¿¡Hʏᴜɴɢ!﹖

Capítulo 25.

Los heridos habían sido llevados por las autoridades a un hospital, Namjoon entre ellos siendo acompañado de Jimin quién le tenía la regañada de su vida lista a Seokjin pero la guardaría para más tarde. Yoongi anestesiado también se encontraba hiendo a un hospital para curar las heridas que se había hecho al escapar de la camisa de fuerza y luego sería enviado a una prisión con servicio de terapia.

Jungkook hacia una llamada telefónica a su madre quién lo llamaba después de ver el desastre en las noticias, Jihyun y Seokjin deseaban hablar con Homin pero era claro que Hoseok tenía más importancia, era su hermano por Dios. Así que ahí estaban, sentados en el auto de Jimin, observando el desastre que la mente peturbada de Yoongi había creado pues tal vez no se note pero si logró incendiar la cocina del hospital.

- Le debes una gran explicación a mamá y a papá.- Indicó Hoseok subiendo las ventanas para que todo lo que hablarán fuera entre ellos.

- Lo sé.- Respondió Homin cabizbajo, analizando las motas de colores de sus gastadas doctor Martens de color vino oscuro.

- Jiwo no paraba de llorar y aún te extraña, le piensa poner Homin a su futuro hijo en tu honor.

- ¿¡Ya va a ser mamá!?. - Homin quiso llorar al saber la noticia.

- Eso esperamos.- Hoseok tenía la manía de morder el interior de sus labios cuándo algo le incomodaba, haciendo que su mandíbula se tensará y se viera más rudo, algo en común con su hermano menor. - Nunca llamaste.

- No tenía los huevos para hacer eso.- Dijo rascándose la nuca con insistencia, cómo siempre hacía cuándo estaba nervioso.

- No llegaste a casa, pudiste haber vuelto, Jihyun casi muere sin tí y sobre todo ¿Porqué diablos Jungkook estába contigo?. - Hoseok estaba tan exaltado que un severo color rojo se asomaba sobre sus mejillas de lo eufórico que estaba.- ¡LLORÉ! por tí, todas las noches me recriminaba el porqué no fuí un buen ejemplo, me decía que debí cuidarte más y resulta que todo este tiempo has estado vivo.- una lágrima surca la mejilla izquierda de Hoseok mientras que su voz baja y se quiebra por un segundo.

- No volví porqué descubrí que Yoongi estaba muy mal.- Hoseok solo rodó los ojos.- Tenía muchos problemas sus padres se habían divorciado recién, su hermano mayor estaba lejos y su mejor amigo había muerto de una sobredosis...

- ¡CLARO QUE ALGO ESTABA MAL ES UN PSICÓPATA!. - Gritaba mientras manoteaba al aire, Hoseok solía tener expresiones infantiles para alguien adulto y no solían encajar bien con su semblante serio, sin embargo siempre analizaba la situación en silencio mientras te observaba cruel y fríamente.- ¡DORMISTE CON UN MALDITO PIRÓMANO!. - Los gritos de Hoseok eran amortiguados por el auto, sin embargo se podían escuchar un poco de lo que gritaba, Homin ya se veía venir esto y solo miraba aturdido el suelo del auto. Jin se mordía su dedo índice al ver a Hoseok tan desesperado, era claro que en cualquier momento se lanzaría a llorar y tenía sus razones justas... Es que estas cosas solo no pasan.

Jihyun observaba a Jungkook a la lejanía, había olvidado lo grande y dominante que podía llegar a verse y él bueno, no era más alto que su hermano mayor era hasta unos pocos centímetros más bajo que Jimin. De cierta forma extrañaba el calor que los fuertes brazos de Jungkook le podían proporcionar pero al escuchar la conversación con la señora Jeon, sus esperanzas se fueron al caño.

- SÍ mamá, Homin está bien... Sí, sí le diré que le mandás saludos. Claro que te adora eres la mejor suegra del mundo. Está bien, dile a papá que deje de gritar estamos bien, probablemente vayamos al hospital y luego a casa para verlos. - Jihyun se sintió muy idiota por haber dejado a Jungkook pero notó que era más feliz con Homin, al parecer su amigo si sabía tratarlo bien y era obvio que Jungkook no se iba a dejar mangonear toda la vida. Entonces su mirada se volvió a centrar en el auto de su hermanos- Sí aquél auto tan brillante ahora estaba sucio y un poco abollado.- Observó como Homin volvía a hablar. Le parecía shockeante verlo tan maduro, casi igual que Jungkook quién era mayor que ellos, nunca pensó que lo volvería a ver pero estaba orgulloso del gran ser humano en el que se había convertido.

