Espera, yo...

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En una mesa dentro de una habitación oscura y desconocida, 6 de 7 sillas eran ocupadas.

- muy bien, el plan ya está en curso, este planeta está siendo completamente invadido por los Keynetals.

- bueno, entonces, ¿cómo encontraremos a nuestro problema principal?, ¿alguien tiene alguna idea de dónde puede estar?

- el hombre al que buscas vendrá hacia nosotros, y traerá todo lo que nos pertenece.

- por cierto, ¿quién es él?

Todos observan a un hombre sentado en una silla a un par de metros de la mesa, en plena oscuridad.

- él es un humano.

- ¿y qué hace aquí?

- descubrió nuestro escondite.

- ¿tienes planes para él?

- el futuro es un enigma, el tiempo dirá que tanto puede aportar.

- ¿y qué dices tú?

- yo digo que le demos la corona -mira al hombre y se le acerca- no tienes muchas alternativas humano, el tiempo trajo a ti tu glorioso momento, podemos entregarte poder, y por supuesto, conservar tu vida, a cambio de un pequeño favor, dime, ¿quieres ayudarnos, Orion?.

- ¿cómo sabes mi nombre? -habló por fin el hombre.

- desde hoy serás un rey.

En un supermercado.

- sólo espero que mamá y papá estén bien -Cristian.

- nadie contesta las llamadas -Luke.

- debemos decidir, ¿qué es lo que haremos? -Khito.

- no estamos seguros de que ellos se encuentran en nuestras casas -Esteban.

- tampoco podemos ir casa por casa ¿o si? -Zunh.

Kodaka se levantó.

- ¿dónde vas? -Cristian.

- veré si puedo encontrar un baño.

Kodaka camino hacia un jóven, debía tener unos 5 años más que él, era alto, cabello negro y liso, cargaba una escopeta en sus manos.

- hola.

- hola chico nuevo, mi nombre es Cefur.

- es un gusto Cefur, se ve que están bien equipados.

- así es, en cuanto supimos que el mundo se acababa vinimos aquí con todas nuestras armas.

- ¿entonces no viniste solo?

- no, claro que no -giró su torso y le mostró -por allá puedes ver a amigos, Leo, Fernanda y Matias.

- qué bien, son un buen grupo, ¿y los demás?, ¿fueron llegando solos?

- sí, tal como ustedes, poco a poco va llegando gente, mientras más seamos mejor ¿no?

- supongo.

Kodaka se sentó frente a él, encima de una caja de supermercado.

- cuéntame de ustedes -dijo Cefur.

- bueno, por allá puedes ver a todos, Cristian, Khito, Esteban, Luke, Shelo, Cofil y Zunh, y también están Benjamin y Samuel que se nos unieron.

- ustedes si son bastantes, será difícil recordarlos a todos.

- puede ser, pero ninguno de ellos podía faltar, sólo nos queda encontrar a un compañero, Elias.

- no tendrán que buscar tanto -dijo alguien tras una puerta, apareciendo desde las sombras.

Escuela de SupervivenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora