Habían pasado unas horas desde que me fui del instituto enojada con mi hermana.

Rafael: ¡Swan!

Gire mi cabeza y Rafael y Tamara estaban en una esquina fumando junto a sus motos, sonreí y me acerco a ellos antes de chocar las manos en señal de saludo.

Tamara: Dime, ¿Te gusta pelear?

Anabella: ¿A que te refieres?

Rafael: Combates por diversión y además te pagan si vences a varios oponentes seguidos

Anabella: Se defenderme, podría intentarlo

Rafael: Perfecto, síguenos

Me subo en la moto de Rafael y enredo mis brazos en su estómago tonificado para no caerme, podía sentir la mirada de Tamara en mi agarre, gire mi cabeza y ella me miraba con una sonrisa pícara por alguna razón y me guiña un ojo antes de arrancar la moto e irse seguida de la moto de Rafa.

Por alguna razón me pareció escuchar unos gruñidos, pero debió de haber sido mi imaginación.

Luego de un rato, nos dirigimos hacia un edificio abandonado casi a las afueras de Forks, se podía ver a varias personas reunidas y se notaban que eran veteranos por las heridas y lo fuertes que eran.

Hombre: ¡Rafael, Tamara! Que sorpresa verlos tan temprano ¿Quién es la jovencita?

El hombre me dirige una sonrisa obscena, mirándome de arriba hacia abajo, ocasionando que casi vomite ante su mirada asquerosa, pero disimule con una leve sonrisa.

Rafael: Le gustaría pelear

Hombre: ¿En serio? Bueno, pero no nos hacemos responsables si algo le pasa

Tamara: No te preocupes, ella lo sabe

El hombre hace un gesto para que lo sigamos, entramos en una especie de jaula donde en el piso había sangre seca, mire mi alrededor algo intimidada, pero me tenía confianza.

Rafael: Suerte Swan

Tamara: Te estaremos apoyando

Ellos salen de la jaula y se ponen detrás de mi observando atentamente, en eso veo a un joven fornido entrar a la jaula.

Al verme empieza a reírse a carcajadas, haciendo que me enoje ante su comportamiento arrogante.

Me saco mi campera y al igual que mi mochila y la pongo en un lado de la jaula para que no estorbe, me remango mi camisa lista para patearle el trasero.

Hombre: ¡Comiencen!

Rival: Como eres nueva y una señorita, dejare que des el primer golpe

El chico se acerca hacia mi y gira su cabeza para que lo golpee en la mejilla, me rió entre dientes antes de golpearlo con gran fuerza haciendo que su cabeza gire más de lo debido y con un ruido de un hueso rompiéndose, el hombre emite un sonido de dolor antes de caer noqueado al suelo.

Rafael: ¡Eso es Anabella!

Tamara: ¡Eres genial!

Después de eso me la pase en varios combates hasta el atardecer y para mi sorpresa gane todos. Había ganado 70 dólares por mis victorias. Lo único que me estuvo molestando es que sentía una mirada intensa sobre mi todo el tiempo, pero como estaba rodeada de extraños no le di mucha importancia.

Al terminar las peleas regrese a casa en la moto de Rafael mientras Tamara nos seguía. Cuando llegamos, el auto patrulla de mi padre no estaba lo cual era lo mejor, solo estaba la camioneta de mi gemela.

Rafael: Eres genial Ana

Tamara: Esperamos seguir contando contigo

Les sonrío antes de chocar sus manos en señal de despedida.

Cuando entro a la casa, escucho a Bella hablando por teléfono desde nuestro cuarto. Suspire antes de tomar algo de agua y dirigirme a mi cuarto ignorando completamente a mi gemelo que me miraba seria.

Dejo las cosas en mi cama mientras agarraba lo necesario para tomarme una ducha relajante después de las peleas de hoy.

Bella: Si mamá, todo esta bien

Mi hermana seguía hablando con nuestra madre, rápidamente me dirijo al baño para darme una ducha. Mi mano estaba algo hinchada después de la cantidad de golpes que había dado y un par de moretones en mi cuerpo, nada grave.

Cuando termine de ducharme, Bella seguía hablando con nuestra madre, me acuesto en mi cama mientras agarro una revista para entretenerme

Bella: Si, Phil, está bien

Me tenso al escuchar su nombre, mi respiración empezó a fallar un poco, pero logro disimular.

Bella: Si ya te la paso, Phil quiere hablar contigo Ana

Tardo un poco en reaccionar, pero asiento sin decir nada y tomo el teléfono para ponerlo en mi oído

Anabella: Hola

Phil: Hola preciosa ¿Cómo estás?

Seguramente debía estar mi madre cerca para que me hablase de esa manera, suspire antes de contestar normalmente, intentando que mi voz no falle.

Anabella: Bien ¿Y tú?

Phil: Muy bien, ¿Cómo va el instituto? ¿El primer día?

Anabella: Bien, hice nuevos ami---

Phil: Me importa tan poco, basura

Me estremecí ante su cambio de actitud, pero disimulé frente a mi gemelo que estaba mirándome con una leve sonrisa.

Phil: Disfruta la libertad que tienes ahora, cuando regreses, recuperaremos el tiempo perdido pequeña idiota, ahora despídete para que pueda cortar la llamada de una maldita vez

Anabella: Esta bien, adiós Phil

Con eso corto rápidamente la llamada y le entrego su teléfono a mi hermana

Bella: ¿Estas bien?

Anabella: ¿Qué? Deja de controlarme

Bella: Ana, sabes que no busco controlarte solo quiero que estés segura

Pongo los ojos en blanco antes de acostarme en mi cama, dándole la espalda.

Ella no sabe una mierda, sé que no debería enojarme con mi gemela, pero hay veces en que es muy irritante.