Cuando el gato no está...

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Cuando Ray volvió al refugió, en verdad espero que todo estuviera controlado, pero el resultado fue que encontró a una Gilda al borde del colapso mental al tratar de separar y vestir al trio dilema, mientras Nath lloraba porque alguien le había quebrado su espejo, Gillian se burlaba del pelirrojo mientras abrazaba a la otra rubia quien era mimada por la chica rubia mayor. Hayato corría por todas partes, buscando algo, y Ray podía ver a Don esconderse en el candelabro (¿cómo había llegado allí?).

—Bueno, quizás el jefe no pudo controlarlo — Bárbara se rio un poco de la situación.

—¡RAY! — Todos gritaron al unisonó al verlo, rápidamente se acercaron a hablarles todos al mismo tiempo, en especial, Gilda, Don, Hayato, Anna y Nath.

—¡Tienes que hacer algo! —

—¡Emma! —

—¡Norman! —

—¡Lleva días encerrada! —

—¡No sale de su habitación! —

—¡Ni siquiera para comer! —

—¡No me escucharon y rompieron mi mejor espejo! —

—¡Y oigo la voz de Ayshe detrás de la puerta! —

Ray se alejó instintivamente unos pasos, no lograba entender nada de lo que le decían todos al mismo tiempo.

—¡Esperen! — él alzó su voz para callarlos a todos, se alejo dos pasos mientras ponía sus palmas al frente para lograr algo de distancia —¡No los oigo si me hablan a la vez! — él enarcó sus cejas para que todos retrocedieran y se quedaran callados — Gilda, ¿qué sucede?, ¿Dónde está Emma? —

—Se encerró en la biblioteca desde que te fuiste — Dijo ella bastante nerviosa — Pensé que podría controlar las cosas aquí, pero... ¡OLIVER!, ¡Aléjate de ZACK! — Gilda salió corriendo detrás de los chicos.

—Okei... ¿por qué Emma se encerró en la biblioteca? —Pero ninguno de los presentes sabía exactamente el motivo.

—Aunque ella es preocupante, Norman tampoco sale de su habitación — Continuó hablando Don —Trate de buscarlo para preguntarle como iba la medicina, pero cuando me recibió, pude ver que tenía muchos morados en su cuello y parecía muy adolorido —

—Y cuando yo perseguía a Don-san, pude oír a Ayshe gritar en la habitación del jefe, pero ninguno contesto al tocar la puerta — Ray escuchaba atentamente, sintiendo que le daría un sincope al deducir fácilmente lo que pasaba en esa habitación.

—¿Qué te paso a ti? — Ray miró a Nath, que se veía lloroso.

—Trate de cuidar a Anna, ya que tú no estabas, pero Gillian rompió todos mis espejos, y la raptó por un par de días — se quejó él realmente adolorido por ser separado de su amor.

—¡Eso no es cierto! — Anna se sonrojó al oír las quejas sobre ella.

—Dijeron que debía tener una cucharada de mi propia medicina por intentar separarlas — Nath limpiaba sus lágrimas con un pañuelo.

Ray no sabía por donde empezar, suponía que por el principio.

—Bárbara, por favor ayúdame en algo — La chica sonrió mientras asentía.

—Claro— Ella le siguió mientras Ray caminaba en dirección a la habitación de Norman.

Primero tocó un par de veces, pero como nadie respondió, le dio una señal a la chica, quien pateó la puerta para dañar la cerradura.

Ray entró bastante enojado, rezando a todas las deidades, en especial al impronunciable y a mamá gallina que estaba en el cielo, que no fuera lo que estaba pensando. Fue entonces que encontró a una chica de piel canela, con solamente una camisa de unas tallas más grandes de las que ella usualmente usaba, y en su regazo, descansaba Norman, solamente con su ropa interior, quien era acicalado por ella, él parecía estar dormido profundamente, Ayshe solo le hizo una señal para que hiciera silencio, pero no, ¡oh!, ¡Claro que no!

—¿Eh?, ¿qué están haciendo? — Los susurros se oyeron detrás de él, sus hermanos más pequeños fueron de chismosos a mirar.

—¿Ellos dos estaban haciendo eso?— Y los cuchicheos detrás de él lo enojaban más y más.

—¿eh?, ¡de verdad? —

—¡TODOS USTEDES AFUERA! — Ray cerró la puerta, dejándolos fuera de la conversación.

Él gritó despertó a Norman, que se sobresaltó bastante, él al ver a Ray frente suyo, se asustó un poco al ser descubierto.

—Norman, me puedes explicar, ¿por qué tienes el cuerpo lleno de chupados y arañazos? — Norman usualmente tenía una tez muy blanca, pero quedo totalmente rojo al darse cuenta que Ray lo veía en ropa interior.

—Esto... veras —

—Cambie de opinión, no quiero tus explicaciones — Ray lo miraba fríamente, Norman sintió un gran escalofrió en su espina dorsal, la postura, la mirada, la intensa aura asesina, todo de Ray en ese momento lo llevo a la edad de cinco años y Mamá los regañaba por las travesuras en las que lo metía Emma.

—No entiendo porque estás enojado —Ayshe intervino en ese momento, lo que le dio más miedo a Norman — Tú dijiste que podía hacer esto —Ray se golpeó la frente en ese momento.

—¿En qué momento te di permiso de tener sexo con él?, ¡además descuidaron a todos los demás por estar encerrados aquí todo el día!, ¡y ni siquiera sé que pasa con Emma! — Ayshe se encogió de hombros, debido a que él tenía razón, por su culpa, Norman había descuidado a los otros chicos del refugio.

Además, el aura de Ray cuando regañaba daba mucho miedo, ahora entendía porque Emma y Norman parecían tan aterrorizados y avergonzados cada vez que él se enfadaba.

—Lo siento mucho — Norman bajo la cabeza —No tengo excusa, me deje llevar por mis instintos — Ayshe bajo también la cabeza.

—¡No te disculpes y empieza a hacer la estúpida medicina! — Ray alzó su voz bastante enojado —Iré a ver que rayos le pasa a Emma — él salió de la habitación hecho humo.

—¿Me ayudas? — pidió él albino a Ayshe, ella asintió levemente a su petición mientras el albino le sonreía.

¡Flechazo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora