Escuela de Supervivencia

Una Rosa

- Vomar, necesito que me digas que hacer, quedan 4 horas para que maten a Khito - decía Sara hablando por teléfono.

- pasame a Kodaka.

Con una mirada de extrañeza Sara hace lo que le dicen, Kodaka con las cejas fruncidas recibe el celular.

- ¿qué pasa?

- okey chico, llegó tu momento, tienes que ir a la cabeza - Vomar.

- ¿estás seguro de que la armadura me protegerá?

- tienes que activarla, los tesoros se activan.

- ¿y cómo hago eso? - preguntó Kodaka, empezaba a desesperarse.

- tienes que descubrirlo, no puedes morir ¿lo sabes?

- oh, maldición.

- nosotros ya estamos de camino, sólo necesito que te mantengas firme, debes evitar que maten a tu amigo, supongo que eso si lo vas a saber hacer - Vomar corta la llamada.

Kodaka pone un pie en frente de todos sus aliados, levantando la cabeza y dejandola fija en Linz dice:

- llegó el momento, no podemos permitir que ejecuten a Khito, hay que atacar ahora.

- pero, ¿si atacamos, no lo mataran? - preguntó Shon.

- ellos quieren provocarnos, por eso hacen esto, y nosotros vamos a responder, tal y como quieren, al menos eso quiere Vomar.

El rey ve desde su trono algo aparecer desde el fondo del campamento, sus ojos no podían creer lo que estaban viendo, se pone de pie de un salto, la guerra había comenzado.

- aquí piloto al mando de la misión cometa - decía Mocaly por el comunicador.

15 aviones se esparcian por el cielo, su blanco eran los muros de la ciudad, cada uno cargaba con una bomba que perfectamente lanzada podría abrir el paso a la ciudad sin matar a inocentes ciudadanos con la explosión.

Kodaka daba la señal de empezar a avanzar, él iba delante de todo el ejército, habían al menos unos 5 metros de distancia con ellos, la ciudad no estaba tan cerca, así que llegarían a ella una vez caiga la primera muralla.

- mi rey, ¿qué hacemos?, ¿soltamos al dragón?

- esos aviones los he visto, contienen bombas... Sé lo que quieren... vamos a dejar que rompan el muro, quiero que todo nuestro ejército esté del otro lado para cuando eso pase, vamos a pelear - el rey sonreía por la emoción.

En cosa de minutos había miles de soldados armados hasta los dientes, también había leones con correas, también había policías, algunos ciudadanos con cuchillos y hachas. Mocaly veía todo esto desde arriba y sabía que sería una gran masacre.

- están todos reunidos al otro lado de la muralla, si tiramos una bomba ahí mataremos a la mitad de su ejército - dijo Mocaly.

- sería una victoria fácil - Quic.

- Khito ya no está en la zona de ejecución - Kodaka.

Khito había sido llevado al centro de todos los soldados, de esta manera no se atreverían a atacar.

- sí, creo que ya sé dónde está - Mocaly.

Khito parado en medio de todas esas personas sólo se dedicaba a mirar al cielo, los aviones era algo que ya no pensaría volver a ver, además, todo ese tiempo encerrado, el cielo se empezaba a extrañar, era lo más hermoso que podía ver antes de morir. Cuando bajó la vista notó que un soldado lo estaba mirando fijamente.