Capitulo treinta y nueve ~Memories~.

318 30 5
                                    

—Todo está bien ahora, bueno, siempre lo estuvo. Tengo que admitir que las cosas no fueron fáciles, aunque tampoco tan difíciles- reí levemente-. Lo sé, siempre viendo el vaso medio lleno. Sé que hace tiempo no venía, pero comenzaba a sentirme rara, ya sabes, venir, hablar e irme. No es algo normal, al menos no para mi ya que nunca lo había hecho, además de que Ben no estaba muy seguro sobre hacerlo, pero creo que finalmente lo aceptó. Supongo que aún no supera lo que pasó, pero espero que pronto lo haga. Muchas veces lo he encontrado en silencio observando a Jeffrey, muy pensativo, luego dice que no es nada, pero creo que es algo obvio que piensa en ti. Jeffrey está bien, grande, sano y alegre, es un niño muy alegre. Habla español a la perfección, lo cual molesta mucho a Ben, es la viva imagen de él, lo cual es increíble. Sigue esperando que su cabello se oscurezca- reí levemente-. Temo por el día en que sepa que le mentimos al respecto, ya que es un pequeño bastante dramático. Anna por su parte- suspiré-. Anna es demasiado tranquila, simplemente toma un libro, los crayones y se sienta a colorear mientras que su hermano hace desastre en la casa. De todos modos ambos son adorables, como el shing y el shang. Demasiado opuestos pero al fin y al cabo se complementan de una manera tan perfecta que es increíble. Se aman demasiado, hace un mes hicieron una pijamada, aunque esa pijamada duró casi dos semanas, se negaban a abandonar el cuarto y dormir en camas separadas. Se la pasaron mirando peliculas de Disney, coloreando y comiendo. Lucy a veces trae a sus pequeños y Joe también. Amo ver la casa con los pequeños pelirrojos corriendo a los rubios- sonreí recordando-.



—Tía Sofia- llegó Lisa corriendo-. Ayúdame.

—¿Qué pasa cariño?- me alarmé-.

¡Te atrapé!- gritó Michael tocando a la pelirroja y corriendo lejos-.

Se escucharon muchos gritos y finalmente vi a Ben entrar a la cocina serio.

—¿Cuándo se van?

 

—Es increíble que el tiempo pase tan rápido. Parece ayer cuando fue el primer día de kinder de Jeffrey.

—No, mamá- hizo puchero-. ¿Por qué me odian? ¡No me abandonen!

—No te abandonamos amor, prometo volver por ti en unas pocas horas. Aquí podras hacer amigos, jugar, aprender, veras que pasaras un muy buen rato y mañana tendras ganas de volver.

—¡Pero no quiero! Quiero volver a casa contigo y papá.

—Señora Jones- llamó mi atención la maestra-. Puede dejarlo y observarlo desde allá- señaló una puerta-. Él estará bien, verá que le agradará al instante y se quedará sin ningún problema.

—¿Segura?

—Muy, no es el primero que hace esto.

—Vamos cariño- Ben tomó mi mano-.

Me alejé escuchando los gritos de Jeffrey, peleando conmigo misma queriendo correr con él en brazos y nunca dejarlo solo. Me escondí detrás de la puerta y noté como la mujer secaba las lagrimas de mi pequeño quien de inmediato asintió y corrió junto a los demás niños. Pequeño mentiroso.


—Recuerdo que ese día no quería volver a la casa, casi llora cuando nos vió a Ben y a mi en la puerta esperando por él. Es un pequeño demasiado dulce y servicial, adora ayudarme en la cocina.

—¿Necesitas ayuda?

—Claro mi amor, gracias por preguntar.

El pequeño arrastró una silla a mi lado y luego se subió en ella. Le acerqué la fuente y comenzó a armar las galletas.

—Gracias por ayudarme cariño.

—Siempre me gusta ayudarte.

Ben a lo lejos sonreía con Anna en brazos. En su mirada podía notar lo feliz que estaba.


—Recuerdo la primera navidad junto a Anna. Nos reunimos con Gwil, Joe, Lucy y Rami. A Joe no se le ocurrió mejor idea que regalarle a Jeffrey un auto, pero no uno pequeño, uno enorme, incluso si quería, Ben podía entrar en él.


—Joe te voy a matar- gritó Ben corriendo detras del auto-. Jeffrey vas a romper algo.

—Joe, ¿No podías regalarle uno pequeño?

—Pero así es más divertido- hizo puchero-.

—Deberas pagar todo lo que Jeffrey rompa- dijo Layla riendo-.

—Le quitan la diversión a la navidad- dijo "ofendido"-.

—¡Gwil cuidado!

—Al año siguiente llegó con un perrito- reí-. Creo que a pesar de todo lo que hemos pasado, ha valido la pena, cada pelea, cada lagrima derramada. Y es que miro atrás y recuerdo todo lo vivido, y esto no puede gustarme más. Hago mi mayor esfuerzo con Jeffrey, aunque me gustaría que estuvieras aquí, estoy siguiendo todas las cosas que me sugeriste. Estarías orgullosa del hombre en el que se está convirtiendo.

Ma- Jeffrey y Anna aparecieron a mi lado-. ¿Ya nos vamos?

—Solo un momento más. ¿Por qué no le pides a papi las flores?

El pequeño se alejó corriendo hacia Ben, quien nos observaba desde el auto.
Luego de unas palabras se acercaron con las flores.

—¿Entonces ella es la mami de Jef?

Giré a ver a Anna quien observaba la foto de Melody. Pronto sus ojos verdes se posaron en los mios, al instante asentí.

—Pero tu también eres su mami- asentí-. Jef es afortunado, dos mamis- sonrió y se sentó en mis piernas-.

—Sof, creo que es hora de irnos.

—Solo... Coloquemos las flores y volvamos a casa, ¿Si?

Ben asintió mientras se arrodillaba a mi lado posando su mano en mi hombro. Me extendió su mano para ayudarme y levantarme del cesped.

—Hola mami- Jeffrey colocó algunas flores junto a Anna-. Espero te gusten las flores, Anna y yo las escogimos. Gracias por cuidarnos desde el cielo y por elegir a Sofi como mi mamá.

Sequé mis lagrimas mientras Ben me abrazaba y besaba mi frente. Permanecimos unos cuantos minutos en silencio, escuchando algunas cosas que Jeffrey decía. Ben suspiró.

—¿Nos vamos?

Lo miré a los ojos y asentí.

—¿Te vas a despedir?

—Si, no tardo.

Acaricié mi vientre de ocho meses y miré a Ben alejarse con Anna en brazos y Jeffrey abrazando su pierna. Una sonrisa se asomó y suspiré.

—No dejaremos de venir, lo prometo Melody. Y nunca dejaré que Jeffrey se olvide de ti. Prometo contarle todo lo que has hecho en tu vida. Cuando tu familia esté lista, por supuesto que podran conocerlo. Por el momento lo mantenemos lejos de las camaras, claro que Joe sube alguna foto a instagram, es el tio orgulloso. Te agradaría lo que estamos logrando, y a mi me gustaría que estuvieses aquí con nosotros. Definitivamente formarías parte de nuestra familia...

Only You Donde viven las historias. Descúbrelo ahora