Escuela de Supervivencia

Lluvia De Fuego

- ¿puedes ver algo? - Linz.

- no, creo que ya los perdimos - Mocaly.

- de cualquier modo no deberíamos salir por los próximos días - Linz.

- ¿qué tan lejos estamos? - Quic.

- lo suficiente como para aguantar algunos días antes de que nos encuentren - Vendami.

- tenemos comida y armas, todo lo necesario de momento - Zunh.

- ¿qué me dices del agua? - Kuro.

- alguien va a tener que salir a buscar cuando se acabe, queda muy poca y no queremos morir - Linz.

- ¿ya habrán encontrado el tanque? - Cofil.

- lo más seguro es que ya saben que no estamos allí - Holegon fumaba un cigarrillo - pero aún así les debió costar abrirlo.

- ¿cuál es el plan? - Khito.

- siéntate - Vendami.

Todos se sentaron al rededor del chico para escuchar.

- Vomar me dijo que cruzarán la cordillera, van a unirse a otro grupo de personas, luego de eso iban a enfrentar a los Superiores con la información de la computadora.

- la misma que está enterrada bajo trozos de piedra - Quic.

- no se preocupen, la computadora no guardaba nada, esos malditos no nos dijeron nunca donde se encontraban - Rey.

- pero debe haber algo - Luker.

La cara del Rey cambió totalmente con la llegada de un recuerdo.

- sé dónde quizás estén.

- sueltalo de una vez - Lkros.

- hay un pueblo, también está bajo su mando, no digo que ellos estén allí, pero más de una pista debe haber - Rey.

- entonces ahora hay que encontrar una manera de salir de aquí y llegar hasta ese lugar - Linz.

- ojalá fuera tan fácil como suena - interrumpió el Rey - hay que cruzar el mar.

- ¿qué? - saltó Quic - ¿cómo que el mar?

- no me refiero a cruzar todo el océano, si seguimos la ruta por el mar llegaremos directamente a su puerto, a menos que quieras caminar por semanas, porque si es así, ellos van a encontrar primero a los Superiores - Rey.

- puedo encargarme de eso, tengo un barco no muy lejos de aquí, si nadie lo ha tomado podemos largarnos de una vez - Holegon.

- ¿también tienes un barco?, ¿tu naciste en un apocalipsis zombie? - Luker.

Linz cambió el rumbo de la conversación y se dirigió a Kuro.

- ¿cómo está él?

- está paranoico, o eso creo, no quiere confiar en nadie más, tampoco ha recibido mi comida - Kuro.

- rayos, ¿ya le dijiste? - Linz.

- no ha querido escucharme - Kuro.

- entonces tenemos que salir lo más pronto de aquí, o se morirá de hambre el lobo solitario - Mocaly.

En medio de una habitación, dentro de un refugio bajo tierra, al igual que el refugio donde Add se había perdido tiempo atrás, allí estaba él, pero con la diferencia de que esta vez, Kodaka era el perdido. Las manchas en las paredes lo vigilaban, el olor a húmedo recorría todo el lugar, normal para estar cerca de un desagüe, un mísero rayo de luz alcanzaba a iluminar ru rostro a través de un agujero en el techo. Kodaka no quería saber nada, había perdido mucho, Add, Scarlatta, Tom, Shon, las imágenes se repetían en una secuencia tan rápida que no lo dejaba reflexionar, pero era lo suficiente como para atormentarlo.