Mientras que en el auto las cosas eran más personales.

- Me quedé ahí para ayudarlo, no pude volver porque jamás hallé una forma de decirle que me iría a casa, me aterraba la idea de encontrarlo muerto en su desván. Luego empecé a estudiar en su casa y un día encontré un trabajo, Yoongi estaría bien porque lo podía ir a cuidar en el descanso y luego nos mudamos.- Homin hizo una pausa y tomó una gran bocanada de aire. - El doctor me dijo que sería mejor que viviéramos en un lugar cerca del hospital y luego lo internaron al ver que el tratamiento no funcionaba... Cada vez era más agresivo, más neurótico estaba totalmente loco.

- ¿Te enamoraste?. - Hoseok estaba más calmado ahora y una de sus manos reposaba en la ejercitada pierna de su hermano menor. - ¿Él llegó a hacerte daño?

- En un principio creí que era amor, pero solo era lástima...- Una sonrisa cansada surcó su rostro.- Yoongi sacaba lo mejor y lo peor de mí y de cierta forma era interesante tener el control sobre alguien, si quería Yoongi podía convertirse en mi sirviente solo para hacerme feliz pero yo no estoy tan loco.- Tomó la mano de su hermano y entrelazó sus dedos con lo de él, indicándole que en efecto estaba ahí y que ya no se iría. - Jamás me puso una mano encima, tenía miedo a hacerme daño.

- Aún sigo pensando que pudiste volver.

- Tuve la oportunidad pero simplemente había pasado mucho tiempo, escuché los rumores de mí muerte y ya no supe cómo remediarlo. Lo siento mucho.

- ¿Cómo llegó Jungkook a tu vida?

-Cuándo terminó con Jihyun se había convertido en el ser más miserable de todos. Un día lo encontré a punto de lanzarse al frente de un camión, estaba destruido, lo llevé a su casa con sus padres y me turné para cuidarlos a ambos y solo pasó, no sé cuándo o cómo, pero fue un gran apoyo para mí me ayudó mucho cuándo Yoongi fue internado y me sigue ayudando hasta hoy. Recuerdo que un día hace dos años me dijo que me amaba y yo sentía lo mismo y aquí estamos.

- Entonces son pareja.- Concluyó Hoseok.

- Sí.- Afirmó Homin sonriendo cómo un tonto enamorado.

- Mamá va a matarte.

- Lo sé.

- Eres un idiota.

- Sí, también lo sé.

- Te amo.- Dijo con todo el amor que un hermano mayor pueda sentir por su hermano menor, mirándolo con ojos cristalizados y un semblante casi tan cálido cómo el de su madre.

- No hubo noche o día en el que no pensara en ustedes, también los amo.

- A cómo vuelvas a hacer una de tus gracias te reviento una piedra en el cráneo.

- Anotado. No volverá a pasar.

- Dame un abrazo, imbécil. - Hoseok se inclinó frente a su hermano menor y extendió los brazos.

Luego de eso Hoseok bajó del auto, Seokjin tenía muchas ganas de llegar y abrazar a Ho, pero al ver al pequeño y destruido Jihyun le cedió su lugar y el menor entró de una al auto, cerrando fuerte la puerta pero a la vez con suavidad, era el auto de su hermano mayor después de todo.

- Eres un maldito pedazo de mierda.- Fue lo primero que salió de la boca de Jihyun.

- Lo sé y no puedo discutirlo.

- Pero eres mi mejor amigo.- Jihyun lo abrazó con todo el amor que tenía guardado, hace mucho no abrazaba a alguien y extrañaba demasiado a su mejor amigo.- ¡NO TE VUELVAS A IR IMBÉCIL!.- Gritaba el rubio mientras se hundía en el cuello del más alto.

- No lo haré bro.- Dijo el cenizo palpando la espalda del mayor.

No lo volveré a hacer.