Al día siguiente desperté y “V” se había ido, me sentí aliviado ya que no sabía que decir, me levanté normal y mamá ya me había hecho el desayuno cuando sorpresivamente mi tío Jimin llegó a desayunar.
-¡Jinnie!- me dijo amoroso y me despeinó - ¿Cómo has estado? Tiene mucho que no te veo ¿Qué tal la escuela?
Mi tío me quería mucho porque mi mamá era su prima favorita y de hecho él decía que cuando nací, me parecía mucho a un amigo muy querido, por eso me llamó Seokjin.
Siempre estaba de viaje ya que decía no soportar estar en el mismo lugar mucho tiempo y me traía regalos pero mamá pensaba que no debía aceptarlos y se lo prohibió, mis tíos abuelos tenían mucho dinero pero los demás en la familia no teníamos esa suerte así que el se conformaba con visitarme y escucharme, de pequeño me contaba que tuvo un amigo que solo él podía ver, como un angel pero sin aviso dejo de aparecer y como todos creían que estaba loco se alejo de la gente y pasó mucho tiempo en terapia hasta sentirse mejor, yo lo quería muchísimo pues el me entendía bien y era divertido y culto.
Platicamos alegremente toda la mañana hasta que llegamos al tema de mis clases de música, le conté de mi maestro y de lo duro que era conmigo, él no toleraba que me tratarán mal y se ofreció a acompañarme a la escuela para tratar de entender porque razón el maestro se portaba de esa forma, no me pude negar y nos dirigimos a la escuela.
Narra Yoongi.
Llegué fastidiado como siempre, nunca me gustó estar incómodo y la gente me estresaba a menudo pero había encontrado en la música la manera de tolerar está existencia vacía.
Llevaba más de 10 años buscando a Jimin y tarde mucho en hacerme con el dinero suficiente para tramitar documentos con los cuales salir de Japón, un par de años más en ubicarme en Corea de nuevo y otros tantos en llegar a Busan.
Tarde para mí, Jimin se había mudado y nadie conocía su paradero, sus padres lo mandaron a viajar para que estuviera más tranquilo para que superará las pérdidas temerosos de que volviera a intentar quitarse la vida o se volviera loco. Sus vecinos creían que había perdido la razón.
Recurrí a todos los medios que tenía pero nada así que supuse que viviría en otro país, me resigne, perdí mi trabajo y ahora estaba de nuevo aquí en está existencia efímera donde sólo me quedaba el consuelo de poder morir y regresar a ser la parca, para no volver a cometer el error de amar de nuevo.
Aunque no había día que no pensara en Jimin, extrañaba su sonrisa y la manera que tenía de hacerme reír con sus pláticas y la manera como me contaba toda su vida.
Realmente lo amé tanto que aún de vez en cuando seguía algún rastro esperando encontrarlo. Mi hermoso pollito sufrió tanto y todo era mi culpa, por no estar con él.
Para colmo de males un día lo vi entrar por la puerta del salón… así era, el imbécil de Seokjin, no entendía cómo era posible pero era él, su cara de estúpido era inconfundible saludando amablemente porque no tenia idea de quién soy y menos de quién fue él.
No puedo evitar ser cruel porque todo esto inicio por su culpa pero al mismo tiempo le agradezco que conocí a Jimin, así que lo trato mal ¡Obvio! Pero le enseño bien como agradecimiento formando su carácter y eso algún día me lo agradecerá.
En eso pensaba mientras me sentaba en el piano tocando una canción que siempre le cantaba a Jimin desde que lo conocí, cuando escuché la puerta, supuse que iniciaba mi clase de las 4:00 PM pero me equivoqué, sentí pasos atrás de mi y seguí tocando sin importarme.
-Disculpe, necesito hablar con usted.
Me dijo una voz tan familiar que me quedé frío, no me moví, el insistió y tocó mi hombro haciéndome girar la cabeza despacio y verlo atentamente.
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Daré Hasta El Alma Por Ti (JinTae) TERMINADA
RomanceUn muchacho rico, un chico abusado y un dios de la muerte descubrirán en esta historia que a veces vale la pena darlo todo por amor. ¿Tu que harías para estar con tu alma gemela vida tras vida? ¿Que estarías dispuesto a dar?...